Death Note: Dulce Manzana ( Light,L y tú)

capítulo II

REPLAY

_____* se levantó temprano a la mañana siguiente. El mejor amigo de la chica le había prometido llegar temprano por ella, así que estaba lista desde antes del mediodía.

Unas casas más a la derecha (Tres pars ser exactos) vivía una castaña oscura con grandes ojos cafés llegando a negros, muy animada. Había visto a la fémina mudarse ayer en la tarde y quiso saludar, sólo había un problema.

El chico de ojos azules que la acompañó.

Ciertamente el chico la dejó sorprendida, y por eso es que esa mañana iría a presentarse ante la nueva vecina.

Mientras _____* miraba tele, su vecina se debatía mentalmente en si tocar o usar el timbre.

_____* se levantó del sofá debido a unos golpeteos en su puerta. Se acomodó el fleco y accedió a abrir

-¡Hola! Mi nombre en Hinami, soy tu vecina- Señaló- Vivo a tres casas de aquí y vine a darte la bienvenida. Ten

Algo nerviosa Hinami le dio la canasta con unos panecillos a la femina y sonnrió

-Ah, hum...Mi nombre es _____* y, hum...Es un gusto

Ambas chicas sonrieron. ______* más sonrojada que Hinami. Por suerte, un ojiazul cara de Ken llegó a tiempo.

-Hey ____- oh. Hola, me llamo Dilan- Extendió su mano hacia la ahora sonrojada vecina y esta gustosa, aceptó

Despues de una corta presentación y un incómodo silencio (Para _____*) Dilan decidió llevar a su mejor amiga, y a su vecina, a la sorpresa que este le tenia a la mencionada.

Al llegar a una pequeña serie de centros comerciantes dando a la calle fue lo primero que vieron. Uno de ellos tenía una manta blanca tapando la mayor parte de la zona delantera. Éso llamó la atención de la chica mayor.

-Dilan, ¿Que es esto?-Ansiosa de saber que era bajó del auto primero sin quitar la vista de la enorme manta

-¡Sorpresa!- Grito el castaño al momento de jalar la blanca tela que cubría el lugar

Al descubrir su contenido, una enorme sonrisa se dibujó en Dilan mientras la castaña miraba más que asorada aquel lugar con paredes blancas y ventanas tan limpias que podías verte en ellas.

_______* se asomó por las ventanas mirando dentro de las cuatro paredes. Unos pares de mesas redondas blancas con un juego de cuatro sillas estaban a los costados del pequeños pasillo que daba al recibidor. Una vitrina de cristal con un florero azul junto a una caja de metal era lo que había como mostrador. Detrás de esto se podía ver una puerta color rosa pastel con un letrero bien adornado de "Solo personal autorizado", en las paredes yacían repisas y estantes de madera color arena vacíos, a lado de estos había cuadros de paisajes (En su mayoría) que adornaban las pálidas paredes color rosa pastel dándole un toque delicado. 

Cuando la propietaria giró para ver a su amigo este ya se encontraba girando la llave para abrir la cristalina puerta. Con una sonrisa le dio un pequeño empujón a la puerta y esta abrió enseguida, _____* fue la primera en entrar, el olor a pintura había quedado impregnado en el lugar, pero aun así seguía viéndose bien. La chica que venia con los dos amigos entró hasta el final viendo cada rincón del local con cuidado, Dilan le dio las llaves a su amiga y juntos fueron a inspeccionar la cocina e hicieron un pequeño inventario con todo lo que ocuparían. El chico quería que la joven empezara hoy mismo con el pequeño negocio, aunque tardaran un poco en llenar todo. 

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Una semana había pasado y el pequeño local de nombre (Es aquí donde ustedes ponen el lindo nombre :3) tenía una gran clientela. Llegaban desde niños hasta ancianos, y es que los postres de la chica eran simplemente deliciosos, tenía para todas las edades y de todos los tipos. Pero, había cierto hombre vestido de traje y sombrero que iba casi semanalmente a aquel pequeño restaurante, y lo más extraño, es que siempre llevaba una gran porción de dulces y postres.