Capítulo 4

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Me desperté por el frío que comenzaba a hacer efecto en mis huesos, me dolía la espalda y otras partes del cuerpo, bueno era obvio había dormido en el piso, junte las pocas ganas que tenía y me dirigí al cuarto de baño, me quite la ropa de ayer y entre a la regadera, enjuage y lave mi cuerpo tratando de borrar todo el rastro de las palabras tan hirientes que Lena me había dicho, pero no pude se habían tatuado en mi piel.

Con resignación cerré la llave del agua, salí de la ducha para caminar desnuda hasta mi cuarto y poder tomar una toalla del cajón de mi mueble, busqué un poco de ropa y me la puse, nada fuera de lo normal solo un vestido color rosa, zapatos del mismo color y un abrigo gris para el frío. Tomé un pedazo de pan para echarle mermelada y salir de mi apartamento. El frío era espantoso, compre un café en el puesto que estaba en la plaza y camine hasta mi trabajo.

Al llegar subí por el ascensor, me traslade rápido hasta mi espacio de trabajo para que nadie me molestara, comencé a corregir los artículos que Snapper me pidió.

El tiempo pasó volando porque cuando miré el reloj ya marcaba las 3:15 p.m. Hora de comer; dejé todo lo que estaba haciendo y trate de apurarme para salir, casi olvidaba mi celular lo que hizo que me regresara a mi escritorio cuando me di la vuelta choque con alguien más bien Alex, mi hermana.

¿Qué haces aquí?—hable cortante.

Por favor Kara solo quiero hablar tranquilamente contigo, quiero explicarte porqué no te dije nada—dijo angustiada y arrepentida.

En serio Alex, no tienes nada que explicar, entiendo todo a la perfección—trate de caminar fuera de la oficina.

Claro que no, solo trataba de protegerte—trato de acercarse a mí pero la aleje con mi brazo.

Eso no es protegerme, es mentirme. Ya no quiero saber nada de este asunto, solo quiero que Lena y Winn se casen para que se larguen de aquí y me dejen vivir mi maldita vida—sentía como mis ojos se estaban volviendo cristalinos ante cada palabra que decía mi hermana.

Kara, entiende. Lena me suplicó que no te dijera nada, ella no quería lastimar...—la interrumpí.

No lo entiendes, ¿verdad? Ella siempre ha querido lastimarme, siempre ha sido así, desde la universidad, tú veías como me trataba y nunca hiciste nada, solo eras un espectador más y el día de la boda afirmaste más ese papel, ese que desempeñas tan bien—las lágrimas comenzaban a bajar por mis mejillas, odiaba llorar—Por favor Alex, ¡Vete de aquí! ¡Déjame sola! ¡Vete!— para ese momento mis gritos ya se escuchaban afuera de mi oficina pero no me importaba solo quería que me dejara sola.

Escuche los pasos de unos tacones acercándose y podía imaginar de quién podrían ser, la autoritaria voz de mi jefa lo confirmó

Señorita Danvers, sea amable y por favor salga de mi edificio ahora o me veré en la penosa necesidad de llamar a seguridad para que le saquen de aquí, por favor, váyase—con cada palabra que mi jefa decía fui cayendo al piso, sólo trataba de cubrir mis ojos con mis manos, los sollozos que soltaba me hacían sentir avergonzada, no quería darle una mala impresión a la persona que siempre creyó en mí—Oh Kerah, por favor no llores, todo estará bien bueno esperemos que lo esté—Miss Grant apartó las manos de mi rostro y con sus dedos quitó todo rastro de lágrimas, sonrío ante mi mirada triste por lo que yo también lo hice— ¿Ves? Sonriendo te ves más bonita, aunque esa vestimenta no te queda para nada, ¿Cuándo compraras ropa de adulto, Kerah?—Volví a sonreír y negué, mi jefa jamás cambiaría, trate de levantarme rápido pero un mareo me lo impidió ante tal acción mi jefa sujeto fuerte mi cintura, quedando las dos muy cerca.

Break Me with Love (Supercorp)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora