Cambio

capitulo 36 [✔️]

Perdón por la demora, e estado con la cabeza en otro lado. Capitulo largo en son de paz.

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Abrí los ojos, y como era de esperarse, no tardó ni un minuto en que mi cerebro golpeara mi cráneo repetidas veces. No dolia tanto como la ultima vez, ya que no había tomado tanto, pero me sentía...cansada.

Voltee hacia la derecha, causando que el brazo de Tyler que estaba alrededor mío se cayera. Estaba dormido tan pacíficamente. Se le veía tranquilo. Su brazo nuevamente se levantó para abrazarme por la cintura por lo que rei y negué con la cabeza.

Ayer vinimos al dormitorio luego de que terminó el baile ya que Tania se fue con Bruno. No paso nada. Tuvimos una sesión de besos alta de tono por asi decirlo, hasta que Tyler se cayó de la cama y estoy segura se hizo un gran moretón. De ahí nos quedamos hablando hasta que nos quedamos dormidos.

Mi risita baja hizo que abriera un ojo. Puedo jurar que el color de ojos que tiene es de mentira. Sonrió cuando sus ojos se toparon con los míos.

-¿Te gusta lo que ves?- me pregunto sonriendo como un arrogante, lo cual era. Rodé los ojos lo miré.

-No te estaba viendo – dije de una manera que era obvio que lo estaba haciendo.

-A já- dijo atrayendome a él. Me iba a besar, pero movi la cabeza y la apoyé en su pecho. Se rió y comenzó a jugar con un mechon de pelo, que hizo que me relaje.

-Perdon pero probablemente tengo aliento de mañana, y eso no es bonito – dije haciendo que ria.

-Creeme que no me importa – dijo alzándome la cara y uniendo mis labios con los suyos – Sabes a vodka – dijo haciendo que le de una palmada de regaño, pero me reí con él.

-Y tu a menta, no se como – dije y me sente en mi sitio. Cogi mi celular de la mesa de noche para fijarme que hora era. Las 10am, era tarde, por almenos por hoy. Tenia que hacer mi maleta y estar lista antes de que venga a recogerme Christine.

Tyler no se despegó de mi, si no que apoyó su cabeza en mis piernas y me miró desde abajo.

-Son las 10am, tengo que hacer mis maletas y estar en el aeropuerto a las 4 en punto – dije tratando de pararme haciendo que el que estaba hechado en mis piernas gruña – Hora de soltarme - dije y se quejó - Vaya quien lo diría, tanto te mueres por mi que ni siquiera te quieres separar, ¿quién resultó siendo el pegajoso? – dije con voz aguda como si le estuviera hablando a un perrito.

-Hey, esto queda entre nosotros, si no mi masculinidad quedaría echa pedazos.- dijo jugando con una almohada, tirarndola al aire y atrapándola varias veces. Yo estaba abriendo mis cajones y sacando conjuntos de ropa.

-¿Qué masculinidad? – dije riendo mientras analizaba un sueter sin darle importancia al tema.

-Oh, no preguntes ese tipo de cosas, que te puedo mostrar mi masculinidad de muchas maneras – dijo parándose como un ninja. En menos de cinco segundos estaba detrás mío. Me volteó sobre mi sitio agarrándome de las caderas. Me pegó contra el mueble de la ropa y pegó su frente a la mia. Sus labios estaban a un centímetro de los mios.

Rocé levemente mis labios con los suyos y luego me separe con una carcajada.

-Lo que digas niño bonito- dije yendo hacia mi ropa nuevamente. Se quedó perplejo.

-No me puedes dejar asi – dijo yendo hacia mi con un puchero.

-Perdon, tengo que alistar mi maleta- dije abriendo el cierre de esta y dejándola sobre el sillón.

-Tienes razón, yo voy a hacer la mia- dijo recogiendo su camisa y poniéndosela por los brazos. Estaba sin nada en el torso, ¿olvide de mencionarlo? Había dormido con pantalones – Y después vamos a tomar desayuno al café, ¿qué te parece? – dijo cogiendo su terno y sus cosas.