Empezar de cero

459 41 7
                                    

Capítulo 20

La luz del sol entra por la ventana haciendo que mis ojos se sientan pesados. Trató de moverme pero unos brazos en mi cintura no me lo permiten.
Abro lentamente mis ojos y veo a Theo dormido frente a mi. Su rostro lucia tan Pacífico, como si no tuviéramos nada de qué preocuparnos. Sus brazos me apretaban hacia el tan fuerte que podía sentir como si fuéramos solo uno.

Con mi mano acaricio su rostro, sus labios, su rastro de barba. Theo era perfecto, al menos para mi.
Sin dudarlo dos veces, acerco mis labios a los suyos. Tan suaves, tan cálidos. Cuando estaba a punto de separarme Theo comienza a seguirme el beso. Nuestros labios se mezclan y después me encuentro arriba de Theo. Sus manos recorren mi cuerpo y las mías recorren su pecho. Cuando Theo comienza a levantar mi blusa un golpe en la ventana nos hace sobresaltarnos.

-Hey-golpean la ventana-¿Interrumpo algo?

Theo frunce el ceño molesto y yo suelto una pequeña risita. Theo abre la puerta y un policía se encuentra de pie fuera del auto. Veo cómo su espalda se tensa y yo me tenso también.

-La carretera ya está abierta-dice el oficial.-Pero veo que se encuentran muy comodos aqui

Theo no contesta, asi que lo hago yo para aligerar el asunto.

-Gracias oficial-digo dandole una sonrisa.

-No hay de que señorita-dice devolviendome la sonrisa. Theo sale del asiento de atras del auto y yo hago lo mismo. Estiro mis musculos y veo que el cielo ya se encuentra totalmente despejado.

-Disculpe-dice el oficial-A usted yo la eh visto en otro lado.

Me estremezco.

-No soy de por aqui-contesto.

El oficial me observa y despues sus ojos parecen abrirse.

-La chica desaparecida-dice sorprendido-La de las noticias.

-Me esta confundiendo-contesto tratando de alejarme pero me toma por la muñeca.

-No, no lo estoy haciendo.-dice.

Theo rapidamente aleja la mano del oficial de mi muñeca.

-Ya te dijo que la estas confundiendo.-dice molesto.

El oficial y el se dan unas cuantas miradas. Theo esta molesto, lo se por la forma en que su respiracion se vuelve pesada.

-Lo siento-dice el oficial-hemos estado buscando a esa chica desde hace meses.

Asiento sin decir nada. Theo entra al auto dejandome afuera con el oficial.

-El es muy violento-dice el oficial-debes tener cuidado.

-Es sobreprotector-digo sonriendo-pero gracias por el consejo.

Regresó al auto y Theo se encuentra con sus dos manos en el volante, sus nudillos están blancos, estaba apretando el volante con fuerza.

-Hey-le digo-mírame.

Theo voltea a verme y yo le doy una sonrisa.

-Empezar de cero, ¿recuerdas?

Theo suspira y me atrae hacia el. Abrazándome con fuerza.

-Es difícil cuando el pasado te persigue todo el tiempo.

Sonrío contra la piel de su cuello.

-Vamos a salir adelante-digo-juntos.

Theo besa mi cabeza y toma mi mano mientras con la otra sostenía el volante y comenzaba a manejar. Esto era lo que buscaba, estar de esta forma con Theo de nuevo.

-¿A dónde vamos?- preguntó y Theo besa mi mano.

-A donde tú quieras.

Sonrío.-No conozco muchos lugares.

-Entonces voy a sorprenderte-dice guiñándome un ojo.

-¿Qué hay de Vannia?- preguntó y Theo frunce el ceño.

-Puedes llamarla si quieres-dice entregándome su teléfono-Pero Vannia está muy dolida. Siente que la abandonaste de nuevo.

Asiento y decido que llamaré a Vannia una vez que Theo y yo nos instalemos en algún lugar seguro. Theo comienza a manejar y comenzamos a entrar a lo que parecía ser un bosque. Siempre había amado los bosques, me parecían los lugares más tranquilos y acogedores de todo el planeta. Theo maneja hacia una cabaña prácticamente en el medio del espeso bosque.

-¿Vamos a quedarnos aquí?-preguntó y Theo asiente.

-Creo que ahora mismo es el único lugar al que puedo llevarte sin que corras ningún peligro-dice y yo le doy un apretón a su mano.

-Gracias-le digo y Theo frunce el ceño-Gracias por hacer todo lo posible por mantenerme a salvo a pesar de...las circunstancias.

Theo me da una sonrisa triste y después estaciona el auto. Bajamos nuestras pocas pertenencias y entramos a la cabaña la cual era acogedora, toda hecha de madera. Era un lindo lugar. Uno de esos que te hacen sentir como en casa.

-Puedes dormir un poco si quieres-dice Theo-Tu habitación está ahí-señala una puerta.

-¿Mi habitación?-preguntó confundida.-¿No vas a dormir conmigo?

Theo niega con la cabeza sonriendo-Esperaba a que me lo pidieras.

Me acerco a él y golpeó su fuerte pecho-Tonto.

Theo me atrapa en un abrazo y regresó a mi lugar favorito: sus brazos. Recargo mi barbilla en su hombro.

-Esta vez quiero hacer las cosas bien-dice-no miento cuando te digo que eres lo más importante en mi jodida vida.

Sonrío.-No vas a arruinarlo si es lo que te preocupa. Ambos arruinamos lo que teníamos antes, no trates de culparte de todo.

Theo me separa un poco de él para poder verme a los ojos.

-Por qué...-dice rozando sus labios con los míos-¿Por que una persona tan buena, con un corazón tan enorme como el tuyo se permite estar con una basura como yo?

Sonrío.-No soy tan buena como dices-digo-te recuerdo que ya eh asesinado a unas cuantas personas.

-En defensa propia-dice Theo interrumpiéndome-eso no te hace una mala persona.

-Ni a ti-digo acariciando su mejilla-Se que crees que eres el peor, pero no es así. Pocos ven lo que yo veo en ti. Que a pesar de tus acciones y tu estilo de vida, eres una persona de buenos sentimientos capaz de demostrarlos.

Los ojos de Theo brillan en medio del atardecer. Quiero una vida con Theo, una vida normal, aunque eso sea mucho pedir porque aún tenemos muchos asuntos por resolver. Aún hay gente buscándonos, mi madre, mis amigos, los matones que quieren lastimar a Theo y Alex, su hermano. La persona que más nos odia y que se que no descansará hasta hacernos daño.

Pero por ahora solo importábamos Theo y yo.

|DANGER|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora