Al borde del precipicio

Cap.- 18

Llevaba ya un buen rato caminando, es raro, no creí que me tomara tanto tiempo, y todavía no veo la salida. Dios, estoy cansado; pero detenerme seria peligroso , así que seguí caminando. Esta noche es extrañamente silenciosa, nada de pájaros, nada de grillos, no lo veo muy normal.

    Ah, olvidenlo.

De un momento a otro escuche algo parecido a una alarma, como cuando estaban bajo ataque. Voltee y a la lejanía, mas o menos a la altura donde debería estar el auto con Otabek, en lo alto del cielo una bengala de luz roja.

   Mierda, lo encontraron.

Ignorando el calambre que recorría mis piernas empece a correr.

  ¡Demonios!¿Que tan lejos estaba la entrada?

Seguí corriendo. Apenas veía por donde iba, con dificultad podía observar lo distaba veinte centímetros frente a mi. Corrí y corrí a todo lo que daba hasta que algo me impidió seguir avanzando. Había chocado con algo.

-¿Una cerca?.- No puede ser ¡Esto no se supone que deba estar aquí!

   Bueno, no importa. Una cerca implica que estoy en el limite. Intente escalarla pero no se podía, el espacio entre los alambres era muy pequeño, no me podía sujetar o impulsar bien. ¡Demonios! Sacudí la cerca con furia. ¿Y ahora que?.

   De repente escuche una rama quebrarse a la distancia, al principio creí que se trataba de algún animal, a pesar de que se escuchaba cada vez mas cerca; pero al hacerse el sonido mas claro no se escuchaba como un animal, alguien venia. El ambiente se puso tenso, pesado. 

-Viktor~.-Escuche a la distancia una voz cantarina, me escondí detrás de un árbol haciendo el menor ruido posible -. Viktor~ Se que estas ahí .- Al ver que no contestaba agrego-. ¿Sabes? Conozco el carácter de un hombre por el sonido del palpitar de su corazón, seguido .- Empezó a aplaudir con las manos, primero lento y a medida que hablaba lo hacia un poco mas rápido, simulando los latidos de un corazón -.Cuando me acerco, casi puedo danzar a su ritmo.- Y ahí empezó a bajar la intensidad igualmente a medida que hablaba -. Es raro que el tuyo, este tan controlado...

   Quise gritarle que me dejara en paz, pero vamos, que seria una estupidez de mi parte. Retrocedí instintivamente rompiendo una rama en el proceso, lo sentí voltear en mi dirección. Estaba demasiado ocupado calmándome como para reprimirme lo idiota que soy.

-Viktor, en este momento podría clavarte una bala entre ceja y ceja. Pero, ¿Donde quedaría mi sentido de la competencia? Vitya vamos a jugar~ Te daré... quince segundos de ventaja, tienes que correr y esconderte. Son las once cuarenta y siete, a las doce en punto de la noche sonara el toque de queda, una alarma que se escuchara por todo el terreno, si para ese punto no te he atrapado puedes irte, si no lo logras... bueno, ya lo veremos. Si no dices nada sabre que aceptaste. 

   La verdad suena bien, de no ser porque estoy exhausto, lo pensé unos momentos y ni había terminado de asimilar la idea lo escuche reírse.

-De acuerdo~.- Lo escuche cargar un arma-. El tiempo corre en una... dos... - Escuche el sonido de una bala siendo disparada y empece a correr contando los segundos en mi cabeza. Al llegar al veinticinco ya lo escuchaba correr detrás mio.

   Me costo distinguirlo por el rabillo del ojo; no traía ni los lentes, ni el saco, mucho menos la corbata, apenas y traía la camisa y los pantalones, corría como un animal, con la agilidad de una pantera y contrario a su naturaleza se veía feroz. Un depredador persiguiendo a su presa.