Hace cerca de tres años atrás Elliot perdió a la que había sido su amiga y compañera durante varios años, habían pasado tantas cosas juntos, casos difíciles, más de alguna diferencia en sus puntos de vistas, problemas fuera del trabajo y grietas en su amistad, esto último había gatillado un cambio, algo que nunca pensó que iba a suceder, una de las mejores duplas de detectives, compañeros y amigos se había roto.
Olivia Benson había tomando una de las decisiones más difíciles que le había tocado tomar en su vida, necesitaba algo nuevo, un cambio, aunque esto le daba miedo, al principio estaba aterrorizada, todo lo conocido durante años no iba a estar más, pero necesitaba salir de Nueva York, necesitaba un respiro, todo había cambiado luego de gitano, demasiadas peleas, demasiados encuentros y discusiones con Elliot, ella simplemente se rindió, había luchado prácticamente con uñas para salvar su amistad, pero se dio cuenta de que nunca iba a ser igual que tiempos anteriores, todo tiempo pasado fue mejor, se dijo una vez que tomó una decisión.
Andrew Roswell había ayudado en inclinar la balanza aún más para salir de la ciudad, Liv lo había conocido por intermedio de Casey, en una cita a ciegas a la cual ella había evitado por semanas, hasta que finalmente accedió, Casey podía ser muy insistente, la primera cita había sido increíble para ambos, Liv estaba feliz cuando Andrew la llamo para volver a salir, después de un par de semanas de verse, se enamoraron, ambos encajaban perfectamente.
Cuando Olivia trato de contarle a Elliot que estaba saliendo con alguien, él ni siquiera hizo el intento por conocerlo, cada vez que ella le decía que iba a salir en la noche él no preguntaba, Elliot creía que iba a ser solo un chico de un par de meses, hasta ahora él no había conocido ningún novio de Liv que estuviera con ella más de seis meses, y estaba seguro que este no iba a ser la excepción, ningún hombre era digno de ella pensaba él, hasta que llego Andrew y se la llevo de su lado, él era egoísta, pensaba que Olivia iba a estar siempre a su lado, como su amiga, pero no fue así.
El día que Cragen les pidió que todos fueran a su oficina aún lo tiene en su cabeza, los había llamado para informales que Olivia Benson había solicitado una transferencia a otra ciudad, a Washington, lo había tomado por sorpresa él sabía que a ella le encantaba Nueva York, era la ciudad donde había vivido toda su vida, sin embargo ella se iba, cuando Elliot escucho estas palabras, todo se hizo real, fue como un balde de agua fría para él, Olivia se iba de la Unidad de Víctimas Especiales, pero su orgullo fue más grande que su cariño por ella, por lo que significaba su amistad, Liv no había ido esa mañana a trabajar, Cragen explico que iba a ir a Washington en tres días y necesitaba dejar algunas cosas listas en su departamento antes de irse, por lo que simplemente no iba a volver más, y por supuesto, Elliot no movió ni un pelo para pedirle que se quedara en la Unidad, con él.
Las primeras semanas habían sido difíciles para Elliot, su genio no lo acompañaba, Cragen, Munch y Fin hacían lo posible por no cruzarse con un iracundo e inestable Elliot Stabler, Cragen obviamente le había dado la suficiente cantidad de advertencias, le dejo claro que el echo de que su compañera había dejado la Unidad, no era motivo para ser un completo idiota, incluso con las víctimas, Cragen entendió que finalmente Olivia Benson era quien equilibrada a Elliot, algo que ni siquiera Kathy Stabler era capaz de hacer.
Unos seis meses luego de que Olivia se había ido, el matrimonio de Elliot había sucumbido completamente, a pesar de que ambos habían puesto todo para que no fuera así, por el bien de los niños, era mejor tener a ambos padres bajo el mismo techo, pero no fue posible, no habían culpables, pero ambos estaba mal juntos, Kathy tomó la iniciativa y presento los papeles de divorcio, seis mese después, ellos no tenían relación alguna más que ser padres en común de cuatro hermosos niños.
La separación había sido en buenos términos, entendieron que juntos en realidad se estaban haciendo daño mutuamente y por sobre todo por sus hijos, no era bueno para ellos sufrir por las constantes peleas entre sus padres, al principio ellos cuidaban de no discutir frente a los menores, pero después esto fue casi imposible, cada vez que hablaban terminaban discutiendo, habían tratado de reparar su matrimonio destruido.
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Renacer
FanfictionLectoras y lectores voy a tratar de entretenerlas con esta historia, es algo larga que las anteriores, pero echa con harto entusiasmo y cariño, espero la disfruten.