Capítulo 13

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N/A: Perdón, perdón, perdón; se que me olvidé de subir capítulo hoy, es que tuve día familiar... acá se los dejo.


Amanecí justo en el peor día.

¿No podía no despertar simplemente?

Miré hacia la cama de Nat, ella ya no estaba.

Me senté en mi cama improvisada y me estiré.

Toda la noche soñé con ese beso... Sus labios ¡POR DIOS! Sus malditos labios quedaron impregnados en mi cerebro como un tatuaje. Aquel beso se había reproducido toda la noche.

Eso no estuvo bien... Si tan solo Nat no hubiese aparecido hubiésemos llegado a mayores.

Ahora todo era peor, quiero más besos, más abrazos, quiero gritarle te amo quiero estar con él... Y no debo.

Y justo hoy es esa maldita cita.

Afortunada es esa chica saldrá con el mejor chico del mundo.

El más guapo, el más tierno y dulce chico.

El que YO quiero y nadie más debería tener.

Me levanté y bajé las escaleras.

Mi madre y Anne estaban desayunando.

—Buenos días—Dije.

—Buenos días cariño ¿Que tal anoche?—Pregunto mi madre.

"Genial madre que bueno que preguntas, casi me acuesto con Bradley"

—Bien, divertida.

Mi madre me miró.

—Como tú digas—Respondió poco convencida.

Ella me conoce a la perfección, sabía que algo le ocultaba.

Ambas siguieron conversando y yo tomé mi café... Aún no me acostumbro a desayunar té.

—Hola hijo—Dijo Karen.

Genial Brad.

Seguí con la cara en mi teléfono ignorando por completo el hecho de que Bradley esté allí.

Mi corazón latía con todas sus fuerzas, sentía el sudor frío por mi espalda.

Tomé una galleta y la comí siguiendo con mi actuación.

— ¿Día agitado?—Preguntó mi madre.

Silencio Karen.

—Sí, algo—Contestó Brad.

Se colocó justo detrás mío apoyando su peso en mi silla.

— ¿Nervioso?—Preguntó Anne.

—Muchísimo.

—Ya sabes mi opinión...—Dijo ella.

— ¿Que ocurrirá hoy?—Preguntó mi madre

Karen de verdad cállate.

—Tendré una cita a ciegas en un programa.

—Si—Dijo Anne—Y me parece horrible, cariño eres famoso y no sabes si es una loca que quiere secuestrarte.

—Mamá hacen pruebas psicológicas antes.

—Lo que tú digas.

—Me voy tengo que hacer muchas cosas hoy—Dijo Brad y se fue.

—Está raro—Dijo Anne—Ni siquiera te noto Julie.

Gracias Anne.

Ellas dos sí que me pusieron muchísimo mejor.

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