LIBRE [Gay]

Capítulo 3

                     -¿inocente?-

—hola papá —saludó Connor con cansancio.

—hola hijo —correspondió el saludo sin despegar la mirada de su trabajo. —¿todo bien?

—eso creo... –susurró el castaño pensativo. —papá... Tengo que hablar contigo sobre algo.

—¿que sucede? —el hombre dejó su trabajo a un lado para centrarse en su hijo.

—tu trabajaste en el caso de Ethan Blake ¿verdad? —preguntó Connor curioso.

—así es —respondió sin comprender el porqué de la pregunta.

—¿Sabes la razón de que esté en prisión? —preguntó el castaño cabizbajo. —o estaba...

—¿porqué? ¿Lo viste? —se notaba la preocupación del el hombre.

—no ¡claro que no! —exclamó Connor nervioso. —es solo curiosidad...

—pues... Asesinó a su hermana Rebecca —respondió el detective cabizbajo, ya que muchos conocían a la hermana de Ethan, era una mujer muy querida por todos. —Ella trabajaba en la clínica veterinaria.

—¿estás seguro? —preguntó Connor esperanzado —¿crees que él sea un asesino? Digo... Era su hermana.

—personalmente creo que él llegó en el momento menos indicado —dijo el padre de Connor con una mirada pensativa. —pero el juez no lo ve así.

—Ojalá pudiera ayudar... —susurró el chico, mientras se levantaba.

—¿que? —preguntó el detective confundido, ya que no lo había escuchado.

—Nada... Gracias papá —agradeció el chico antes de salir de ahí y dirigirse a su habitación.

—¡Pediré comida china para cenar! —gritó el hombre antes de que se fuera su hijo. —¿quieres algo más?

—no gracias, estoy bien —respondió Connor.

Al llegar a su habitación se sentó junto a la ventana y miró hacia la luna para poner sus pensamientos en orden. Se preguntaba si volvería a ver a Ethan, algo en el lo intrigaba de sobremanera, tal vez eran esos misterioso ojos verdes, o ése cuerpo que lo hacía estremecer con tan solo pensar en él.

Connor no podía dejar de pensar en el ojiverde, pero no sabia porqué. Ni siquiera eran su tipo los chicos malos y misteriosos. Pero había algo en él, que al igual que la luna, tenía un lado oculto que no le mostraba a nadie.

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Mientras tanto en algún lugar de la ciudad. Ethan se encontraba huyendo de la policía. Éste saltó un gran muro para perder a la policía y entró en un gran lote de autos abandonados, se aseguró que la policía ya no lo seguía y descansó dentro de un auto viejo.

No tenía a donde ir. Tenía familia en la ciudad, pero no los pondría en peligro por su culpa, así que era mejor no acudir a nadie, creía que estaba mejor solo. El auto donde se encontraba tenía un olor horrible, también su estómago comenzaba a hacer ruidos gracias al hambre que tenia.

Miró hacia la luna llena de ésa noche, ya que era su único consuelo. Tocó su brazo que fue herido por la bala y recordó al chico castaño que lo ayudó en la mañana.

—Connor... —susurró recordando su nombre.