Capítulo 4: Te quiero Lett.

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Me encontraba a punto de tomar una decisión difícil y debía ser de manera inmediata, adivinen ¿cuál era?..... Levantarme y dejar mi preciado sueño, nuestra llegada a la casa fue a las nueve de la noche, no era tan tarde, pero se nos ocurrió la grandiosisima idea de ver una película y pues aquí estoy yo luchando contra la comodidad de mi cama, las sabanas me aman tanto que no quieren dejarme salir de ella. El sueño es una necesidad que se debe satisfacer y yo como buena chica he hecho todo lo contrario, si tan solo pudiera dormir un par de horas más; todo eso pensaba mientras escuchaba el sonido de la alarma que anunciaba que mi preciado sueño tenía que llegar a su fin.

Me levante, apague la alarma y fui directo al baño a cepillarme los dientes y a lavarme la cara para ver si así despertaba bien de una vez por todas, baje a la cocina a preparar el desayuno de todos, Emi tendría su primer día de clases, por suerte era en el que voy a trabajar, así podría estar al pendiente de ella, ya habíamos tenido la oportunidad de viajar a solucionar lo de mi trabajo y los estudios de ella en una ocasión en cuanto a Miles se inscribirá en la universidad y tratara de buscar trabajo para ayudarnos mutuamente como siempre lo hemos hecho. Prepare huevos revueltos con tostadas y jugo de zumo de naranja que era con lo único que contábamos, hoy me encargaría de rellenar la nevera.

-Emily, Miles bajen a desayunar. -Grite.

Todavía era un poco temprano, pero no importaba, si se levantaban después estarían apurados y la carrera lo que trae es cansancio. Era obvio que no iban a responder al primer llamado, lo hicieron al tercero, la primera en bajar fue Emi restregándose un ojo, claro ella anoche decía que no tenía sueño y tuvimos que ver una película que a ella le gustara después de que Cristopher nos dejara en la puerta de la casa. Esto no pasaba muy seguido, lo acepte para que estuviera un poco más a gusto, le dije que se iba a levantar con sueño pero insistió tanto que al final tuvimos que aceptar.

-Buenos días Lett.

-Emi, ¿Cómo amaneciste?

-Muy bien ¿y tú?

-Con sueño pero eso no importa, ¿Dónde está el Miles?

-Si no me equivoco está en el baño.

Mire en dirección a la escaleras en donde ya venía bajando con una paciencia absoluta, en ocasiones envidiaba eso de mi hermano.

-Buenos días. -Dijo dándonos un beso en la frente a cada una. -¿Cómo amanecieron?

-Bien. -Contestamos al unísono.

-Nuestra entrada Emi es a las siete y media, así que manos a la obra. Y tu Miles ¿a qué hora vas a ir a la universidad.?

-A las 8:00, ¿Cómo haremos con el auto?

-Buena pregunta, ¿qué propones?

-¿Qué tal si las llevo y después paso por ustedes?, cualquier cosa nos comunicamos por el celular.

-Está bien y usted señorita vamos a prepararnos para la escuela.

Subimos a nuestras habitaciones a alistarnos, me di un buen baño de agua fría para que se me quitara el sueño, de seguro tenía los ojos hinchados pero nada que no se pudiera corregir con maquillaje. Salí del baño con mi ropa interior puesta y me coloque unos jean no tan ajustados, una camisa azul mangas largas para cubrirme del sol y por ultimo unas zapatillas, un poco de maquillaje y listo.

Estaba un poco nerviosa en mi primer día de trabajo y es que no es nada fácil lidiar con los niños y niñas de básica primaria, pero me las empeñare. Baje por las escaleras junto a Emi para esperar a Miles mientras se alistaba.

*****

-Listo vámonos -Dije cerrando la puerta de la casa. Comprobé una vez más la hora el celular y dirigí mi mirada a la casa vecina sin poder evitarlo, por ahí dicen que el ojo es necio y mira para donde le da la gana. De ella salió Mia encabezando la fila, le seguía Brian y por ultimo Cristopher, cuando se percataron de nuestra presencia nos saludaron.

Tu Luz En Mi Oscuridad. (TLEMO)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora