A veces me pregunto ¿Que tan mala fui en la otra vida?, para tener una suerte tan perra y estar pasando por este momento tan bochornoso. Primero lo del auto y ahora esto, ¿qué más viene señor?, ¿qué llueva para arriba?. Aunque después de todo no fue tan malo la casi caída mía, porque estar rodeada por sus brazos no esta tan mal, se siente de maravilla.
Lo primero que hice antes de contestar su pregunta fue sonrojarme, la torpeza y yo nos casamos desde que tengo memoria, si no estoy mal.
— Emmm Cristopher creo que me encuentro bien gracias a ti. Que sería de mí si no hubieses llegado a tiempo, creo que ya me puedes soltar.
—Oh claro no hay ningún problema — dijo con una risa nerviosa y sobándose la cabeza — llegue hace unos minutos a la casa, y quise venir a ayudarte si te apetece.
Por dios que me apetece todo de ti.
—Si no es ninguna molestia para ti me encantaría, aunque me da mucha pena contigo después de todo lo que te hecho. — Contesto con la mirada sobre mis pies, me dolía un poco el tobillo, solo pedí a dios que no fuera nada grave.
—Dentro del camión hay varias cajas yo mientras llevare está a mi nueva habitación. — Le sonreí, pero mi sonrisa se borró de inmediato al momento de dar un paso con el pie que me había doblado, esta vez sí caí de rodillas, creo que hoy me levante con más mala suerte que nunca. Cristopher venia saliendo con una caja del camión, en ese mismo instante, se dio cuenta que me encontraba en el suelo agarrándome el tobillo y se dedicó a ayudarme. —Creo que me doble el tobillo —Le dije, y él me miro con cara de preocupación.
—Scarlett creo que es mejor que te hagan una revisión, puede ser grave. Tengo una idea —dijo, mi mirada fue de confusión, sentí sus brazos alrededor de mis rodillas y espalda. ¿Qué era eso?, me estaba cargando, y me tomo desprevenida por lo que solté un pequeño grito.
—Cristopher ¿a dónde te diriges? —Pregunté.
—Mi madre es doctora scarlett, ella me puede ayudar. —Sentí mis mejillas teñirse de color rojo, siempre me pasaba cuando estaba cerca de un chico guapo y creo saber que esta no es la excepción.
— Cualquier favor que necesites me dices Cristopher, mira todo lo que has hecho por mí. Estoy muy apenada contigo ya han sido muchas cosas por el día de hoy, espero darte un descanso.
–No te preocupes Scarlett lo tendré en cuenta, además esto no es ninguna molestia para mí, lo hago con todo el gusto del mundo. –Dijo en forma de susurro y al momento que tocaba la puerta de su casa. No fue mucho lo que camino conmigo en brazos tenía la suerte de vivir al lado. — Hola Mia — dijo Cristopher al momento de entrar y colocarme en el sillón. —Ella es Scarlett ha tenido un pequeño accidente, sabes ¿dónde está mi madre? —pregunto.
—Un gusto Scarlett —Dijo dándome un abrazo y a la vez un beso en la mejilla, gesto que respondí de igual manera pero un poco sorprendida. —Soy la hermana de Cris, eres la que se está mudando cierto.
—Emmmm si—Respondí con una sonrisa un poco incomoda, ella estaba ignorando a su hermano. Mia era de ojos color miel, alta y de cabello negro largo. Muy hermosa a su parecer.
—Scarlett te dejo un momento con Mia iré a buscar a mi mama porque cierta señorita me ignoro, y Mia cuida de ella mientras vuelvo no demoro.
—Tranquilo hermanito está en buenas manos —contesto dándole un guiño. Mia tomo asiento a mi lado, iniciando una conversación de la más amena. Me gustaba la forma de ser de esta chica. Era muy sociable al parecer, porque no dudo en ningún momento entablar conversación conmigo. Cristopher no demoro mucho tiempo en llegar, venía con un niño arriba de sus hombros, parecía de la edad de mi hermana y poseía el mismo color de ojos que su hermano mayor, al contrario de Mia que los tenías mucho más claro. Se reían de algo, detrás de ellos venia una señora que de suponer era la madre, con un gran parecido a Mia, al parecer todos en esta familia tenían buenos genes.
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Tu Luz En Mi Oscuridad. (TLEMO)
RomanceElla era cariñosa, humilde y hermosa. Él guapo y protector. Ella perdió algo valioso. Él la ayudo a superarlo.