Desde que llegue de la casa vecina e inicie con las planeaciones de las clases que daría el resto de la semana, no dejaba de mirar el reloj a cada 5 minutos, quería cerciorarme de que Emily no llegara tarde porque con lo entusiasmada que iba era de esperarse que no haya salido en ningún momento de la piscina, minutos atrás había subido a la habitación de mi hermano a checar como estaba pasando con su dolor de cabeza, en cuanto llegue se percató de mi presencia y dijo que se encontraba mejor, que no me preocupara.
-Miles -grite -¿puedes bajar un momento? , necesito que vayas a buscar a Emi.
- ¿Y se puede saber en dónde está? -dijo bajando las escaleras y con una mirada de confusión.
-Esta con Mia en su casa, Cristopher la invito a pasar un rato con ella en la piscina.
Se le ilumino la mirada, que raro.
Sacudí la cabeza, tenía que dejar de pensar en bobadas, ya era suficiente con lo había pasado cuando Cristopher me acompaño hasta acá después de haber dejado a Emily en su casa.
- ¡Oh! Enseguida voy -dijo cerrando la puerta detrás de sí.
5 minutos.
15....
20...
25.
- ¿Por qué tardaran tanto? -murmure.
Subí a mi habitación a colocarme un top debajo de la blusa de tirantes que tenía puesta, porque con en este día tan caluroso decidí que apenas llegara a casa me quitaría esa trampa mortal a la que llamamos brasier y me pondría algo de ropa liviana. En cuanto acabe salí a buscarlos cosa que no quería porque existía la posibilidad de encontrarme con Cristopher y eso era un tanto inquietante, hace ya un par de días que lo conocía y me ponía muy nerviosa; mi mente comenzaba a divagar por todos lados en donde siempre se encontraba el y mi corazón latía sin cesar con cada rose accidental o intencional que tuviéramos, no sé si también existía la posibilidad de que el sintiera lo mismo que yo porque se le veía muy relajado en cambio yo siempre me quedaba embobada viéndolo ¿será eso normal?.
Cuando él me dejo en la puerta de la casa después de haber llevado a Emi a la suya, al momento de despedirse nuestras miradas se conectaron, vacilamos y nuestras cabezas se movieron de un lado a otro hasta que el beso que iba dirigido a mi mejilla termino en mi boca, ambos no reímos de la situación pero por pura incomodidad. De todas las cosas incomodas que me habían pasado con Cristopher esta era la que encabezaba la lista.
-Lo siento Lett -logro decir apenado.
-No hay problema, fue accidental-conteste para alivianar la incomodidad. Bajo la vista a sus pies y murmuro algo inaudible. Me miro nuevamente y se fue sin más con una sonrisa en la cara. Y desde ese momento no pude concentrarme en nada que no fuera él.
Toque el timbre de la casa, no demoraron en abrir, fue la ama de llaves la que me hizo pasar y me indico por donde podía llegar a la zona de la piscina. En cuanto llegue me lleve una gran sorpresa. Miles estaba dentro con Emily en los hombros, al igual que Mia con Brian. Cada uno estaba con una sonrisa de oreja a oreja, estaban jugando con una pelota, aquella escena me hizo sonreír, allí estaban mis hermanos riendo a carcajadas y compartiendo con otras personas, sin duda alguna mudarnos hasta el momento era la mejor que pudimos haber hecho.
Mire hacia el cielo y le agradecí a Dios por darnos una pizca de felicidad.
Si mis hermanos están felices yo también lo estoy.
Ninguno se percató de mi presencia así que seguí observándolos muy tranquila porque hasta el momento no había rastro de Cristopher por ningún lado. Sentía a alguien detrás de mí y unas manos en mi cintura que hicieron el amago de tirarme al agua, por lo que grite fuerte y volteé de inmediato topándome con la mirada traviesa de Cristopher.
ESTÁS LEYENDO
Tu Luz En Mi Oscuridad. (TLEMO)
RomanceElla era cariñosa, humilde y hermosa. Él guapo y protector. Ella perdió algo valioso. Él la ayudo a superarlo.