I

398 6 0
                                    


10 Enero 2010

-¿Qué dices, te animas o qué?- preguntó mi tía

-Pues sí me lanzo a esta aventura- dije emocionada

-Bueno, deja le aviso a a la congregación para que empiece el papeleo y manda la documentación que te pidan, ellos te hablarán.

Es oficial, me voy a Sudáfrica al rededor de una mes.

Tendría que pedir permiso a la escuela, ya que  para el tiempo que estaría fuera todavía habría clases. No iba a ir sola, que es lo que más me preocupaba, iría con mi otra tía, Lula. íbamos de "voluntarias" a misiones, iría a ayudar a mi tía Ana, me pidió de favor que fuera, porque hablaban Inglés y otros idiomas de las zonas, la gente que estaba en la congregación no hablaban español y mi tía hablaba poco de inglés, así que era un pretexto para ir a conocer otros rumbos fuera del continente americano.

Tuve demasiadas vacunas, las cuales sólo tenía el ejército mexicano, eran vacunas contra los tipos de enfermedades o virus de áfrica por lo cuál sólo ellos las poseían. Los boletos de avión fueron costosos pero la congregación cubrió la mayoría y mis padres lo restante.


Memorias ║ Bastian SchweinsteigerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora