Solía ser humana (En Edición)

Capitulo 7: Misión Fallida

¿Donde estoy? -Pregunté mientras trataba de levantarme de una extraña camilla, demasiado futurista.

-Es gracioso...- Dijo Connor de pie, regresandome a la posición en la que me había despertado. Con brusquedad. -Es la segunda vez en el día que te desmayas y despiertas en una camilla.

-Y tu vuelves a estar cerca...Bueno, algo así. - Le respondí dirigiendo la mirada hacia mis brazos, quiénes se encontraban sin los clavos que los mantenían cerrados. -¡Los ikon!, ¡Van a salir! - Grité con pánico.

-No te preocupes niña, ahora mismo no pueden hacerlo -Respondió Reid a mi temeroso aviso, apoyándose en un grueso tubo con la auténtica pose de una brabucona: brazos cruzados, la pierna derecha doblada y apoyada contra el mismo tubo donde se encontraba recargada.

-¿Que está pasando, Director? -Giré la mirada con brusquedad hacia Crage, reposando en una enorme silla al lado de mi camilla.

-Estabamos esperando a que despertara, señorita -Hizo una pausa.-Necesitamos realizarle con urgencia, la operación número 2.

Mis ojos se abrieron como si hubiera contemplado a un fantasma ante mis ojos. -¿Qué?, ¿Pero no necesitaría estar dormida o con algún tipo de anestesia?, ¿Para que me ocupan despierta?

Crage lanzó los hombros hacia atrás, intentando recobrar la compostura, acompañado de una expresión incómoda pero al mismo tiempo, agobiada. Como si lo que estaba a punto de decirme, fuera la peor noticia del mundo.

-Necesitamos que esté 100% despierta, ya que si algo sale mal en la operación y está anestesiada, no podrá avisarnos si dimos con algún nervio equivocado; pero, si no realizamos está operación, los Ikon podrían hacer pedazos su interior -Tomó aire con profundidad. -Por si fuera poco, el problema no es ese, si no que el dolor es tan intenso, que incluso podría desde desmayarse hasta provocarle un paro cardíaco, así que, necesitamos que de todo de usted...

-Y no mueras -Concluyó Reid.

Mi cara reflejaba confusión y preocupación, no entendía nada de lo que estaba pasando, a decir verdad, no entendía nada desde las 8:00 a.m. de este día.

-Lo usual es que esta operación se realice bajo los efectos de la anestesia -Se apartó del poste, deshaciéndose de su agresiva posición, acercándose a la camilla donde me encontraba. -Pero, algo inusual pasó en aquel pasillo: Los Ikon intentaron salir aún con los clavos obstruyendo su camino. Eso significa, que es el doble de riesgo, las probabilidades de sobrevivir son de un 7%. -Dijo el porcentaje subiendo  y y bajando los  hombros. Sin duda le daba muy igual si sobrevivía o no. -La operación debe hacerse completamente despierta. Lo siento, niña fresa.

Sus lamentos al final lucían completamente sinceros, aún cuando las palabras "niña fresa" estaban en la misma oración.

Lágrimas brotaron de mis ojos, sin mi consentimiento, pero podía sentir una completa tristeza y miedo al mismo tiempo. Sentí lástima de mi misma, quien se quejaba de recibir toda la atención y veía incluso hasta malo y abrumador, lidiar con elogios todos los días, comparandolo con posición en la que me encontraba el día de hoy.
Comencé a extrañar todo eso en la escuela en ese preciso momento.

Connor se levantó y me dió totalmente la espalda, dirigiéndose a la salida.

A nadie de aquí le importaba si vivía o no, ¿Por qué hacen todo esto entonces?

Todos estaban seguros que no abriría los ojos nunca más.

Cerré los ojos, los apreté con fuerza haciendo que rodaran las últimas lágrimas sobre mis mejillas, cayendo en el frío y duro metal de la camilla.