Capítulo 3

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Todavía no puedo creerlo, acabo de leer el mensaje de Lucas, y esperaba otra cosa. El mensaje dice:

Decime un número del uno al dies si te animas a contestar unas preguntas

Sí, como es evidente la ortografía no es el punto fuerte de Lucas, porque cuesta creer que haya gente que escriba diez con "s", pero, sin embargo, me decepciona mucho esto. Tanto que salgo del chat, lo elimino, y no pienso ni mencionar eso a nadie. Quizá haya soñado lo de que Lucas sabía sobre mi pesadilla. Sí, probablemente lo haya soñado desmayado y me esté armando una novela yo mismo. Pero, de todas formas, no voy a descartar la teoría de que él, o más personas además de Gabriel sepan lo de mi pesadilla, así que voy a tener que estar alerta.

Tengo unas ganas inmensas de mañana hablar con Gabriel y Lucas en el colegio, pero mañana es sábado, y no hay colegio, así que mi intriga seguirá hasta el lunes.

El sábado fue un día como siempre, pero el domingo fue diferente, ya que en la pesadilla que sueño siempre apareció Lucas. No sé qué me está pasando, ¿estaré volviéndome paranoico? Ni idea.

Jamás nombré una actividad mía de tiempo libre, jugar al fútbol, en un club que no pienso nombrar. Los domingos tenemos partidos, jugamos un torneo de 19 partidos, con 20 equipos, y hoy es el primer partido.

No voy a hablar mucho sobre cómo juega mi equipo, pero no creo que ganemos, aunque sinceramente no me interesa, solo juego por participar y divertirme. Lo importante acá es que Gabi también va a jugar, solo que para el equipo rival, pero de todas formas, nos vamos a ver las caras. Pienso preguntarle si le contó lo de mi pesadilla a alguien, porque siento que él, aunque jamás me fallaría, puede sin querer haber soltado algo.

No sé por qué me preocupo tanto por si saben sobre una pesadilla o no, porque dentro de todo es algo natural, completamente humano, y de mi subconsciente, que como dice la palabra, es algo que yo no manejo.

No pienso dar el brazo a torcer, despreocuparme, y aceptar que no sería nada malo que otras personas sepan sobre mi pesadilla, que después del todo, algún día va a parar, y creo que a los chicos les preocuparía más si tratara de ocultarla que si les contara lo que realmente pasa.

No sé qué haría Gabriel en mi caso, soy una persona muy sincera, que si vamos al caso, no miento menos para cosas como esta que estoy ocultando para todos menos Gabi, y él también es muy sincero, e imagino que si el estuviera en mi caso le contaría a todos lo de la pesadilla sin un mínimo problema, como es él.

Estoy en el colectivo que transporta a mi equipo a la cancha que queda afuera de la ciudad, así que aprovecho el momento para escuchar música, y relajarme un poco. Tengo la mala suerte de que justo me toque la canción All Nightmare Long de Metallica, la cual trata sobre pesadillas, o por lo menos su título lo hace, así que dejo los auriculares en la mochila y me dispongo a hablar con mis compañeros.

Me doy cuenta que se están dando indicaciones sobre quién juega y dónde lo hace, así que me pongo a escuchar.

- El técnico ya confirmó el 11 inicial, todos lo saben, ¿no? - Preguntó Pedro, el capitán del equipo.

- No, yo no, ¿juego todo el partido? – Pregunto yo que no había escuchado absolutamente nada de nada.

- Sí, obviamente. – Me contesta rápidamente.

- Y... Gabriel va a jugar también – Suelto la duda.

- Por supuesto que va a jugar, es de los mejores jugadores que tienen, y es importante para equipos menos poderosos como el suyo, o nuestro. – Me explicó Francisco, otro compañero.

- Ahh, está bien. – Satisfecho me dirijo nuevamente hacia mi lugar.

Se me hizo eterna la espera a que lleguemos, porque el colectivo iba a 20 km/h y queda a 30 Km la cancha, cuestión que tardamos hora y media en llegar. Eso sin contar el tiempo que tardamos en bajar uno por uno los diecisiete. Cuando bajamos nos dirigimos al vestuario visitante, ya que jugamos en cancha del otro equipo. Tardamos en entrar porque nuestro técnico no había encontrado la llave que le habían dado.

A los 15 minutos entramos, y nos ponemos a charlar sobre como creemos que va a estar el partido, qué hacer, cuándo va a terminar, etc.

Nos ponemos nuestra ropa, que está como nueva ya que es el primer partido, y por lo tanto no está llena de barro ni tierra. Nos calzamos los botines, los cuales el técnico también se había olvidado en el colectivo. Quedan 10 minutos para el partido, Gabriel y Yo vamos a ser titulares, estoy nervioso, pero más que nada por decirle lo de la pesadilla.

Me avisan que el capitán, Pedro, se siente mal, y no puede jugar, probablemente le cayó mal la comida, y encima tiene una molestia en el tobillo izquierdo, por lo que el capitán seré yo.

Salimos a la cancha los equipos y nos tenemos que encontrar los capitanes en el centro del campo. Veo de lejos al capitán del equipo rival, es raro que sea quien sea. Cuando se acerca me saluda.

- Que gane el mejor, suerte compañero. – me dice Gabriel guiñándome un ojo


Dreams are Only DreamsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora