⚪⏺️XxX - 6 ⏺️⚪

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Todo, para tratar de pensar mejor, me quité aquella ropa y al comenzar a ponerme un short, escuché la puerta exterior abrirse.

-Qué ocurrió! - golpeó la puerta del closet, tragué en seco, estaba asustada aún y a él se le ocurre hacer tal cosa.

Me vestí rápidamente al ver que comenzó a mover la perilla, me puse la primera blusa que encontré, era algo larga pero... Bueno.

Al salir, él suspiró, me abrazó.

-No me asustes así - susurró -

-Sebastian, suéltame - me apretó contra si y chasqueo los dedos - qué...

-Las palomitas ya están - besó mi cuello - huele tan...

-Sueltame -

-Ya sabe lo de la basura... Cierto? - asentí, rió seco - bien, probaremos con mi plan B -

-Plan B? - pregunté -

-Sí, Mi plan C no funcionó, así que ahora el B -

-Por qué vamos al revés? -

-Por que, la sucesión de planes antes era correcta, pero luego, me di cuenta que no podría ser, no lo entendería, cuando todo haya terminado, se lo diré - traté de apartarme, pero no me dejó - Venga, bajemos -

Me tomó de la muñeca y me jaló un poco, pero al ver que yo no quería cooperar...

-Señorita por favor, hará lo que se le diga, aún tiene trabajo - dijo serio, asentí derrotada, me tomó, esta vez, de la mano, la acarició con el pulgar mientras salíamos de la habitación y bajábamos.

Nos fuimos hacia el sillón, me soltó para sentarse, me sonrió y palmeó sus piernas.

-Aquí - dijo, sin embargo, negué y me senté a su lado, lo que no le agradó, me tomó de la cintura y me sentó encima de sus piernas, me apretó contra sí y lo sentí  acomodarse, las palomitas yacían encima de la mesa, la película se puso sola.

La televisión se prendió y el control voló levemente, hacia un extremo de la mesa en la cual se hallaban las palomitas que, comenzaron a acercarse, me apegué pensando que se tirarian encima de mi al igual que antes, pero no, las luces se apagaron y Sebastian me acercó las palomitas a la boca. Negué.

-Coma, sí? - me acercó para abrazarme, metió unas palomitas en mi boca - hermosa - me susurró, sin embargo, yo estaba avergonzada-

La película pasaba y pasaba, y yo no le prestaba mucha atención, se trataba creo... De un gato y un chico. La verdad estaba casi durmiendome, estuve trabajando casi todo el día, cerré mis ojos un poco.

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-Despierta, pss, princesa - princesa? -

-Hm? 5 minutos más - estaba cómoda, pestañee un poco, las luces aún estaban apagadas, sin embargo, no estaba en el sillón y olvidé completamente con quién estaba, abrí los ojos.

Estaba en una cama, las mantas eran suaves y Sebastian me veía feliz, lo veía feliz.

-Qué hago aquí? - pregunté sentándome en la cama -

-A dónde vas? - me preguntó cuando me vió pararme de la cama, estaba cambiada, tenía una camisa algo grande, que me cubría un poco más abajo de mi cadera, no tenía mis pantalones cortos ni tampoco mi blusa.

Estaba prácticamente desnuda.

-Te ves adorable... Hey! - salí de la habitación rápidamente y corrí hacia mi habitación, me encerré allí.

Me cubrí la cara derramando algunas lágrimas.

No sabía qué hacía allí.

Unos brazos me rodearon...

Qué Graciosa! Béseme (Sebastian Michaelis Y Tú) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora