No Mientas

5. Yuko Nishigori

Yuuri llevaba viviendo dos semanas en la mansión Nikiforov, todo iba tranquilo y en absoluto nadie sabía que estaba hospedándose en la casa Nikiforov, excepto Chris y el matrimonio Leroy-Yang, pero era lo de menos, la convivencia era más o menos buena, Víktor lo llevaba al trabajo y por las tardes llegaba por su lado, y a veces la madre de Víktor lo usaba como maniquí humano.

-Yuuri, dime ¿que tienes una hermana gemela?- preguntó Pitchit emocionado mientras llegaba con la charola de medicina para algunos niños.
-¿Hermana gemela?, Pitchit, ¿volviste a trabajar con pintura caduca, verdad?- dijo en sarcasmo Yuuri mientras cargaba a uno de los niños.
-Bueno y entonces, ¿Porqué la chica del catálogo "Non Andare", se parece a ti?- preguntó Pitchit yendo al grano y mostrándole el catálogo. Yuuri acostó al niño en una colchoneta, para poder tomar la revista, en portada estaba él.
-Vaya si se parece a mi- dijo Yuuri tratando ocultar lo que paso ese día.
-Algo me ocultas,Katsuki- dijo Pitchit saliendo sigilosamente, Yuuri sabia que el chico lo decía en broma pero aun así no bajaría la guardia, hasta que encontró la foto donde salía con Víktor.
"pensé que no publicaría esto la señora Anya", pensó Yuuri.

-Víktor, tu madre me sacó del catálogo e incluso saliste tú- reclamó una voz femenina algo chillona.
-Yulia no tengo idea porque mi mamá hizo eso, y pues ella es la jefa de la empresa no tengo intervención ahí- respondió Víktor, sabia que a su madre le faltaba un tornillo pero los uso a Yuuri y a él para su catálogo.
-además, ¿tienes algo que ver con esa chica tan corriente del catálogo?- dijo Yulia bastante enojada y celosa.
-No y si lo tuviera no sería de tu incumbencia, te recuerdo que ya no somos pareja, tu me terminaste- le recordó Víktor dejando en claro lo que paso.
-Vitya yo...
-Adieu Mon Cheriè Yulia- colgó Víktor y se recargó en la silla, sinceramente el rompimiento con Yulia ni dolía, no la extrañaba, no le causaba nada a su sistema, era guapa, pero lo único que Víktor sentía con ella era incomodidad.
-Señor Nikiforov, aquí tiene el registro que hacia falta- entro Chris a la oficina que Víktor había tomado en la escuela.
-No me digas Señor Nikiforov, tengo treinta me haces sentir como un anciano- dijo Víktor riendo, Chris se ofuscó un poco pero ya nada se podía hacer.
-esta bien Viktor- dijo Chris mientras se sentaba frente al escritorio.
-Chris, ¿Porque Yuuri vivía en esos apartamentos de la academia Castle?- preguntó Víktor de manera casual y sin tapujos.
-pues... Yuuri no tenia hogar, cuando lo reclute para entrar aquí tenia días vagando en la calle, sin dinero y lo ayude por que si- respondido Chris un poco cohibido.
-Entiendo y ¿Que sabes de Yuuri?,¿Cómo terminó aquí en el país?- siguió Víktor, era algo que el ruso nunca creyó tener por alguien y ese era interés.
-para más detalles consultalo con Yuuri- dijo Chris bastante incómodo, debía ser fácil para Víktor si vivían bajo el mismo techo.
-Lo siento Chris- se disculpo Víktor.

La jornada estaba por terminar y Yuuri esperaba a Pitchit para ir a comer cuando salió Yuko Nishigori, Yuuri sabía muy poco de ella, pero estaba enamorado desde el primer día, era la mujer perfecta, al menos para él y en ese momento se presentaba la oportunidad perfecta para hablar con ella.
-Ho-hola Yuko- tartamudeó Yuuri, lo que hizo que se sonrojará más de la cuenta.
-Hola Yuuri-kun- le contesto la chica con una enorme sonrisa, Yuuri se sorprendió así mismo al saber que Yuko sabía de su existencia.-¿Que sucede?
-Ah, sí... Me preguntaba si te gustaría, salir... ¿Te gustaría ir a tomar un café conmigo y Pitchit, hoy?- preguntó finalmente Yuuri, la chica dudo un momento mirando su reloj.
-Por supuesto- finalmente contestó. Esperaron a Pitchit quien supo de inmediato las intenciones de Yuuri.

Desde la ventana Víktor vio como se desarrollaba la escena, y hasta cierto punto sintió algo que jamás había sentido y era tener a Yuuri con él en esos momentos, la convivencia era buena en casa, pero Yuuri solía ser muy renuente, pero siempre respetuoso, quería ser su amigo y saber de él.

Yuuri llegó a la mesa con los cafés a la mesa, Pitchit y ella platicaban a animadamente.
-y Yuko, cuentanos acerca de ti- comenzó Pitchit, era la primera vez que salían con colegas de otras áreas, sus salidas eran solo a veces con Mila y Yuri, así que era como un rito de iniciación en el grupo.
-bueno, tengo 27 años, trabajo en Castle desde hace cinco años...
-¿Estado civil?, casada, soltera, viuda- rió Pitchit, quería ayudar a su amigo, mientras Yuuri bebía su frappé tratando de ocultar su sonrojo por la imprudencia de su amigo.
-Soy casada, desde hace seis años y tengo trillizas, son Axel, Lutz y Loop- dijo Yuko mostrando el móvil varias fotos de unas niñas regordetas de no más de cuatro años.
-Ah, vaya y ¿Porque no las metiste a Castle? Digo por el apoyo que ofrece Chris y Víktor- preguntó Pitchit haciendo la platica más superficial, en tanto, el corazón de Yuuri se escuchaba como se partía.
-Oh, mi marido decidió que fueran a otro colegio por la situación de que es dueño de una pista de patinaje y hay una escuela cerca aunque ya cuando estén en primaria, le pediré a Víktor- respondió la chica, en ese momento sonó el móvil de Yuuri, era Víktor.
-Bueno, ¿Que sucede?- preguntó Yuuri, Yuko y Pitchit guardaron silencio.
-Yuuri, mi mamá quiere saber si llegarás temprano, quiere llevarnos a la fiesta por lo del catálogo-dijo Víktor preocupado rogando a Dios que Yuuri se negará a servir a los planes de su madre.
-mmm, está bien solo me despido, llegó en veinte minutos- respondió Yuuri, era el plan perfecto, quería dejar pasar lo que estaba sucediendo y la incomodidad que sentía, sentirse tonto por estar enamorado de alguien por tres años y cuando por fin lograba acercarse. Decepción. Casada y con hijos.
-¿Te vas?- preguntó Pitchit un poco angustiado.
-Si, perdón es que mi compañero de cuarto se quedó encerrado- respondió, a Pitchit le había contado que rentaba en una zona alejada ya que la mudanza no la podía ocultar y menos porque Pitchit lo había visitado varias veces.
-¿A donde vas?, voy hacia residencial "White Sanders", te puedo llevar- le sugirió Yuko mientras revisaba móvil, Yuuri sonrió con ironía iba para ese lugar y aceptó el viaje.