No Mientas

20. Yuri & Yuuri

Yuuri estaba frente a Nikiforov Holdings una vez más, Anya le había pedido que fuera para una sesión exclusiva para Lilia. Le pidieron que fuera como chico y no habría ningún problema, una vez adentro dio su carnet de identificación, rápidamente llamaron y a los pocos minutos bajo Meryem quien vestía un vestido de encajes rosa.
-Joven Yuuri, sígame- pidió la chica que iba dando saltitos, para Yuuri las asistentes de Anya eran como hadas a las que les faltaban alas.

Yuuri siguio a Meryem y llegaron a una oficina de paredes de cristal como una pecera muy elegante, Lilia vio a Yuuri con una sonrisa y marco rápidamente el teléfono dando solo números, Meryem salió no sin antes verlo bien, que a su pesar se parecía a alguien.
-Yuuri, hasta que conozco a el chico, definitivamente tienes rasgos agraciados- dijo Lilia que lo veía de arriba a abajo.
-¿Danza?
-Ballet clásico- respondió Yuuri ante lo que Lilia complació enormemente.
-Bien, Yuuri trabajaras el día de doy por ambos Yuri- le dijo Lilia con una sonrisa mientras Yuuri era arrastrado a un escenario preparado, vio llegar a varias maquillistas y vestuaristas con cajas y mamparas con ropa.
-Bien Yuuri a trabajar- anunció Lilia, y Yuuri fue abordado por cientos de manos.

La primer sesión fue como hombre varias en un sillón y frente a un espejo, otras semidesnudo y con joyería, era sencillo era posar como se le pedía con actitud sugerente para una chica inexistente, al menos en ese momento y el fotógrafo comenzó su trabajo.

Para la segunda sesión estaba una maquillista y un vestuarista, sacaron cientos de ropa, zapatos y joyería. La maquillista tardo dos horas en arreglarlo, le habían puesto una peluca que nunca en la vida había usado y un pecho falso que al verlo en el espejo parecía real, se veía igual que Anya lo dejaba para las tres ocasiones que lo había usado de manera pública, pero sin efectos en la ropa. La vestuarista le extendió una caja y le pidió que lo se lo pusiera, una vez hecho esto, salió se sentía avergonzado era ropa interior femenina, de encaje color rosa. La maquillista dio los últimos toques y la otra ronda de sesión de fotos comenzó, le dieron un cordón de perlas que enredaron por el cuerpo en posiciones sugerentes para finalmente vestirlo con un vestido similar al usado por Meryem pero en color azul.
-Bien, ¡Hemos acabado por el día de hoy!- grito Lilia aplaudiendo a los que quedaron sólo agradecieron el trabajo.
- Por cierto Yuuri, te manda esto Víktor, guarda tu ropa que traías aquí- le extendió una bolsa y salió por la puerta dejando a Yuuri solo para cambiarse.

Al ponerse el vestido, vio que era un vestido corto con corset de color negro y botas de hebilla.
-Wow, me veo magnífico - dijo Yuuri para si mismo mientras se daba vueltas al espejo junto con la peluca que aun llevaba.
-¡Parezco un idiota!- se regaño finalmente, mientras guardaba la ropa en su bolsa. Al salir chocó con Maryam.
-Señorita Yuri, el joven Víktor la espera en el sótano- le indicó Maryam, era extraño que Víktor supiera que estaría ahí.

Maryam lo dejó en un pequeño elevador, le indicó que presionara el último botón, Yuuri se sentía ansioso, de hecho cuando iba a quitarse el maquillaje y la peluca Lilia se lo había prohibido. Una vez, abajo todo estaba a media luz hasta que escuchó el motor de una motocicleta, era Víktor.
-Hola mi vida- le dijo Víktor al quitarse el casco, se veía guapísimo a los ojos de Yuuri. Vestido de una chamarra de cuero negro y pantalón negro de mezclilla.
-Hola amor- dijo Yuuri un poco avergonzado dando un beso en la mejilla, y Víktor lo tomó de la cintura para besarlo, a lo que, Yuuri correspondió tímidamente.

-¿De dónde sacaste la motocicleta?- preguntó Yuuri una vez que Víktor le estaba poniendo el casco con delicadeza.
-La compre, le pedí asesoría a Otabek- dijo Víktor mientras sonreía bobamente.
-Y... ¿A donde me secuestrara?- preguntó Yuuri abrazándolo, y Víktor acomodaba las manos de Yuuri en su pecho.
-A un motel- le contesto Víktor riendo y arrancando la motocicleta antes de que Yuuri protestará, el cual, iba sonrojado y tranquilo ya que tenia miedo de caerse de la motocicleta que era una Harley Davidson negra.

El recorrido era de ensueño, las luces fluorescentes que decoraban el obscuro camino, era embriagante y más con el perfume de Víktor.

Víktor se detuvo en un mirador, donde la ciudad, el ruso bajo a Yuuri cargándolo y el chico se lo permitía.
-Me fascinas demasiado- le susurro Víktor al oído a Yuuri el cual se sonrojo. Su corazón latía al mil al estar en brazos de Víktor.
-Te amo, Víktor- dijo Yuuri mirando a Víktor a los ojos, perdiendo su vista en aquellos ojos azules como un cielo a medio día, Víktor sonrió agradecido, ya que era la primera vez que su lirio lo llama así.
-Mi adorable Yuuri- dijo Víktor abrazando a Yuuri contra su pecho.
-Mi amado Víktor- le dijo Yuuri, sus palabras salían como borbotones de agua, era lo que Yuuri sentía en su pecho, era lo que su corazón le dictaba decir.

Víktor se sentía extremadamente feliz, quería una cita con Yuuri sin que este fuera obligado, pero esta ocasión, a pesar de ser una cita, le estaba diciendo cosas que él nunca espero.
-Y, mi novio me tuvo que secuestrar para una cita, ¿no es así?- dijo Yuuri pasando sus manos por la chamarra de Víktor.
-Yuuri, es que... Yo...
-Me agrada que sea así, mi amor- le interrumpió Yuuri besando a Víktor, el cual, cargo a Yuuri llevándolo al asiento de la motocicleta. Los besos comenzaron a ser demandantes e intensos, Yuuri incluso se sentía relajado después del trabajo y de la sesión de fotos con Lilia, agradecía estar ahora en los brazos de su novio. Víktor en las semanas que estaban saliendo, lo llenaba de detalles, lo hacia sentir querido y amado. Lo amaba.
-Yuuri... Mi adorado Yuuri- dijo suspirando Víktor, perdiendo el aliento.
-¿Si vamos al motel?- dijo Yuuri susurrándole al oído a Víktor, el cual lo miro detenidamente.
-Amor, te amo pero ¿estas seguro?- preguntó Víktor, no quería que Yuuri se sintiera presionado y Yuuri asintió.

Ambos se volvieron a besar, se habían enamorado.