REFLEJOS SINIESTROS © ® #PNovel

Capítulo Diez

Nos acomodamos en forma de círculo al rededor del tablero y acto seguido nos tomamos las manos.
-Alguien sabe como seguir?-pregunte.
-Pongan sus dedos sobre la tablilla- ordenó Eliana. Haciendo tal gesto para que la siguiéramos nosotros también.

-Hay algún espíritu presente?- dijo Bruno en un tono de voz mas bien burlón.
Las susurros del resto iban creciendo al tiempo que el tablero y aquel pequeño triangulo de madera permanecían inmóviles.
-Callense- esta vez fue la voz de Elena la que sonó.
Alex estaba junto a mi, y en el momento que clave mi vista en el advertí por el rabillo de mi ojo el movimiento de la tablilla sobre el juego, seguido de un pequeño grito saliente de la boca de Elena. Los ojos de Alex-al que aun seguía observando- se abrieron hasta casi salirse de sus orbitas.
-S...A...L...G...A...N ............M...I...E...N...T...R...A...S.........P...U...E...D...A...N- deletreo Alex mientras la lupa se posicionaba sobre cada letra del tablero.
-Esto es broma- lo interrumpió mi hermano- quien de ustedes esta moviendo esta maldita mierda?-cuestiono furioso.
Mis ojos no creían lo que veían, todos negamos con la cabeza a la pregunta de mi hermano y lentamente fuimos sacando nuestras manos de la tablilla.
La ultima en sacar su índice fue Eliana,la vi sacar su dedo dudosa,mis manos sudaban y sentía el temblor de el cuerpo Alex junto al mio.
-Que pasa novato?-retumbo en toda la estancia la voz de Bruno-Estas asustado?
-No es eso, pero no me gusta invocar espíritus y menos teniendo en cuenta todo lo que acaba de acontecer-se excuso Alex intentando sin éxito calmar el temblequeo de su cuerpo.
Comencé a calmarme poco a poco, nuestras manos ya no estaban en el juego y este, gracias a todos los dioses en los que sea que crean, yacía inerte sobre el piso.
-Deberíamos hacer caso a la petición del "espíritu" y largarnos de aquí- dijo mi hermano haciendo las comillas con sus manos.
Me pare y comencé a encaminarme hacia la puerta principal, seguida por Alex que había adivinado mi movimiento y al parecer no estaba en sus planes dejarme ir sola.
Llegue y moví el pomo de la puerta un tanto desanimada,ya que minutos antes no había cedido, pero esta vez para mi sorpresa la puerta se abrió.
Pude sentir las miradas de mis amigos en nosotros apenas oír el chirrido de la puerta al abrirse, la mano de Alex se posó en mi hombro para abrirse paso entre la puerta y yo, y en menos de un abrir y cerrar de ojos mi hermano ya estaba parado junto a nosotros.
Los pasos del resto se acercaban con rapidez, con la esperanza de poder abandonar la casa de una vez y para siempre....

Los dejo con una linda foto que muestra el lugar que ocupa mi historia en este momento y agradeciéndoles a ustedes por ello.