PARTE VI

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Los exámenes eran pan comido para Gabriel. En su familia, sus padres siempre estaban ocupados. Ellos trabajaban demasiadas horas como para ayudarlo con sus tareas, por lo que, se acostumbró a estudiar en soledad y que la información se asimilara rápidamente. 

Ahora, él no tenía problema alguno nunca. En época de alto rendimiento, mientras que todos estaban estresados, él era envidiablemente liviano. Sin preocupaciones en su bandeja matutina.

Thomas, que estaba a punto de darse de cabezazos por la prueba de biología que se les avecinaba dentro de dos días, tenía como preocupación extra el tener un ojo sobre Gabe.

Su mejor amigo, le hablaba ocasionalmente. La primera charla siendo de lo más tensa, forzada en clases. No le había pedido estudiar juntos, a pesar de que así era su rutina.

Desde su casillero, le veía a través del pasillo conversar con Brody.

El chico que podía ser un camión, estaba con su hombro sobre la muralla. Tranquilo, haciendo reír a Gabe, mirando de reojo a Thomas.

Thomas se sentía hervir.

La campana sonó y todo el mundo comenzó a desplazarse a sus salones. Thomas esperó a que Brody golpeara el hombro de Gabe con una palmada amistosa y se retirara, antes de acercarse él mismo.

Gabriel se colgó su mochila al hombro. Ambos tenían que ir a la misma aula, por lo que, se pusieron uno al lado del otro y empezaron a caminar. Con la sala en vista, Thomas no pudo contener las palabras dentro.

—No me gusta Brody cerca de ti.

Gabriel sonrió.

—¿Celoso? —preguntó en tono de broma.

Thomas se detuvo, mirándolo enfadado.

—Sí —respondió serio. Los ojos de Gabe casi se salen de sus orbitas.

—¿Ah?

—Siempre anda detrás de ti. Además, le das tu atención.

—Solo es en los entrenamientos. Lo demás, no es nada particular. Clases. Igual que tú.

Eso fue un error. Thomas dio un paso atrás. Él siempre era una reina del drama. Ahora, sin embargo, se veía real.

—¿Me acabas de comparar con él?

Las cejas de Gabe salieron disparadas, incrédulo.

—¿Te ha dolido, Tommy?

—No me llames Tommy.

Thomas echó a caminar de nuevo. Estaba casi en el salón, cuando Gabe le giró jalándolo del brazo.

—¿Qué sucede contigo?

En verdad, el labio de Thomas tembló.

—Me has comparado con Brody. —Él jaló recuperando su brazo de vuelta. —Un tipo cualquiera.

Si alguien pasara y los escuchara, se reiría de buena gana. En la memoria de todos estaba claro que Thomas era territorial respecto a Gabriel. Había recibido reproches de ese tipo en otras ocasiones. Cuando Gabriel estudiaba con alguna chica o charlaba hasta tarde con algún compañero.

Thomas siempre quería tener la atención de Gabriel, pero de nuevo, las cosas eran diferentes ahora.

Él se veía como si estuviese herido en un nivel profundo que tocó la resistencia de Gabriel. Él estaba luchando duro por no besar de nuevo a Thomas. Por dejarlo tomar los pasos como quería. Por no presionar, ni con sus sentimientos ni su persona misma.

Si Thomas no iba a rechazarlo, tampoco se le iba a imponer de manera alguna.

En cambio, allí en el pasillo, su vulnerabilidad lo alcanzó. Extendió su mano, tomando la mejilla de Thomas en ella, a riesgo de ser un movimiento arriesgado. Los labios de Thomas se abrieron ligeramente y una respiración temblorosa pasó.

—Sabes que eres diferente para mí. Diferente a cualquier otro. —confesó Gabriel. Sus miradas se sostuvieron por un minuto y brillaron. Hubo pasos en el pasillo y eso los hizo darse espacio. Gabriel se aclaró la garganta. —Eres mi mejor amigo, pequeño tonto.

Thomas no estaba feliz con como sonaba eso, pero estaban trabajando en ello, así que sonrió.

—Más te vale empezar a recordarlo.

—¿A mí? —Gabe le tomó el pelo. Thomas le sacó la lengua.

—Cállate.

Gabe se carcajeó, su pecho liberando las malas emociones. Thomas le empujó para que pasara al salón por delante de él. Cuando Gabriel miró atrás, Thomas estaba mirándole el trasero. Sus miradas coincidieron y un estremecimiento recorrió a Gabe cuando se dio cuenta que su amigo no lucía ni avergonzado ni contrariado.

¿Qué estaba pasando con Thomas, últimamente? 

Lo que Thomas quería #1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora