Darrell White. Lo odio, para qué hice el estúpido trato...ah, claro, por mi puta ambición. Odio la impuntualidad. Si, suena mal de la chica más impuntual del mundo. Pero es horrible esperar. Odio esperar y llevó esperándolo media hora. Repito ¡media hora!.
Recuerda Zoey, ejercicios de respiración. Inhala...exhala...
No funciona.
Cuenta números, uno...dos...
A la mierda yo no espero a nadie, éste quién se cree.
Si no recuerdas te dio su jeep...
¿Eso le da derecho a plantarme? Ni que fuera planta.
Sin embargo en ese momento abren la puerta y entra en la cabaña el castaño de ojos azul intenso.
–Ya era hora! – resople cansada e irritada.
-Alguien se despertó con el pie izquierdo, ¿eh? - sonrió con arrogancia.
Con toda la paciencia que pude reunir, que era muy poca, sonreí y mantuve mi cara de póker.
Estuvimos entrenando mucho, pude descargar mi ira ya que al principio Darrell tenía miedo de golpearme muy fuerte ( de golpearme en general) y aproveché su idiotez. Luego de varios golpes, cortesía de mis puños, supo que tenía que defenderse, pero claro no lo hacía con tanta rapidez o la fuerza necesaria.
-Debes de luchar con tu oponente, no importa si el rostro que tenga sea de una dulce y tierna cría, porque a los brujos nos gusta jugar con la mente - sonreí ampliamente, lo que hizo brillar temor en los ojos azul marino del chico - tranquilo no te haré eso, eso lo dejaremos para más adelante.
Después de tomar un poco de agua, Darrell se fue trotando. Acordamos que iríamos despacio para que vaya acostumbrándose, no confió plenamente en él, ni siquiera le confiaría para que cuidase de Ares y él es bastante independiente. Ares es mi mascota, es un halcón, le puse ese nombre no porque me pareciese bonito o algo así, le puse ese nombre ya que como el dios que lleva su mismo nombre, ese halcón lucho por su vida (bueno, eso no me explica, pero si mi halcón tuviera que ser un dios sería Ares).
Recuerdo ese día como si fuese ayer, pero ya ha pasado un tiempo, ya que, cuando lo rescate tenía unas cuantas semanas de perder a mi madre.
En esos tiempos poco a poco me separaba de las personas, incluso de mi hermano mellizo, aunque no lo soporte la mayor parte del tiempo, lo amo.
Lo que a veces me causa una buena risotada es que la gente piense que soy fría o que soy un robot sin sentimientos, pero si me hubieran visto en esas fechas dirían que actualmente soy un encanto. Para una niña es difícil perder a tu madre, pero súmale a eso que lo hizo de su propia mano y ni siquiera pidió ayuda o se despidió con una maldita carta, estaba tan herida, me sentía traicionada (vale, aun me siento así), que ni siquiera lloré en su funeral, que fue en un salón, ya que se suicido. El padre de la iglesia casi echaba a patadas a mi tía cuando fue a decirle lo ocurrido con mi madre, así que eso explica porque no vamos a la iglesia, mi tía estaba enfadada con el párroco (sigue estando muy cabreada).
Todos los conocidos y también desconocidos me daban el pésame, ¿pero eso de que le sirve a una pequeña de siete puñeteros años? De nada.
Después de varias semanas, de su entierro en el cementerio local, yo seguía sin derramar ninguna lagrima, fue en ese momento en los que me separe de mis amigos, me aleje de todos y me encerré en un caparazón muy grueso (sigo sin abrir mi corazón, es solo por si no quedo claro). No sentía nada, todo lo que comía lo sentía insípido.
Un día me sentí encerrada en la hermosa casa blanco marfil de Cassandra Moore, así que cogí un abrigo que me protegiera del crudo frío del invierno, me até la bufanda al cuello y corrí al final de la calle donde empieza un hermoso bosque.
Cuando entré a aquel lugar tan pacífico no quería volver a salir de allí. Literalmente pensé en conseguir un arma para poder cazar animales para mi consumo, en mi mente yo era una cazadora profesional, que tenía un refugio y era muy temeraria a cualquier animal con el que me cruzase.
Pero lo que me enseño el tiempo es que no debes de tener miedo de unos simples animales, ellos son el menor de tus problemas.
Me acurruque en la fría nieve, justo en eso escuche a algo haciendo mucho ruido, pensé que era un animal peligroso así que al principio me quede quieta en mi lugar sin respirar siquiera. Después oí que claramente eran sonidos de un ave, me levante lentamente y fui hacia la dirección del sonido.
Y ahí estaba, un polluelo de halcón, al parecer se había caído de su nido. Acerqué la mano y graznó.
–Tranquilo, no quiero lastimarte – dije con voz suave y tranquilizadora.
Eso no lo convenció ya que cuando mi mano estuvo más cerca de su cuerpo ¡me picoteo!!
Una queriendo ayudar y lo dañan.
–Coño! –exclame alejando la mano.
Así pasaron varios minutos, tal vez una hora. Pero al final pude llevarmelo a casa.
Parpadeo volviendo al presente.
Recojo todo lo que estaba tirado en la cabaña y salgo para ir a casa.
Hola! Me extrañaron? Yo sé que no :"v pero aunque no me quieran yo los amo y hice este cap 💙❤
Lo siento por no publicar pero...*no se le ocurre una escusa* emm...😂😂😂Pero ya enserio tal vez no publique en un tiempo ya que tendré exámenes💔😭😭 ayuda
Hermos@s❤😍🌚
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Zoey
ParanormalZoey Morgan, es todo menos normal. Ella y su hermano mellizo son brujos. Ella debe proteger a las personas que ama por el simple hecho de ser mas poderosa, y además su única familia, su tía, es humana y no sabe realmente en que mundo vive. A parte...