Entre el cielo y el Infierno [TERMINADA]

Capítulo 25 "Negro y blanco"

"Negro y blanco. Colores simplemente maravillosos que expresan la pureza, el rencor, la felicidad, el odio, la tristeza, la lujuria. Tantos significados, tantas formas de decir que ambos colores son su reverso, son el contrario del otro, son el uno para el otro. Son perfectos.

El blanco contrasta al negro con su pureza, el negro cubre al blanco con su odio. Pero jamás deben unirse, porque su unión termina en gris, un gris opaco y sin sentimiento, que cubre a todos como un manto de aburrimiento, como si nada nuevo pasase en el exterior, un manto que te cubre para que no vivas, un manto que no te deja expresar todo lo que quisieras decirle a la gente sobre lo que ellos dicen de ti. Un gris horrible.

Pero... ¿Por qué si son dos colores tan maravillosos al juntarse dan un color tan triste?

Es porque... El negro se ama a si mismo, y no puede dar su amor a otro color, porque le duele.

El blanco ama a todos, pero no puede amar al negro, porque sabe que él no se lo permitiría. 

El amor entre ellos es difícil, y diferente. Por eso se contrastan el uno al otro sin unirse."

¿Quién decidió eso?

- Hermoso - fue lo primero que salió de los labios de la pelilila al ver a su hermano. Un chico como él, de seguro debía ser de un color blanco puro. La pureza de su alma se vería reflejada en sus alas. Ninguna impureza, tampoco lujuria, menos odio, todo en él, era perfecto.

Sus alas se extendieron en su totalidad, pero no era blancas. 

Ritsu abrió sus ojos impresionada. Toka frunció el ceño, los demás sólo admiraban las plumas de un color gris.

- No es... Posible - exclamo Karma al ver los ojos de un verde agua de Nagisa

- ¡Vuelve a decirlo! - grito Nagisa con los ojos lloros - ¡Di sus nombres una vez más! - derramó un hilo de lágrimas mientras que en sus manos una hoz negra aparecía, su hoja se veía filosa aún a la distancia. Nagisa rió quedamente por las miradas demoníacas dirigidas a su persona. 

- Nagisa... - dijo impresionado Gakushuu, fue lo único que pudo decir antes de sentir como la hoja cortaba parte de su brazo.

- ¡Nagisa deja a Gakushuu! - grito Karma expandiendo sus alas, a diferencia de cualquier ángel, caído o demonio, eran iguales a las de Nagisa, grises.

<<¡¿Por qué sus alas son grises?!>> pensaba cierta ojivioleta, otra chica interrumpiendo los pensamientos de Okano se lanzó contra ella con una alabarda negra, una figura de sol se encontraba en la punto "principal" de la misma.