Dream Machine (KOS Temporada 2. Tom Kaulitz Fanfiction)

Capítulo Cinco. Puede Que Esté Loco.

Y... bueno, no hay nada que les pueda decir aun...

Como les dije, tuve que hacer un pequeño cambio así que... ¡Sarah y Bill en la imagen!

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Sarah no tardó en ponerse los zapatos y cubrirse con una chaqueta. Subimos al auto tranquilamente y le expliqué a Tom por dónde ir mientras Bill en el asiento del copiloto ponía música con el teléfono.

- ¿Ves lo apretadas que irían ahí atrás? – Tom señaló.

Apunté hacia la izquierda y le dije que diera vuelta.

- No lo intentes. – Le advertí.

Habíamos tenido que dejar mi auto en casa para irnos en la pequeña camioneta de Tom, supuse que cuando menos podría convencerlo de simplemente cambiar autos; aunque sabía que sus cosas eran sus cosas y rara vez cedía. 

Bill bufó y Sarah puso sus manos sobre mis hombros.

- Sabes que sé dónde queda el hotel, ¿verdad?

- ...I don't want your dollars, no don't got to be a hot roller... - Mi hermana cantó mientras me sacudía para que "bailara" con ella.

Eché la cabeza hacia atrás y me reí de mi hermana, dejando el asunto con Tom al echarme hacía atrás en el asiento.

Sarah alzó los brazos y me sonrió con la boca abierta, sacudiendo los hombros al ritmo de la música; me resultaba imposible no seguirle el rollo, así que pronto tenía a Tom riendo cada que alzaba la vista hacia el espejo y nos encontraba jugando. Unos minutos después llegamos al hotel y bajamos juntos para buscar a mamá y papá.

Bill se puso los lentes oscuros y puso el brazo sobre los hombros de Sarah mientras se adelantaban. Tom y yo nos miramos por un momento antes de cogernos de las manos  y seguirlos.

- ¿No te pondrás los lentes? – Le pregunté.

- Nah, - respondió, mirando hacia ambos lados del pequeño camino frente a la entrada. – Creo que a tu padre no le gusta que siempre los lleve.

Sonreí, arrugando la nariz.

- ¿Te importa lo que mi papi piense de ti? – Alcé la barbilla con orgullo y vi a Tom llevarse la mano libre a la cintura del pantalón para subirlo un poco.

- No lo llames así... - Se quejó de mala gana.

Entramos al hotel por unas puertas de vidrio y seguimos hasta el lobby. Tom miró alrededor por un momento y luego ambos encontramos a Sarah y Bill saludando a mis padres.

- Bueno, - Tom señaló hacia Bill sacándose los lentes oscuros; - ese hombre es complicado.

Suspiré y jalé de su brazo al hacer que me siguiera.

- ¡Ven a saludar a tu papi-suegro!

Tom frunció el ceño con una expresión de completo fastidio que me hizo reír.

Fui hacia mis padres y los saludé con menos entusiasmo que mi hermana, quien en ese momento intentaba no lucir como un ciervo encandilado. Yo los había visto esa misma mañana, aunque por supuesto Tom no; así que mamá lo abrazo para darle las primeras felicitaciones en persona.

- ¡Qué emoción! ¡Su primer hijo! – Mamá lo soltó pero no del todo, pues apretó sus brazos al separarse de él, - ¡Papás! ¡Ay, qué alegría!