Capítulo 10: Inseparables

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Continuación...

-Quédate, Arle. Tenemos tiempo sin hablar. -Algo de compañía no me vendría mal.

-Déjame llamar a mis padres para avisarles, ya regreso.

Mientras ella se aleja de mi decido mirar mi teléfono. Encuentro mensajes de un grupo de amigos sobre una fiesta, o algo así.

-Mi mamá me dijo que sí. Habrá noche de chicas. ¿Qué ves?

-Estoy viendo el grupo de la fiesta. Es este viernes, pero no tengo muchas ganas de ir.

-Yo tampoco. A la larga, no puedo tomar. Me canso muy rápido y a veces me dan ganas de vomitar.

-¿Mis tíos lo saben? Todo esto. -Pregunté con cautela.

Silencio.

-No, no sé cómo decírselos. -Arlene baja su mirada el tiempo que acaricia su brazo izquierdo con el derecho, una manía que tiene cada que se siente culpable.

-Tienes que hacerlo, cada vez va a ser peor. Se van a molestar mucho pero te van a apoyar. Siempre has sido una hija maravillosa. Estoy segura que no vas a dejar que esto interfiera en tus planes. Demuéstrales eso.

-Tengo tanto miedo que esto me perjudique.

-Te va a perjudicar tanto como tú dejes que suceda. -Le di una sonrisa con la boca cerrada mientras le guiñaba un ojo.

-Sí, tal vez tengas razón.

-Nunca nos has contado cómo sucedió todo. Me gustaría mucho apoyarte.

-Siento que no estoy lista aún. Es demasiado, ¿sabes?

-Está bien, sabes que puedo escucharte cuando quieras, para eso estoy. ¿Qué te parece si vemos una película?

-¿Y pedimos pizza, por favor?

-Okay, no me opongo

Pasar tiempo con Arl siempre es genial, es como la hermana que nunca tuve. Años atrás, cuando tenía al rededor de 3 años mi madre quedó embarazada, lastimosamente la bebé murió en el último trimestre, es un milagro que mamá sobreviviera. Desde entonces Arlene se convirtió en mi hermana, y desde allí somos inseparables.

Estamos acostadas en mi cama separadas únicamente por la caja de pizza viendo una película.

-No entiendo. ¿Por qué mató a su hermano? -Pregunto con la boca llena.

-No sé, no estoy prestando atención.

Miro mal a Arlene.

-Janed, sabes que te parece malísima esa película.

-Mentirosa.

La miro y la encuentro con la cara de really? que siempre pone cuando sabe que estoy mintiendo.

-Okay, okay, no me gusta. Pero el protagonista es lindo. -Digo antes de hacer un puchero

-¡Janed, por favor! -Ríe.

Ríe por primera vez en toda la noche y me atrevería a decir que es la primera vez en semanas.

Río a la par, río porque la película es malísima, porque no me gusta, río porque ella ríe, porque es mejor que llorar.

Esta es mi vida, y la escencia de ella. Por muy mal que esté siempre hay un espacio en mi calendario para ser feliz. Siempre hay un rato de luz en la oscuridad.

A la mierda el hijo de Arlene. A la mierda que me iba a casar. Tengo que vivir mi vida y ser feliz con ella. Tal vez no sea felicidad, pero estoy un poco más cerca.

-¿Qué te parece si mañana vamos a comer helado con Johanna? Últimamente me encanta el helado.

-¿Últimamente? Siempre ha sido tu delirio, querida prima. No me mientas.

-Bueno, lo admito. ¿Pero sí vamos a ir?

-Sí, claro. -Tengo que confesar que también moría por uno.

Las horas pasaron hablando de todo un poco hasta que en algún momento de la noche nos quedamos dormidas con la esperanza que al pasar de los días todo mejorara.

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⏰ Última actualización: Jun 12, 2017 ⏰

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