Besos y conflictos

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Después de su pequeño encuentro en las duchas Min y Tae Oh fueron a cenar pizza en un lugar cerca de su escuela, el tiempo se les pasó volando y cuando se dieron cuenta ya era hora de que regresaran a sus casas.

- No quiero regresar a casa - le dijo Min a su novio mientras jugaba con su cabello- Me quiero quedar aquí, contigo. -Tae Oh negó suavemente.

- Tienes que ir a tu casa, no quiero ganarme el odio de tus padres.

- Mis padres te aman -aseguró Min - En especial Luhan, no sé, creo que nos ha emparejado desde siempre.

Tae Oh rio - ¿Puedes culparlo? Has estado obsesionado conmigo desde que tenías cinco -bromeó.

- ¡Yah! ¡Tú eras el que decía que era tu novio! - protestó pero no pudo seguir hablando porque su novio lo calló con un beso.

Min no se quejó, le devolvió el beso a su novio y puso una de sus manos detrás del cuello de éste, intentando profundizar más el beso.

El beso comenzó a subir de tono y de pronto ambos chicos que sintieron que había más calor en el ambiente, ninguno de los dos quería romper el beso pero después de unos segundos tuvieron que hacerlo, porque se encontraban en un lugar público y las cosas que pensaban hacer no eran aptas para todas las edades.

- Debemos de volver a nuestras casas -musito suavemente sobre sus labios Tae Oh. -Nos veremos mañana, así que no hagas tanto drama. -Min rodó los ojos.

- La próxima vez que me llames pidiéndome ir a salvarte de YuNa te diré que estoy ocupado.

- Está bien - se encogió de hombros- Tendré que buscar a alguien que quiera ayudarme...

-¡No vas a buscar a nadie! -lo detuvo- Eres mi novio - sujetó el rostro de Tae Oh con ambas manos y comenzó a darle besos en las mejillas- Mío, mío, mío.

Tae Oh tomó las manos de su novio y las alejó de su rostro - Basta, las personas comenzaran a vernos raro.

- No me importa - volvió a besar su mejilla- Por más que quiera quedarme contigo más tiempo debo de volver a casa, o mis padres se enojarán.

Se despidieron con último beso antes de que cada uno caminara con rumbo a sus casas, Min se sentía feliz, había ganado la competencia y había pasado una linda tarde con su novio, nada podía arruinar su día.

Cuando llegó a su casa introdujo su llave en la cerradura de la puerta y la abrió, entró a su casa como lo había hecho siempre pero se detuvo al ver que sus padres se encontraban esperándolo en la sala.

Y ninguno de los dos se veía contento.

Sus padres se levantaron del sofá donde se encontraban y caminaron hacia él, Min tragó saliva, no sabía que había hecho, según él no había hecho nada malo.

- ¿Dónde estabas? - Fue su papá Luhan, tenía el ceño fruncido y pudo escuchar su enojo en su voz.

- Salí con Tae Oh - se apresuró a contestar.

- TaeMin y JongIn nos llamaron hoy - habló Sehun, su padre no le había hablado en ese tono en mucho tiempo y eso hizo que se preocupara más, ¿se habrían enterado en la escuela de lo que habían hecho en las duchas? Si fue así entonces Min estaba en grandes problemas- Nos preguntaron por qué no fuimos a tu competencia de hoy.

- Ni siquiera sabíamos que estabas en el equipo de natación -continuó hablando Luhan- ¿Por qué no nos dijiste?

Min no pudo evitar reír ante la ironía de la situación, él preocupado porque hubieran descubierto lo que había hecho con su novio cuando la realidad era otra, el momento de hablar con sus padres había llegado.

- ¿Enserio me estás preguntando por qué no les dije? - negó- ¿Por qué tenía que decirles?

- Porque somos tus padres -habló seriamente Sehun- Tenemos el derecho de saberlo, también hubiéramos ido a apoyarte.

- ¿Enserio? -volvió a negar con una pequeña sonrisa burlona en el rostro - ¿Para qué? Seguramente tendrían trabajo o alguna cosa que hacer, mejor me ahorré la molestia.

- Nosotros hubiéramos ido -musitó Luhan.

- Oh, paren esto, ¿recuerdas a cuantos de mis partidos de fútbol fuiste? -su padre iba a hablar pero no lo dejó hacerlo- Te refrescaré la memoria, fueron a tres partidos cuando la temporada tuvo diez, ni siquiera fueron a mi primer partido porque tenías que ir al evento de Seo Jun, es decir, parece como si él fuera el único les importara. - y su intención fue mantenerse calmado pero terminó usando un tono de voz más elevado de lo normal.

- Eso no es cierto, nosotros los queremos por igual, y lo de tus partidos... en verdad lo siento, lo sentimos, pero no faltamos por culpa de Seo Jun o porque no quisiéramos ir... 

- No tienes que mentirme, ya no soy un niño -cortó su mentira Min- Aún no entiendo por qué lo prefieren a él - negó- ¿saben? no importa, olvidemos que esto pasó. - comenzó a caminar hacia su habitación pero Sehun se interpuso en su camino.

- Aún no terminamos de hablar, debiste decirnos que te sentías así antes, Seo Jun es más pequeño y tal vez por eso le damos más atención, pero eso no significa que Seo es nuestro favorito.

Min bufó - Es obvio que es su favorito, desde que nació pasó a ser la prioridad de esta familia... es como si, como si yo pasará a segundo plano.

- ¡Min Jung! - fue Luhan quién gritó- ¡No digas esas cosas! ¡Sehun y yo los queremos por igual! 

- No me mientas, papá, ¿sabes? A veces me pregunto por qué no me dejaron ir con tía Nana a Japón, así no tendrían que preocuparse por mí - no pudo seguir hablando, porque la mano de Luhan se estrelló contra su mejilla. 

Se quedó observando a su padre por unos segundos, Luhan lucía completamente en shock e intentó acercarse a él pero Min retrocedió.

- Min... yo-yo n-no quería...

Pero Min no quería escuchar lo que su padre quería decirle, no lo pensó mucho, dio media vuelta corrió hacia la puerta para después salir de su casa, dejando a sus padres solos.

Tal vez necesitaba eso.

Necesitaba sacar todos los sentimientos que había guardado durante tanto tiempo, necesitaba decirle a sus padres como se sentía. 

Lo único que quería en esos momentos era estar solo, así que apagó su teléfono para no recibir llamadas.

Solamente quería estar solo.

La vida de MinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora