Un mes habían transcurrido en un abrir y cerrar de ojos, y durante todo ese tiempo N no dejó de recibir un detalle todos los días, a excepción de los domingos que era el único día que recibía un simple mensaje de texto. La situación se había vuelto un tanto complicada para él, porque aunque al principio lo tomaba como algo pasajero, a medida que el tiempo pasaba se volvió cada vez más adicto a recibir cada detalle. Incluso su ánimo cambió, no solo se comportaba más alegre y espontáneo, sino que parecía estar muy feliz todo el tiempo y eso a Ravi comenzaba a extrañarle.
— Veo que tuviste un excelente día hoy — dijo Ravi entrando a la cocina, sorprendiendo a N tarareando una canción.
— ¡Oh, Dios!, Ravi, me asustaste — comentó N llevándose una mano al pecho — ¿Cuánto tiempo llevas ahí?
— Solo unos minutos — respondió mientras se dirigía a la nevera y servía un poco de agua en un vaso.
— Ya casi esta la cena — comentó N observando el guiso en la estufa.
Ravi se detuvo a observar a N muy detalladamente, provocando un cierto nerviosismo en Hak Yeon, quien se dio cuenta de la forma en la que su esposo lo miraba.
— ¿Sucede algo? ¿Por qué me ves así? — se aventuró N a preguntar, mientras apagaba la estufa minutos después.
— No por nada, es solo que... luces, radiante hoy, eso es todo.
— ¿Radiante?... Cariño, creo que te serviré la comida ahora mismo, dices incoherencias — le respondió N esquivando el tema.
— Sí, puede ser, ahora que lo mencionas... me muero de hambre — mencionó Ravi sobándose el estómago.
N tomó algunos platos de la alacena, salió de la cocina dirigiéndose a la mesa del comedor, cuando Ravi mencionó algo que hizo que N soltara los platos y estos al caer al suelo se dispersaran por todas partes.
— ¿Estas bien? ¿No te lastimaste, verdad? — dijo con preocupación Ravi al escuchar el estruendoso ruido que hicieron los platos.
— No, no, no... estoy bien — respondió N comenzando a levantar los trozos.
— ¿Seguro?
— Sí, es solo que me sorprendió un poco lo que dijiste.
— ¿El qué? ¿No quieres que vaya a buscarte mañana a la escuela? — preguntó curioso.
— ¡No!, no es eso... es... es... olvídalo, claro que me gustaría que fueras a buscarme... pero tú siempre estás tan ocupado que solo se me hizo raro, eso es todo.
— Perdón por eso bebé, creo que te he descuidado mucho últimamente — mencionó con arrepentimiento en la voz Ravi.
— No tienes por qué disculparte, lo entiendo. Además que harían en la oficina sin ti.
— Sí, tienes razón — respondió sonriente Ravi.
Ambos terminaron de levantar los trozos y después de buscar un par de platos más, la cena fue servida y comenzaron a degustar el guiso que N había preparado.
* * *
A la mañana siguiente N recibió una rosa azul con una pequeña tarjeta, esta era la primera vez que recibía una flor de parte de su admirador secreto.
Esta rosa azul lleva consigo un mensaje de amor eterno. Eterno como mi amor por ti.
Firma: Anónimo.
N observó la flor y después de leer el mensaje de la tarjeta, sintió un particular cosquilleo en su estómago y como si eso fuera poco, sus mejillas enrojecieron al leer tal declaración. Pero tuvo que fingir demencia al escuchar a Ravi preguntar por ella; porque como se lo había prometido fue a buscarlo al trabajo.
— ¿Quién te dio esa flor?— preguntó Ravi terminando de entrar a la oficina de N.
— ¡Oh!, Ravi cariño, no es para mí — respondió N rápidamente, al tiempo que escondía la tarjeta detrás de su espalda.
— ¿Y entonces? — insistió.
— Es, para ti — le dijo N enseguida.
— ¿Para mí? — preguntó Ravi de nuevo muy sorprendido — ¿Por qué?
— Por ser un excelente esposo y quererme mucho, porque más — respondió sonriendo.
Y después de decirle aquello, N se acercó a Ravi y le dio un beso en los labios.
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Pequeños Detalles [Navi]
FanfictionHoy quisiera tener en mí ser, esos pequeños detalles que para todos pasan desapercibidos. Detalles que sentimos que son insignificantes, tan insignificantes que no los tomamos en cuenta... pero que al final son tan importantes, porque son los que ma...