Lali se había quedado dormida con la cabeza en mi hombro. La verdad no me incomodaba. Me dedique a observarla un rato. En realidad Lali no me caía mal. Pero me gustaba hacerla enojar, se veía muy chistosa. Era demasiado pequeña e inofensiva.
Después de observarla un rato decidí hacerle una broma. Una broma no hacia mal a nadie ¿no?
Me acerque a su oído y sople. Se despertó de golpe y me vio con el ceño fruncido.
-¿Que te pasa Pitt? - me pregunto enojada. Pitt... jamas me había dicho Pitt. Solo mi madre me decía así.
- Me dijiste Pitt- le dije y de seguro en ese momento tenia cara de baboso.
- No me cambies de tema- me dijo.
- ¿Que hice?- pregunte haciéndome el inofensivo.
- ¿Que hiciste? - pregunto en tono sarcástico- ¡me soplaste en el oído!- grito y las personas del asiento de adelante se nos quedaron viendo.
- Lali- la llame- tranquilízate.
- ¿Que me tranquilice?- pregunto casi escupiendo las palabras- yo te voy a mostrar como te voy a tranquilizar- dijo e iba a estrellar su puño en mi cara cuando su hermano la detiene.
- Lali- le dijo Pato- tranquila, comete un Snickers- le dijo bromeando esto ultimo y nosotros reímos. Ella le saco la lengua y se sentó en su lugar.
***
Llegamos al aeropuerto de Paris y Lali salio casi corriendo del avión la seguí hasta llegar con nuestros padres. Ellos llamaron a un taxi y nos llevaron al hotel.
El hotel era grande y bonito. No muy lujoso, pero estaba bien.
- Estamos aquí porque hicimos una reservacion- dijo la mama de Lali.
- Si, hace dos días- dijo ahora mi madre ya enojada.
Llevamos una hora parados en el living del hotel. Nuestros padres trataban de comunicarse con el recepcionista, y la verdad es que ya me había hartado. En este momento lo único que quería era estar en el gotsha con mis amigos.
- Mama, ya me harte- dijo Lali- Es obvio que nadie de nosotros sabe hablar francés. Debieron elegir otro lugar.
- Ya Lali, no te quejes tanto, que te van a salir arrugas- le digo Pato y ella lo golpeo.
-¿Quieren dejar de pelearse los dos?- les dijo su mama ya desesperada.
- Pero mama el...
- Nada de peros- le dijo su mama.
- Bien- dijo ella entre dientes.
Mis padres siguieron un rato alegando con el recepcionista.
- Mami- digo Luz- quiero ir al baño.
- Espera, Luz.
- Pero es urgente.
- Lali, ¿podes llevar a Luz al baño?
- Yo también quiero ir al baño- dijo Bautista.
- Pitt, ¿lo llevas al baño?
- Agr- dije harto- Esta bien- dije. Lo que me faltaba, que al niño le entraran ganas de ir al baño. ¿Que no puede ir solo?
Estaba en el baño esperando a que Bautista saliera del baño, ya levaba 5 minutos y no salia.
- Hey Bautista- dije- ¿estas ahí?- pregunte y abrí la puerta. No estaba.
No lo podía perder!
- Lali!!!. dije después de salir del baño.
-¿Que?- dijo después de salir preocupada del baño.
- Bautista no esta - le dije casi gritando.
- Luz tampoco- me dijo y después sonó su teléfono.
- Ah, okay- dijo después de contestar.
- Mama espera.
- No, no cuelgues.
- ¿Que te dijo?- pregunte después de que terminara de hablar.
- Me dijo que estaban en el octavo piso- dijo.
- ¿Y no le dijiste lo de Bautista y Luz?- pregunte gritando.
- Primero: no me grites y segundo: ¿que acaso no escuchaste?- me pregunto enojada.
- Como sea- dije ignorando su comentario- tenemos que ir al cuarto y decirle a nuestros padres.
- Esta bien- dijo y seguido de eso nos metimos al asensor.
- Hey le picaste al numero siete, no al ocho- le dije y seguido de eso le pique al ocho.
- Claro que no, y deja eso- me dijo quitando mi mano.
- No, tu déjalo- le dije.
El elevador se empezó a mover y luego se detuvo.
- Oh no- dijo Lali- ¿ves lo que hiciste? estamos encerrados.
- Yo no hice nada- me defendí- no pasa nada.
- ¿Que no pasa nada?- me pregunto- soy claustrofobia, y por si no lo sabes, no puedo...
- Si, si se que es- dije- tampoco soy idiota.
- Te mereces un Oscar- me dijo sarcástica.
- Ay si, que graciosa- le dije y ella rodeo los ojos.
- Ya enserio- me dijo seria- tenemos que salir, me estoy desesperando.
- Okay, espera- le dije y agarre el teléfono de la pared y empece a llamar al numero de emergencia.
- ¿Te quieres apurar?- me pregunto
- Espera, Lali. no seas desesperada- le dije. Aveces me hartaba demasiado.
- ¿Sabes que?, dame eso- me dijo y me arrebato el teléfono- ¿hola? ¿hola?
- Lali, dámelo- le dije tratando de quitárselo.
- No-me dijo.
- Esta bien- le dije- si no salimos de este elevador es tu culpa.
Estuve unos veinte minutos observando como Lali trataba de marcar un numero que ni siquiera sabia. Escuche un ruido y fue cuando vi a un señor parado en frente a nosotros con una herramienta en la mano.
- Somos libres- dijo Lali alzando los brazos y corriendo hacia las escaleras, yo solo la seguí.
Cuando llegamos al fin a la recamara vimos a Bautista y a Luz jugando con su nintendo. Yo solo abrí los ojos, ¿que les pasaba? se escaparon.
- ¡Ahí están niños!- exclamo mi madre.
- Nos tenían muy preocupadas- dijo la mama de Lali- ¿ como se les ocurre dejarlos solos?- pregunto refiriéndose a Bautista y a Luz.
- ¿Pero que?- pregunto Lali sin entender.
- No los dejamos solos- dije y Lali asintió
- ¿y porque estaban solos?- pregunto mi mama.
- Agr- dijimos Lali y yo y nos fuimos a sentar con Pato.
***
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¡Esto es guerra!- laliter
Genç KurguLali Esposito, una chica tímida e insegura de si misma cambia todo lo que era al regresar a su país natal. Durante su camino se topa con Peter Lanzani, un chico engreído y molesto la mayor parte del tiempo. Las cosas se complica cuando los padres de...