(CDM) se enamoro de la bestia

Esto es la guerra

POV Lyss:

Mientras dormía pude sentí como unos brazos rodeaban mi torso y una leve respiración rosaba mi nuca, después de recordar que me encontraba con annie se me subieron todos los colores a la cara, por si fuera poco ella comenzó a acercarse y me monto una de sus piernas.

-a-annabeth – Trate de despertarla, me voltee por instinto y quedamos cara a cara – P-podrías –ya ni siquiera podía hablar con claridad.

De repente comenzó a abrir los ojos lentamente, tardo un segundo en recuperar por completo la consciencia, después abrió sus ojos a no poder más y un rojo intenso se apodero de su cara.

-¡Lysandro! – después se fue hacia atrás por la impresión y se cayó por el borde de la cama.

-Oye, ¿te encuentras bien? – puede que se haya hecho daño pero la situación me divierte bastante.

-Qué tal si concentras tus fuerzas en ayudarme a levantar y no en reprimir las ganas de reír, por cierto estoy bien.

-Lo siento, pero debes admitir que fue gracioso.

-Si si si.

-además, eres tu quien me debe una disculpa.

-¿disculpa?

-aceptada –le digo con una enorme sonrisa de victoria.

-Ya déjate de juegos y explícate – me dice con una mirada inquisitiva.

-bueno después de todo fuiste tú quien causo todo esto, fue un acto muy atrevido de tu parte considerando que apenas nos conocemos.

-Jajaja si – comienza a reír nerviosa – es solo que estoy acostumbrada a dormir abrasando algo, y como eras lo más cercano tuviste que reemplazar mi almohada.

-Creí que significaba mas para ti – comienzo a hacer pucheros.

-Lamento herir tus sentimientos albino, así es la vida, en fin, deberías irte ya, es tarde y mañana hay instituto.

-hablando de eso, ¿Qué piensas hacer con lo sucedido?

-No les mostrare importancia alguna, no les daré esa satisfacción, iré común y corriente a clase y hare como si nada hubiese pasado.

-Comprendo tu punto de vista annie pero, ¿no crees que fueron demasiado lejos?

-Con acusarlas lo único que ganare es incrementar sus ganas de hacerme la vida imposible.

-está bien.

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Al día siguiente llego al instituto, annie ya se encuentra sentada en el fondo del salón ,mientras amber, sus amigas y Melodi la miran incrédulas.

Después de clases procedo a dirigirme al patio, quería averiguar cómo había amanecido annie, y por lo general se encuentra allí sola, es perfecto para ganar puntos con ella.

-¿Dónde vas?

-Castiel, ¿Cómo estás?, yo bien gracias.

-Nunca lo hare, no te esmeres en seguir repitiéndomelo, en fin, aun no me respondes.

-al patio trasero.

-a ver a annie supongo.

-¿Y si es así? De que va contigo lo que haga o deje de hacer.

Noto su expresión de sorpresa, nunca había sido tan descortés con él.

-Va con migo desde que decidiste pasar tanto tiempo con annie, ¿Qué sucede entre ustedes dos?

-Nada que sea de tu incumbencia.

Me empujo contra la pared y comenzó a mírame con profunda ira.

-Escúchame bien Lysandro, esta chica es importante para mi, te aprecio amigo pero si te atreves a meterte con ella no me importaría mandarlo todo a la mierda.

-Esa no es tu decisión, el mejor será a quien ella escoja, no a quien tú decidas, perdiste a tu chica una vez y lo siento amigo pero también he pasado por lo mismo y no planeo dejarla ir solo por un barato intento de intimación por parte de ti.

Lo aparto de mi camino y voy donde annie, no cederé mis deseos de nuevo para complacer a alguien, nunca más.