Mi Ángel (Robert Pattinson) (HOT). TERMINADA

Parte 42.

La luz de la luna que ingresaba a mi habitación, era suave , maldición estaba nerviosa, recordar todo lo que había sucedido hacia ponerme ansiosa, tenia puesto el babydol que alice me había dado, era uno negro y a decir verdad era muy pequeño, eso hacia q estuviera peor, mas nerviosa, sabia que en algún momento Robert llegaría, así q tenía todo listo las cervezas del refrigerador, mi vestido y por dentro el babydol y había puesto saumerios y algunas velas aromáticas para que el ambiente sea agradable, pero aun así mis manos me sudaban, esta vez seria yo la que controlara el momento, me acerque a la puerta para echarle seguro.

- Bu! – dijo una voz atrás mío, di un gran salto y voltee, el me miraba sonriendo.

- ¿Te asuste demasiado?- pregunto alzando una ceja.

- Solo..un p-poco – respondí acercándome a mi ventana.

- Uhm.. huele bien, ¿es hoy un día especial? – volvió a inquirir.

- Pues algo así...-respondí tomando un trago de aire y cerrando la ventana, el me miro asombrado.

- ¿Que intentas? –me dijo, yo le sonreí un poco.

- ¿Cuando te vas? – pregunte forzadamente, el bajo la mirada.

- Mañana...-respondió – a eso de las 12....

- Oh..- respondí – mañana no iré a la escuela – conteste el alzo una ceja y agarro ligeramente mi brazo, yo lo mire – por lo menos tengo que pasar esas horas contigo ¿no?.

- Gracias...- respondió.

- Tonto, yo también debería agradecerte- le conteste el sonrió.

- Bueno ahora me dirás porque tu cuarto esta con velas y aromatizado, aparte de que la ventana y la puerta está cerrada? – argumento, si que se había percatado de todo, me dio una sonrisa picara, creo que si se había dado cuenta, yo lo mire
fijamente.

- Es que.....-dije suavemente mirando a la puerta.

- ¿Es que que? Será de casualidad que.... –decía el pero rápidamente conteste.

- Hace mucho que no medito y pues, es hora no? – le dije llevándolo al centro de la habitación y haciendo como si me fuera a sentar en el piso, el me miro
confundido y yo reí.

- ¿Meditas? – pregunto – ¿desde cuando?.

- Bueno lo hacia antes de que tu llegaras, cuando viniste se me quito el
habito – respondí el me miro incomodo.

- ¿Tenemos que meditar?- inquirió yo asentí, el suspiro y se sentó al piso como chico bueno, deje que se sentara y que cerrara sus ojos, era divertido que el hiciera eso, como niño bueno haciéndome caso, rompí en carcajadas..

- ¿Era broma lo de la meditación? – dijo con una sutil voz.

- Sii! – exclame riéndome mas fuerte, el me sonrio.

- ¿Entonces para que es todo esto? – pregunto mas confundido de lo normal.

- Bueno...- dije sonrojándome, y jale mi vestido para que mi hombro se notara, el chico comprendió que es lo que quería hacer, me miro fijamente esperando a que yo hiciera algo- normalmente no hago estas cosas, pero tu eres importante para
mi y pues....no te burles eh! – le refute, ya que estaba apenada, me saque el
vestido quedando con el pequeño babydol que me tapaba a decir verdad muy poco, el abrió la boca exageradamente.

- No me mires asi.. tan terrible me veo.! – le dije mirando al techo, tenia tanta
vergüenza, el se paro del piso y se acerco a mi.

- Estas hermosa...- respondió muy suave y complacido, me jalo de la mano hasta la cama y me echo, mientras que el se colocaba encima mio.