¡He dicho no! [KOOKV]

셋.

Touch Me.

JungKook.

No creerás lo que pasó,TaeTae.

TaeHyung.

¿Eh? ¿Qué pasó?

JungKook

Soñé con usted,Hyung.

JungKook.

Soñé que le hacía el amor y usted pedía más.

JungKook.

¿Por qué no puede ser así?

TaeHyung.

Bastante tuve con la otra vez,para,por favor JungKook.

JungKook.

Jamás,te quiero a ti. Quiero hacerte el amor Hyung,ahora,después... Siempre.

TaeHyung.

Basta.

JungKook.

Jamás.

Sí, hacía había comenzado mí mañana,batallando con JungKook para que parara sus pedidos de “hacerme suyo”. Éste niño era un caso perdido por lo que ya no deseaba ni siquiera internarlo,hasta el hecho de sólo concentrarme en los preparativos de año nuevo que hacíamos con mí hermoso novio, qué por cierto, ahora estábamos terminando de adornar nuestro nuevo cuarto dónde podríamos estar siempre juntos y sí,me fascinaba la idea.

— Amor, falta la comida de mañana ¿podrías ir a comprarla mientras termino de mover los muebles? —Me pidió abultando sus rosados labios,formando un pequeño corazón con estos, ¿cómo podría negarme a tal pedido?

— Claro bebé, iré. —Asentí en seguida besando una vez sus labios y el me sonrió dulcemente como siempre.

— ¿Puedo ir a ayudarte,Hyung? —Una voz que no quería escuchar apareció, haciéndome temblar.

— ¡Oh, JungKook! Sí, sí,cuida a mí bebé ¿está bien? —Comentó Hoseok desde atrás de mí,sin darme la oportunidad de hablar o decir “no”.

Así que tuve que ir con él que me mandaba tales mensajes,con él que deseaba tocarme de todas maneras,con JungKook. Y para finalizar,estábamos solos.

— Hyung, dice que Hoseok Hyung que pasemos por el estudio a buscar unas cosas que se olvidó —Comentó luego de minutos de silencio quién iba conmigo.

— ¿Mh? No me dijo nada...—Respondí viendo mí móvil pero no novio no había escrito nada.

— Me acaba de mandar un mensaje,tal vez lo hizo a las apuradas. No es importante ¿verdad? —Sonrió,dejando sus blancos dientes a la vista y yo asentí.

— Así es... —Sólo contesté eso,no quería alargar una conversación.
Antes de ir al supermercado,pasamos por el estudio a buscar el bolso de Hoseok el cual ninguno encontraba.

— ¡Agh,maldición! ¿Dónde está? —Exclamé cansado de buscar y patee una lata que estaba allí— Llamaré a Hoseok para que me diga dónde lo dejó.

— ¡No! —Dijo tomando mí mano que marcaba el número de mi novio.

— ¿Qué te pasa? —Fruncí el ceño bloqueando mí teléfono para que éste hablara.