Lloro ya no puedo con todo esto se que Christian debería haberse enterado pero no quería que lo hiciera, a pesar de que han pasado muchos años y que él único tacto de un hombre que tolero es él de él y él de Ray me sentía sucia, y no quería que le ocurriese nada a él.
Me separe de Christian- Voy a Dormir ah sido un día muy largo, necesito descansar y darme un baño.
-Anastasia tenemos que ha...
-Lo siento, pero hoy no, por favor- y antes de que dijera algo más me aleje de él y comencé a subir las escaleras y me adentre en uno de los cuartos de visitas, no quería dormir con él, o al menos no hoy, pero otra parte de mi deseaba que mi mente no me torturara de tal forma que me sintiera de nuevo sucia por él tacto de un hombre que no era él que yo quería, que había dejado abajo pensando mil cosas.
Me adentre en él baño, me desvestí, mi reflejo en él espejo no era él mismo, tenía ojeras, por suerte no uso rímel y no tenía ojos de mapache, pero me veía demacrada, sin ganas y así sin mas me puse bajo la regadera, lavando mi cuerpo con fuerza, con desesperación de quitarme su tacto y la sensación, y mientras más me lavaba más lágrimas salían de mis ojos, una vez que ya había terminado me salí de debajo de la regadera, cerré las llaves y me puse una bata que encontré colgada, y tome una toalla pequeña para secarme él pelo y salí del baño para dirigirme hacía el cuarto de Christian para poder tomar algo de ropa para dormir.
Cuando entro en el closet tomo lo necesario y al salir choco con Christian.
-Anastasia por favor no me evites.
-No lo hago Christian, eso es lo que menos deseo en el mundo, pero necesito un tiempo para asimilar todo esto.
-Yo sé que eso no es cierto- me levanta la barbilla con su dedo índice, obligándome a mirarlo a los ojo- tu boca puede decirme lo que desees pero tus ojos, esos no pueden mentir, dime qué te sucede, ¿Qué es lo que atormenta a esa cabecita?
-Ay Christian... - y con eso ya no puedo más y me lanzo a sus brazos, abrazándolo con toda la fuerza de la que soy capaz, es como si me estuviese hundiendo y el fuera mi bote salvavidas, mis lágrimas salen y no puedo detenerlas.
-Tranquila nena -me toma en brazos, nos lleva a ambos a la cama, el se recarga en la cabecera y yo estoy en su regazo, empapándole la camisa con mis lágrimas - por favor no llores, me mata verte así.
-Lo... Siento...- intento, pero no puedo, hace mucho que quería desahogarme así, cuando por fin logro detener mi mar de lágrimas, sorbo mi nariz y me limpio los ojos.
-No tienes nada de que disculparte, soy yo quien venía a disculparme.
-Tengo algo que contarte Christian- el sigue acariciando mi pelo y mi espalda.
-¿Qué sucede nena?
-Por favor prométeme que te mantendras tranquilo- siento que se pone tenso, deja de mover la mano y me mira a los ojos separándome ligeramente de su pecho.
-¿Qué sucede? - genial Ana, has hecho que pierda el buen humor y ahora ya no puedes seguir ocultándolo.
¿Qué creen que le cuente? 😱😱😱
Este capítulo se que es demasiado corto para todo el tiempo que han estado esperando, pero ya estoy en ello y es lo único que he podido adelantar, lo siento. 😔💔
