"Superman" (Segunda parte)

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Estando en la sala de la mansión Mathers, vi como una pequeña rubia hermosa corría hacia Marshall, se trepó en él, muy alegre, él la abrazó y la cargó en brazos, se veía muy hermoso de papá, fue una pequeña escena maravillosa y tierna que me encantó visualizar

-Pequeña, ella es mi amiga Jenny, salúdala-dijo dulcemente-

 -hola Jenny –Hailie sonrió y extendió su manita- 

Noté que estaba un poco llena de tierra, "¡Vaya, los niños suelen ser traviesos así se les digan que deben estar pulcros antes de salir"! Pensé. 

-Hola hermosa –Tomé la manita de la niña- mucho gusto Hailie – le dí un pequeño beso en la mejilla- Me dijo tu papa que sacaste A en literatura, te felicito cariño, tienes que estudiar mucho para que papá esté muy orgulloso -le sonreí- 

-Sí, y fue muy fácil, soy buena en todo, ¿Verdad papi? –exclamó orgullosa-

 - Y muy hija de tu papi también – lo miré con picardía y él sonrió-

 -Si, heredó mi modestia –me guiño el ojo y luego miró a Hailie- bebé, dile a Lilia que te lave las manitas, así no puedes comer helados, ¿sí? 

-Si papi, ven, te quiero decir un secreto – lo jaló a la altura de su cabecita- permiso señorita –dijo mirándome-

 -Adelante Princesa –le dije sonriendo-

 Luego vi que salió corriendo hacia la cocina, llamando a su nana

 -¿Sabes lo que me dijo en secreto, Hailie? –Me acercó a él y se abrazó de mi cintura-

 -No sé, mi rubio, muero de la curiosidad –sonreí pasando mis brazos en su cuello-

 -Que tú le caes bien y que eres más bonita y buena que mi otra amiga, la odiosa- ambos reímos-

 -Que bella es tu hija –le dije acariciándole el rostro-

 -Y tú la más bella del mundo- se me acercó y me besó dulcemente, pero no por mucho pues me aparte un poco-

 -Nos puede ver Hailie, amor... -me separé y lo tomé de las manos-  

Vimos regresar a la niña

 -Vámonos papi, quiero comerme un helado con tres esferas, chocolate, vainilla y fresa, ¡sii!- ambos reímos- 

 Fue una tarde mágica, tierna, amena. Pasar tiempo con su hija me hizo sentir más unida a él, ya no tenía dudas, ni temores, quería ser suya, quería perderme a mí misma en su mundo, en su música, en su familia, en lo que me daba cada día que estaba a su lado, quería descubrir ese mundo desconocido de su sexo agridulce y adictivo, ese que tantas referencias había tenido desde Mariah hasta otras mujeres que había escuchado en entrevistas. 

Quería ser de él completamente y para siempre y en el fondo sabía que nuestra unión de cuerpo y alma sería más allá de lo vivido por ambos hasta este momento de nuestras vidas. Él me demostró que lo que teníamos era especial y único. 

Regresamos a su casa y Marshall subió a acostar a la niña pues se había quedado dormida en el viaje de regreso

 -Duerme plácidamente, ahora podemos ir a reivindicarnos mutuamente nena- me apegó a él de manera insinuante, sentí como mi piel se erizó al instante-

 -Si mi rubio hermoso, no hay nada en este mundo que desee más en este momento que entregarme a ti –nos besamos- 

Al rato nos separamos y saliendo de la casa, sonó su celular 

-Dame un minuto, respondo esta llamada y nos vamos preciosa... 

Narración de Marshall: 

-Aló, ¿Quién llama?-bufé-

Friend's Obsession (Reeditando)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora