LA VERDAD ES. . . PARTE 4

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PARTE NÚMERO CUATRO

CAPÍTULO NÚMERO 14

-¿Viendo doble?

Me empiezo a reír tras ver la expresión de Joaquín, no te hagas el gracioso –Lo miro seria y seco una lagrima de risa- No es doble es Matthew el amigo de mi hijo ahora muévete –Chasqueo los dedos- Tengo prisa –Entro al auto nuevamente-

-Me quedo inmóvil unos segundos tras procesar lo acontecido y entro de inmediato al auto, me aseguro que no esté nade tras el coche y salgo del estacionamiento para dirigirme a la interestatal que conduce hacia la casa de los Adee. Cada cierto tiempo regreso a ver al retrovisor mirando a esos dos niños, parecen hermanos no solo eso sino que parecen gemelos....

Sus gestos sus facciones hasta sus sonrisas son tan parecidas, su cabello es muy parecido diría que si se encuentran solo él uno del otro se confundirían con facilidad, la diferencia pequeña que pude notar es el color de los ojos los del otro niño son marrones y los de Jordán son azules profundos es lo único que me permite diferenciarlos, mi señora también los mira algo extrañada y dudosa cómo queriendo descifrar algo importante.

Unos cuantos minutos después finalmente llegamos, el camino parecía hacerse más largo pero finalmente llegamos, estacione le carro y baje de él inmediatamente, no soportaba más ese ambiente tan tenso

-Bueno, bueno niños paren ya que ya llegamos, sonrió y abro enseguida la puerta, bajen y vallan adentro, miro a Joaquín pensativo cómo si quisiese decirme algo pero se sintiera intimidado y mejor prefiere callarlo.

-Matthew y yo bajamos enseguida, mamá iremos adentro ¿Vienes con nosotros?

-Sí ahora voy, miro de reojo a Matthew y le contesto a Jordán, si cariño voy con ustedes

Y tú Joaquín -Lo señalo acusadoramente- Mantén encendido el auto que regreso enseguida

-Asiento lentamente, sí señora lo mantendré encendido

-Seguí de cerca los pasos de los niños y entre a la casa con ellos, al ver que la niñera ya había llegado le deje dando instrucciones específicas entre ellas que mantenga todo arreglado, subía arriba tome mi bolso y baje hecho una bala, si no me apresuraba llegaría tarde a mi junta con John

Subí al auto, bueno vámonos que tengo mucha prisa

-Sí señora, me di la vuelta y empecé a conducir ¿A dónde la llevo ahora señora?

-Llévame la restaurante Canadiense Toronto, y apresúrate que llegare tarde y si lo hago te despido, lo mire ya bastante molesta a través del espejo

-El camino fue largo y callado, tenía poco tiempo gracias al cielo no había tránsito y logramos llegar en menos de 20 minutos, me aparque y apague el coche esperando nuevas instrucciones

-Me baje del coche, me revise que este bien por última vez

Escucha Joaquín y muy claro, me acerco a la ventanilla del coche

En dos horas quiero que me recojas aquí mismo, quiero que seas puntual escuchaste, no te espero ni un segundo más ¿Entendido?

-Sí señora

-Bien, puedes Marcharte

Saque mi celular de la cartera y llame enseguida a John

*INICIO LLAMADA TELEFÓNICA*

-Me encuentro aquí ¿dónde estás?

-Segundo piso alado de la ventana principal

*FIN LLAMADA TELEFÓNICA*

EL SECRETO DE MARTÍNDonde viven las historias. Descúbrelo ahora