EL SECRETO DE MARTÍN

MILITAR

P.O.V JORDÁN

-Era el día de mi cumpleaños y todo transcurrió normalmente, cumpli 8 años finalmente aunque tuve esa rara sensación de ya haber pasado por ese momento en la pequeña fiestecilla estuvieron todos mis amigos y amigas de la escuela, en especial aquella que tanto quiero...

Mi bella, mi dulce y hermosa Ariana...

Ella y yo jugamos mucho no la pasamos juntos toda la fiesta estábamos riendo, cantando, jugando haciendo mil y un locuras juntos como siempre, este definitivamente fue uno de los mejores cumpleaños de mi vida, ame los regalos que me trajeron pero ni todos ellos podían compensar la alegría que era estar junto a Ariana, definitivamente esa niña es muy importante en mi vida...

Ya pasaron dos semanas desde mi cumpleaños y lo único que he conseguido son peleas, peleas y más peleas, siempre defienden al tal Thomas, mis padres me echan la culpa de todo a mí no me creen una mierda...

Incluso Ariana se alejó bastante de mí, simplemente con Thomas cerca de mí toda mi vida vale mierda, siempre pasa cuando él está cerca de mí todo lo que debería salir bien me sale mal y siempre el culpable termino siendo yo. La culpa de todo realmente termina siendo mía aunque yo no tenga nada que ver...

La única que sigue a mi lado es su hermana gemela, yo no tengo ni el mínimo interés en ella, apenas y hablamos para mí solo es una amiga más...

Estoy acostado pensando en todo lo que ha transcurrido a lo lardo de la semana miro la hora son las 7:00 am sólo, me levanto de la cama y decido bajar para tomar una pequeña ducha antes de salir al patio a tomar el sol, quiero relajarme, lo necesito, siento que si no lo hago terminare estallando y no quiero, ese no es mi estilo, siempre fui pacífico y quiero mantenerme así...

-Voy bajando las escaleras de lo más contento, estas semanas definitivamente han sido las mejores, todo lo que he planeado me ha salido perfecto, veo al mocoso entrando al baño y ¿Por qué no arruinar este día también? –Sonrió- A un lado mocoso, primero los grandes, lo rempujo fuera de la puerta del baño

-¡Qué te pasa idiota! Llegue primero frunzo el ceño y lo rempujo devolviéndole su primer empujón, siendo el leve picor en mis ojos pero no le doy importancia, me molesta tanto que sea tan injusto conmigo, no tengo su fuerza apenas y logre moverlos unos centímetros lejos de mí

-Oh miren, quiere llorar, quiere llorar, la nena consentida de papá quiere llorar, río y finjo hacer un puchero....

Solo mírate, pareces una lombriz de esas de agua puerca, todo delgado y sin músculos....

Todo pálido que pareces muerto, no te metas conmigo y mejor lárgate a jugar con tus muñecas, lo miro por última vez y entro al baño

-¡Te mataré maldito imbécil! Lo siguiente que pasó fue que salte sobre la espalda de Thomas cuando entraba al baño en su momento de descuido, Thomas con la fuerza del salto callo de rodillas y yo comencé a golpearlo, le golpeaba por donde más podía, el solo se cubría su cara de niño bonito, pero en ese momento llego mi padre y estoy aquí...

En la sala castigado sin poder moverme hasta nueva orden, escucho los murmullos de la conversación entre mis padres más no logro distinguir lo que dicen solo siento un leve dolor que atraviesa mis neuronas, haciendo que mi vista se vuelva borrosa por momentos hasta perder el conocimiento total.

P.O.V MARTÍN

-¡NO! He dicho que no me importa, Antonella Jordán se irá a la milicia y punto...

-Martín por dios, es un niño, Martín no le hagas eso, ya suficiente tuvo con separarlo de su familia antes –La plática se empieza a salir de tono y va tomando más fuerza-