Bato Pato Patito

Sentimientos incompresibles y nueva imagen.

Me quedé esperando a que hable, pero solo me miraba fijamente.

-No vas a decirme nada ¿Verdad?.-

-Soy demasiado joven para morir atacado por un Koala aparentemente pacífico.-

-¿Koala?...-
Lo miré confundido a lo que el solo se encogió de hombros y se metió al auto seguido por mí.

-Es Kai... Le apodamos así ya que, a nuestra vista parece uno.-
Reí tontamente al comparar a mi amigo con estos animalitos y mas que era verdad, tenía aires de ser un Koala.

-Un Koala... ¡Oye! No te hagas pato y dime.-

-El pato aquí es otro, Kou... Hace unos días  escuché a Yuu llamarte así por teléfono y noto que  Akira también a lo hace.-

-¿Como? ¿Pato? Hace siglos que tengo ese apodo.-

Y así fue como Ruki se hizo tonto también, y nunca me contó nada.
Las idas de compras fueron agónicas, el era bastante estricto con eso al parecer. Al pisar la estética casi quedo loco ante tanta cosa que me pusieron en el cabello, olía del nabo y tardó un montón, quedo de color castaño un tanto oscuro y también lo cortaron en capas.
El fin de semana se fue en un parpadeo, moría ya por regresar a casa... O bueno... Casa de los Shiroyama.
Ruki se enfocó en vestirme, peinarme y ponerme un poco de maquillaje.
Me puso un short negro y una camiseta de color blanco acompañada de unos converse tipo botín.
Durante todo el camino a casa de Yuu luché por no vomitar del nerviosismo.
¿Que dirían al verme?

-Vamos, no seas dramático, luces bien, agradece que tienes piernas y no popotes.

Me bajé de mala gana del auto y la puerta de la casa se abrió y ví al señor salir.

-¿Shima? .-
Me miraba de pies a cabeza un tanto incrédulo, se acercó y solo se quedó ahí parado viéndome.

-¡El y Kai me obligaron! Fui sometido a fuertes experimentaciones de cambio físico y fui una prueba fallida no se burle se lo ruego.-

-No me voy a burlar, Shima. De hecho luces muy bien, te ves muy simpático. Disculpa me tengo que ir, te veo en la cena, hasta luego Takanori.-

Ni tiempo de agradecerle su cumplido me dió, solo me despedí con la mano y el ya estaba arrancando su auto.

-Vamos.-
Seguí a Ruki y entramos a la casa, todo estaba en silencio, a excepción por el sonido tenue de la televisión la cual, era atendida por Yuu.

-He vuelto.-

-Oh ¡Hola Shima! ¿Qué tal... Te... Fue?.-

Se levantó del sofá y al verme se quedó pasmado, caminaba a paso lento examinando me detenidamente.

-Bueno..-

-¿Que te hicieron?.-
Ahora había una sonrisa dibujada en su rostro, no era burlona... Era tierna y un tanto rara para mi.

-Yo me voy a bajar algunas cosas del auto.-
Ruki en menos de un segundo nos dejó solos y yo no sabia bien como reaccionar, siento que derrepente Yuu va enojarse o algo así...

-Fui a que me hicieran unos cambios para lucir mejor... ¿Te gusta?.-

¿Por qué mierda pregunté eso?

Me abofeteé mentalmente al haber dicho eso... Sonó tan marica que si esto fuese un anime, los brillos, el fondo rosa y el sonrojo de pasiva hubiesen hecho aparición.

-Luces muy lindo, el color de tus ojos resalta más debido a tu delineador y me gusta como se ve.-
Tomó mis manos y las miró también para luego mirarme a los ojos y sonreírme.

-Si me gusta, pero lo principal es que tu te sientas bien así.-

Confuso, frustrante, desconcertante, extraño... De nuevo Yuu era dulce conmigo, de seguro en un rato se le cruzan los cables y me va gritar mis verdades en la cara y hasta de lo que me voy a morir.

-Oh, por cierto Shima, tengo algo para ti.-
Soltó mis manos y fue a su habitación. Con las mismas vino y me entregó una caja.

-Esto es... ¡UN CELULAR!.-

Yo ahí todo emocionado ante la mirada atenta de Yuu y caí en  cuenta de algo.

-Ruki se fue ¿cierto?.-

-Es lo mas probable.-

-Idiota, de seguro no bajó mis cosas... Después  hablo con el.
Gracias por esto, Yuu.-

-De nada, ya hacía falta.
De seguro fue donde Akira.-

Dejamos el asunto y nos sentamos en el sofá y el me comenzó a explicar como usar el celular y todo eso.
Le bajamos varios juegos y nos entretuvo un rato.

Fue el momento mas agradable que  pude pasar con el desde que llegué a su casa.

-Yuu... Quiero preguntarte algo.-

-Claro, dime.

-Pero promete que no te vas a enojar y no me vas a volver a gritar ni a ignorar por que se siente muy feo.-

Parecía sorprendió ante mis palabras; bajo la mirada para después volverla hacia mi.

-Ten eso por seguro... Lo prometo.-

-Aguas ¿eh? Lo juraste... Bueno, quiero que me digas  el por qué de tu actitud conmigo... Un día me odias a morir y a otro me proteges solo para que al siguiente hagas como que no existo. Duele, Yuu. Tu eres importante para mi, y el que me trates así me duele más de lo que aparento.-

-Shima... Yo... No lo sé. No me siento bien, de verdad te pido perdón por todo el daño que te hice pero no puedo darte explicaciones respecto a eso. Si no puedo darmelas a mi mismo, menos a ti.-
Se levantó y se quedó parado dándome la espalda.
Yo me levanté y lo abracé apoyando mi cabeza en su hombro, no podía ver su rostro pero podía intuir que tenía el ceño fruncido ya que sentí como se tensó.

-Yo solo quiero que vuelva ese Yuu dulce, bromista y alegre. Quiero volver a pasarla así contigo... Quiero que todo sea como antes, ya no quiero seguir así.-

-Eso no es posible.... ¿No lo entiendes? ¿No te das cuenta? La cagué desde el momento en el que te conocí... En ese entonces yo ignoraba todo lo que pasaba, no era capaz de entenderlo.-

-No entiendo... ¿Que pasa? Nunca fuiste frío conmigo ni nada.-

-No es eso...-
El habló en un susurro y se tensó aún mas de lo que ya estaba, cosa que me hizo soltarlo.

-¡¿Entonces que es!? ¡No puedo ayudar si tu no colaboras!.-

-¡NO PUEDES AYUDARME! Tu eres la puta causa de que me encuentre así... Mierda... ¡Me enamoré de ti! ¿Me oyes? Yo no quería que esto pasara... Pero me enamoré... Me jodiste, Shima.-

¿Qué?
No podía creer lo que escuchaba... ¿Eso era lo que Kai y Ruki no querían decirme?

Quería llorar... Estaba muy asustado ante su reacción y esa tan inesperada confesión.

-Shima... Perdón.-
Sin más salió de casa dejándome con miles de preguntas en la cabeza. Lloré... Lloré y saqué todo lo que tenía guardado en mi, me dejé caer de rodillas al suelo y dejé que mi lágrimas fluyeran.
Me sentía tan extraño, tan confundido... Quería correr lejos de todo y de todos.

¡Hola! Les traigo drama tipo televisa ok no XD Digamos que este capitulo debe ser así como "Ohhh dios" pero solo conseguí algo aburrido... O así es a vista...
¡Bueno ya! Gracias por leer y seguir a Bato Pato Patito esperen el siguiente capítulo ;3