Soy un Bato al que le llaman Pato.

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Han pasado tres meses desde ese día...

- ¿Al fin y al cabo si son novios?.-

Los dos nos miramos ante la pregunta de Ruki ¿Que somos? Realmente no lo sabía, no besamos, nos dijimos que nos queremos y ¿no somos nada? Ahora el es mi ilusión, quiero estar a su lado sin importar nada, quiero saber que puede pasar... Ya no tengo dudas y el miedo se ha ido, me siento fuerte sabiendo que está conmigo... Me niego a dejar que vuelva a irse y más ahora que prácticamente lo tengo solo para mi.

-No sé... Realmente no sé si sea buena idea.-

-Shima, no importa si no quieres ir más lejos, con ser tu amigo podría conformarme... Aunque me duela.-

-Yuu... Bueno...-
Las miradas de todos encima nuestro, yo bajé la cabeza y dejé caer mis manos sobre mis piernas y solo me quedé en silencio, la tibieza del tacto de Yuu sobre mis manos me hizo mirarlo y el me sonrió.

-No te obligaré...-

-Yuu... Quiero estar contigo.-

Esas palabras de mi parte emocionaron a todos y llegamos hasta donde estamos ahora, vamos a cumplir tres meses de ser pareja, han pasado muchas cosas. Kai y Miyavi al parecer se entendieron muy bien y pasan mucho tiempo juntos pero dicen no ser más que amigos, pero esas miradas que se echan dicen todo lo contrario. Ruki y Akira al parecer van para largo, la neta mis respetos para Akira que soporta a ese enano caprichoso, cuando se pone de malas realmente es muy difícil... Para el amor no hay "peros" y mucho menos "reglas" todo pasa por qué tiene que ser así.
En el caso de los padres de Yuu, merecen un premio a los padres más distraídos del mundo, son atentos en cuanto a nuestra necesidades básicas pero para otras cosas no tanto, ni en cuenta de lo de Akira y el otro, eso que se han besado casi en sus narices y siguen sin "captar"... Aunque.... Si temo el que nos descubran a mí y a Yuu... Estoy seguro de que querrán separarnos.
Nos hemos esforzado en mantenerlo en secreto y ser lo más discretos posibles.

Soy feliz de tener todo los que tengo ahora, grandes amigos, unos fabulosos tutores y al mejor chico del mundo... (Qué marica sonó eso pero realmente es el mejor.)
Hoy me han dicho que me tenían una sorpresa después de clases, traté de no estar ansioso durante las clases pero no sé pudo y parecía tener pulgas en la retaguardia al estar brinque y brinque en la silla esperando que toquen el timbre de salida.
Me encontré con ellos y me vendaron los ojos, sepa Dios donde me estaban llevando, caminamos bastante hasta el punto de que me cansé y comencé a quejarme ganandome regaños por sus partes.

-Ya, Takashima, valdrá la pena, vas a ver.-
Pude reconocer su voz de Ruki quien supongo era el que tomaba mi brazo derecho ya que tras el regaño recibí un apretón.

-Debe, por todo lo que ya me hicieron caminar y además sin poder ver nada.-

-Tranquilo ya falta poco.-
Ese era Akira, podía escuchar a Kai y y Yuu cuchichear atrás mío, solo me limité a caminar al no poder entender nada de nada.

-Bueno, alto.-
Me jalaron haciendo detener mi andar y me acomodaron mirando hacia quien sabe dónde.

-Shima, este es un regalo de parte de todos nosotros, ya que, te queremos mostrar cuan importante eres para nosotros y por que te lo mereces.-
Su voz de Miyavi me sorprendió ¿estaba esperándonos? Sonreí sin poder contener la emoción.

-Chicos ya​ quiero ver.-

-¿Listo?.-
Asentí de manera frenética. Sentí como la venda de mis ojos se iba aflojando hasta que la retiraron totalmente dejando ver algo que realmente no me esperaba.

Bato Pato PatitoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora