Haces de mis días una película

12 1 0
                                    

Empecemos por esa mañana cuando desperté sin tenerte a mi lado acostada justo como nos habíamos quedado dormidas, sentí ese vacío en la cama que me dio la obligación de levantarme a ver donde estabas... Cuando sentí los ruidos de la cocina,  se me escapó una pequeña sonrisa de los labios. Por un momento pensé que te habías levantado a hacer cafesito, ya luego de ver que tardabas más supuse que estabas haciendo el desayuno.

Quería esperarte acostada, pero a la vez no. Quería ver lo que hacías, como lo hacías. Amo ver como haces las cosas, cualquier cosa siempre lo haces de una manera que hace querer quedarme a observarte por el tiempo que sea necesario. Quería darte los buenos días, darte un abrazo y quedarme haciéndote compañía, así como en las películas... Y ¿sabes que? Fue justo de esa manera. Lo amé.

Quedamos exhaustas luego de ese desayuno, dormir era la mejor opción en ese momento... Pero no me molestó en lo absoluto, acurrucarme contigo viendo la televisión y que de un momento a otro ya estemos ambas en un sueño profundo aunque aún sintiendo nuestros cuerpos juntos.

No soñé muy bonito en uno de esos momentos, más que un sueño era un mal recuerdo. No quería tenerlo... Me desperté de golpe, me senté en la cama, recuerdo que te moviste pero volviste a dormir. Necesitaba abrazarte muy fuerte en ese momento pero decidí dejarte dormir y volver a lo mismo yo,  de nuevo acurrucandome contigo.

Fuera de esa mala escena fue muy rico esa pequeña siesta que tomamos, como las propias bebés que los hacen dormir después de comer. Sentía tanto amor, no quería soltarte...

Me preguntaste que había soñado y por qué fue tan malo... Se que no te di la respuesta completa y detallada antes de caer en llanto. Siempre he odiado hacerlo, pero en ese momento se sintió bien; quería llorarlo todo aunque de igual manera me detuve... Te dije que había soñado con mi abuela y que había sido algo parecido a la última vez que la vi. Pues así fue pero era mas lento, sentía una desesperación horrible al ver esa mirada de total desconocida que ella me dio... No parecía conocerme, cuando yo si sabía todo de ella. Es doloroso, muy doloroso. Estoy  escribiendo esto con un nudo en la garganta, posiblemente nunca me canse de llorar su ausencia y mucho menos sabiendo que esta por ahí vagando en las calles, de ser el caso que todavía este...

Bueno supiste darme amor y compasión en ese momento, de nuevo, lo ame. Me haces sentir muy bien aunque este muy mal.

No sabes cuanto disfruté el día, sola contigo, no pudo haber nada mejor. Es necesario que se repita una y otra vez, si es posible eternamente.

Amo hacer tonterías para hacerte reír, amo ser una monita que no te deja en paz, amo esas sonrisas que causo en ti y no las cambiaría por nada. A ti, mi amor, no te cambiaría por nada.

"Jugando a torear el aire" según tu. En mi defensa quería sacar el cuarto el olor a... Okey, te reías mucho y sin duda tu risa es muy contagiosa pero me encanta. Ya había decidido dejar de hacer esa tontería, en cuanto vi esa carcajada que salio de tu boca decidí algo mejor y era seguir haciéndote reír. Lo amo mucho, y lo disfruto mucho. No me importa hacer el ridículo con tal de mantener esa sonrisa tuya tan hermosa.

Estoy sumamente enamorada de ti, y aunque no lo creas, cada día que pasa sigue aumentando. Te amo señorita Strucco, mucho.

Nunca esta de más decir que dormirnos tarde vale mucho la pena, lo disfruto, y definitivamente lo amo.

Todo contigo lo amo...

Lo que escribí para ti. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora