Hasta El Fin Del Mundo (OUAT) [TERMINADA]

Capítulo 3

Me siento en la cama y pienso en todo lo que ha pasado hoy. Ha sido un largo día y necesito descansar.
Lleno la bañera con agua caliente y sales de olor. Después paso allí media hora, ordenando mis pensamientos y sentimientos.
Me meto entre las sábanas frías y entonces llega un mensaje:
Eddie: Siento las horas, pero quería recordarte que mañana tienes grabación a primera hora con Colin. Buenas noches.
No me acordaba. Por una parte odio la idea de tener que madrugar, pero por otra parte volveré a ver a Colin y podré hablar con el más serenamente.
Yo: Gracias por recordarmelo Eddie. No llegaré tarde está vez!
Entonces entro en el chat de Colin y escribo:
Yo: te recojo mañana a las 7am que tenemos grabación.
Y antes de que me de tiempo de dejar el móvil en la mesita de noche recibo un mensaje.
Colin: Gracias por llevarme, coger el bus es un asco a esas horas...
Me quedo pensando en que quizá el esperaba mi mensaje y por eso ha respondido tan rápido, pero luego me acuerdo de su mujer Helen y su hijo, entonces esa idea se me hace una estupidez.
Dejo el móvil en la mesita de noche y me quedo dormida pensando en Colin, en cómo se ha preocupado por mi cuando tan sólo me conoce de unos días y en cómo me ha transmitido la confianza suficiente como para que le hablé de mí.

5:30am. Alarma.
5:45am. Alarma
6:00am. Alarma
Me levanto después de apagar tres alarmas y no es hasta entonces que recuerdo que quedé en recoger a Colin y como siempre, voy tarde.
Me pego una ducha rápida y me visto con lo mas cómodo que encuentro en el armario. Como no me da tiempo a desayunar, me limito a pensar en la sala me máquinas expendedoras, donde hablé con Colin por primera vez.
Cojo el móvil y las llaves del coche y salgo por la puerta cuando suenan las campanas de y media.
Cuando llego Colin me está esperando con dos cafés, parece que no ha dormido muy bien hoy. Sube al coche y me ofrece uno de los cafés que sostiene.
-Gracias-le digo- me he levantado demasiado tarde y no me ha dado tiempo de desayunar.
-No hay de que, gracias a ti por llevarme.
Durante el trayecto hablamos sobre la escena que filmaremos hoy. Donde Emma y Garfio trepan por el tallo de la judía mágica.
Es una escena complicada y larga así que calculo que seremos libres por la tarde/noche.
En el descanso de la comida vamos a un bar cercano llamado Susi's, donde hacemos una vez al mes una cena todos juntos. Nos acompañan Ginnifer y Josh.
Cuando estamos tomando el postre, el móvil de Colin suena, él se disculpa y sale a fuera para poder hablar con más tranquilidad.

-Que, ¿es un buen fichaje, eh?- me dice Ginny

- Tan sólo lo conozco desde hace unos días, sólo somos amigos. Además el está casado y tiene un hijo.

-Que pena...-Dice Josh con sarcasmo.

- Si no he entendido mal, puede que Emma y Garfio tengan una relación amorosa...¿Que te parece la idea?

Cuando escucho esas palabras salir de la boca de Ginny me quedo de piedra. Ella se suele enterar antes de las ideas de Adam y Eddie, ya que son amigos así que no creo que mienta.

-Bueno, creo que Emma se merece otra oportunidad después de lo que pasó con Neal.

-Si, tienes razón. Además con lo bien que os lleváis, no creo que haya dificultad al grabar, y si te hace algo, tu papá te defiende...

Josh siempre esta haciendo bromas por nuestra relación "paternofilial" en la serie. Es uno de los mejores compañeros que he tenido nunca.
Miro hacia la puerta y veo como Colin se lleva la mano que tiene libre a la cabeza, parece enfadado y disgustado. Hago como si no me hubiera dado cuenta para no sufrir un interrogatorio por parte de Ginny, que siempre intenta ayudar, aunque a veces no lo consiga...la intención es lo que cuenta y todos la queremos mucho.
Veo como Colin se dirige a mi con una mirada y preocupación, entonces suena mi teléfono, me levanto y mientras salgo del restaurante miro quien llama:
Colin.
Miro hacia donde se encontraba antes y ya no está. Me apresuro en salir y entonces lo veo allí sentado, cubriendo su rostro con las manos.
¿Me necesita?

Es difícil no tener miedo de perder a alguien a quien quieres, y más si nadie ha tenido miedo de perderte a ti hasta ahora.