MANIÁTICOS © (Zayn Malik) +16

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Zayn Malik;

Estaba muy preocupado por Noura (si, aunque no lo crean) la verdad no quería verla por ahora, quiero que cuando nos conozcamos sea especial, y que ella se sienta cómoda con ello. Se que la idea de que un cantante tan reconocido como yo este enamorado de una fan es algo alocado, pero lo que siento por ella va más allá de una simple pasión pasajera.

La sencillez de su mirada, su espectacular cuerpo y su forma de ser hacían que despertaran unos instintos que no conocía. Y se que provóco lo mismo en ella. Ver cómo ese hijo de perra de Ryan casi abusa de ella me hizo reaccionar de tal manera que lo deje inconsciente en el pasto de su casa, e inmediatamente escape.

Llegue a mi departamento frustrado sin razón, se que ella debe de estar un poco aturdida por lo sucedido en aquel lugar, pero aún no puedo verla.. debo arreglar algunos problemas antes de poder estar con ella definitivamente. Busque alguno que otro libro para leer en mi biblioteca privada, para despejar un poco la mente y sincronizar con mi espíritu. Decidí leer "Buscando a Alaska" de John Green antes de dormir. Ese libro aunque no lo crean me relaja bastante.

Cuando por fin caí rendido en mi cama solo me imaginaba tener entre mis brazos a mi pequeña Noura. Aunque en realidad no era nada pequeña por así decirlo, era un monumento hecho mujer, que despertaba los instintos de cualquier hombre. Me daba coraje solo de pensar que alguien más pueda tenerla entre sus brazos.. me sentía como un adolescente.

Así pasaron las horas en ese oscuro cuarto de apartamentos. Frío y solitario. La fama no era todo por así decirlo, necesitaba alguien que me completara, y ella era la indicada.

La mañana siguiente fue igual de monótona como siempre, tenía que firmar algunos autógrafos, firmar con una nueva disquera, dar entrevistas entre otras cosas aburridas que solo los artistas saben. Mire el celular con la esperanza de que Noura haya contestado alguno de mis mensajes, pero la decepción me embargo al saber que ni siquiera los leyó.

Con frustración me marche de casa con la esperanza de que ocupándome de otras cosas podría olvidarla. Cogí las llaves de mi auto y me marche al Bulevar en donde me esperaban cientos de fans en busca de una foto o un autógrafo de mi persona.

Y no mentía, había muchísimas personas ahí, la mayoría eran adolescentes aficionadas por mi trabajo. Estás cosas la verdad me alegraban mucho por saber que muchas de esas chicas cumplieron sus sueño de conocerme.

La fila era bastante larga y desde que llegue solo se oían gritos y aplausos. A pesar de todo no era tan malo estar rodeado de personas que te admiran y les gusta tu trabajo. Comencé a firmar los autógrafos para algunas chicas, y a tirarme fotos con ellas mientras veía su cara de emoción por abrazarme.

Antes de terminar tuve que dar unas palabras agradeciendo a todas las personas que estuvieron allí acompañándome y luego seguí firmando autógrafos a las que quedaban. Justamente cuando iba a darle su autógrafo a la última persona, me topé con una sorpresa...

Era ella.. Noura.. en mi firma de autógrafos.. y al verla no supe reaccionar. Mi mirada estaba fija en aquellos ojos azules que encantaban a cualquiera, y en ese sedoso cabello rubio platino que enloquecía. Estaba como un completo bobo, pero debía mantener mi ética profesional. Lo que decidí hacer fue firmarle aquel papel con naturalidad y luego apuntar una dirección para que nos veamos allí después de terminar con esto.

Ella sonrió al ver que no le era indiferente y se marchó sin decir ni una sola palabra. Estaba tan aturdido, pero a la vez tan deseoso de abrazarla, decirle que todo lo que quiero es estar con ella, y follarla. Si.. dirán que soy todo un pervertido, pero lo que mantiene una relación es el sexo.. ¿no?.

Salí como un rayo hacia el lugar donde le indique a Noura que nos viéramos. Era ese viejo restaurante de comida mexicana que me gustaba visitar cuando estaba triste o cuando tenía alguna inquietud, porque los tacos eran el mejor remedio para curar cualquier dolor del alma. Cuando llegue al restaurante, ella estaba ahí.. con el rostro radiante que la caracterizaba, incluso pude notar que sus mejillas se tornaban de un color carmesí por la impresión de verme a través de la ventanilla. Le sonreí desde fuera y entre al lugar, el cual estaba repleto de personas por doquier.

Me senté justo de frente a ella, pero las palabras no querían salir. Estaba tan nervioso como un chico de 15 años cuando tiene su primera cita. Cuando por fin decidí hablarle mis manos temblaban..

-Hola.. -dije
-Hola.. dijo ella con una voz dulce pero a la vez cautivadora.
-Eres más hermosa en persona, sabes.. -dije
-Oh por favor, siempre me lo dicen, aunque tú no te quedas atrás.. Zayn. -dijo
-Repite mi nombre de nuevo. -dije
-Zayn.. -dijo ella con cara de pervertida.
-Oh nena, casi provocas que mi amiguito reaccione en este lugar. -dije
-No es buen lugar. -dijo ella.

Estaba convencido de que era la indicada, era igual que yo, con mente sucia y con unas ganas extremadamente necesarias de coger. Pero ella tenía razón. No era el lugar indicado para comenzar con cosas eroticas si no vamos a tener nada. Hay un dicho colombiano que dice "No caliente lo que no se va a comer" y tenía mucho que ver con lo que estaba sucediendo.

Entre ella y yo decidimos elegir algo en el menú, y los dos coincidimos en que lo mejor que podíamos pedir era tacos.

-¿Has venido a este lugar? -pregunté
-Vine con unas amigas hace un tiempo, para ponernos al día y esas cosas, ¿y tú? -dijo
-Suelo venir aquí. -dije
-Con chicas como yo verdad. -dijo con desagrado.
-Si, con chicas, pero ninguna como tú. -dije entre risas.
-Es enserio? -dijo
-Es broma, solo vengo aquí cuando estoy triste o cuando algo me preocupa, porque los tacos son mi mejor medicina. -dije
-Eres tan lindo. -dijo admirándome.
-Lo se. -dije sonriéndole.

Minutos después llegó nuestra orden de tacos al pastor. Al parecer está chica por increíble que parezca comía bastante. Pero era de aquellas suertudas que no engordaba. Pero aún así ella estaba bien así como era, no era ni delgada ni gorda, era justamente el medio. Era alta, nalgona y los pechos justos para agarrar.

-Cuando cumples 20? -dije
-Pues en unas semanas.. -dijo
-Tengo un regalo muy especial, pero te lo daré cuando cumplas 20. -dije
-Está bien! -dijo

Así pasó la noche. Conversamos de muchas cosas de nuestra vida diaria, y luego le ofrecí llevarla a su casa y así lo hice.

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Continuará ❤️