Entre deseos y sueños. (Finalizada)

Capítulo 8

Golpee su puerta un par de veces pero no recibí respuesta. Me senté en la vereda esperando que regresará y saqué mi celular. Hay una llamada perdida y un mensaje de voz.

¿Dónde estas Sakura? Estoy en el pueblo. Llámame, podemos regresar juntos.

Cerré mi celular y no le devolví la llamada a Sasuke. Cuando el sol empezó a ocultarse aparecio Gaara, se lo ve realmente apuesto y con un aire mas adulto. Apenas lo vi me lancé a sus brazos y él correspondió rápidamente.

- Que bueno que aparecieras Sakura, estaba pensando seriamente ir a tu casa.-

- Pense que Ino ya te advirtió de la escopeta de mi padre.-

- Lo hizo, pero quería verte.-

Me invitó a pasar a su casa y me comentó que su madre fue ayudar a su tía que acaba de tener un bebé.

- Entonces tenemos la casa para los dos solos.- dijo sonriendo.-

- No cambias Gaara.-

Se acercó y levantó mi mentón.

-Si me quisieras.-

Cubri con mi dedo su boca antes que siguiera hablando.

- Somos amigos y lo seguiremos siendo. Lo siento.-

Pude percatarme de su rostro observarme con tristeza y mi corazón dolió.

- Amigos.- dijo y sonrie falsamente. Sus labios chocaron con los míos y me envolvió en un beso al que no correspondi. Se separó de mi prontamente.

- Quiero hacerte mía Sakura, quiero muchas cosas de ti. Pero quererte duele y si consigo tenerte en mis brazos jamás voy a olvidarte.

Me senté en el sofá.

-Veamos películas de terror.- lo escuché decir.- ¿Aun te gustan?.-

-Si, aunque aún tengo miedo dormir sola después de verlas.- Gaara me sonrio y se sentó a mi lado.- ¿Has visto a Naruto?.-

-Su internado queda bastante lejos de la civilización así que aún no he conseguido ir a verlo.-

Vimos un par de películas y me quedé a dormir en su casa. En el cuarto de uno de sus hermanos que ya no vivía en el pueblo. Me levanté casi cerca de las cinco de la mañana, le deje una nota a Gaara despidiendome ya que no quise interrumpír su sueño que parecía ser muy agradable. Mi mochila casi vacía de perfumes y maquillajes ya no pesaba tanto lo que me hizo caminar un poco mas rápido. Las lágrimas se deslizaban por mis mejillas. Ver a Gaara e Ino dolía, dolía demasiado. Deseaba que todo volviera a ser como antes. Extrañaba a Sai y Naruto. Quería que Ino volviera a ser conocida como la muñeca hermosa del pueblo y no como la zorra del bar. Deseaba ser la inocente Sakura y no la manipuladora e interesada. Cerca de llegar a la casa limpie mis lágrimas y bloquee todos los sentimientos que me afligian para volver a ser la misma. Por la puerta trasera ingrese a mi habitación me duche y me coloque el uniforme aunque lo hice dudando, quizás Sasuke me despidió.

En la cocina Tsunade me observó con una sonrisa apenas llegue a ayudarla.

-¿Te divertiste? ¿Viste a tu novio?.-

-¿Me despidieron?

-No.-

-Vi a mis amigos, y si, la pase bien.- Iba a decir muchas cosas mas pero al verlo entrar a la cocina preferí él silencio.

-Ven a mi habitación, tenemos que hablar.-

Tsunade me miro a mi y luego a Sasuke, continuó lavando los platos. Lo seguí a mas distancia de lo que antes solía hacerlo. En su habitación me quedé cerca de la puerta mirando mis zapatos negros.

-No me respondiste ayer.-

- Era mi día libre.-

Me negue a observarlo, vi detras de él donde me golpee la cabeza.

-No quise lastimarte Sakura.-

- Ayer tuve que comprar medicamentos para el dolor.- menti.- Aumenta eso a mi sueldo.-

-Entonces puedo golpearte siempre y cuando te pague luego lo que costó el tratamiento.- Me sentí estúpida, tiene las manos introducidas en su bolsillo.

-Vuelve a tocarme y tendrás que encontrar otra sirvienta.-

Levantó una ceja y sonrio de lado.

-Eres mía.-

No pude evitar que la carcajada se escapara de mi boca.

-Te estas escuchando niño.- recalque la última palabra.

-Niño.- menciono serio.- Te recuerdo que este niño tiene suficiente dinero para comprar todo el pueblo.-

-¿Qué quieres Sasuke?.- lo interrogue presa de furia.- Soy pobre si, pero no un objeto. Me da igual la mierda que puedas comprar con tu dinero. Eres un idiota. Pagame el tiempo que trabaje contigo. Renuncio. Dame el dinero y me iré.-

Me quite el delantal. Regresaría con mis padres, conseguiria otro trabajo y luego me iría con Ino del pueblo. Nos encontraríamos con Sai, Naruto y Gaara. Todo sería como antes. Pero necesito el dinero, lo necesito para poder dejar el pueblo, para ser libre, para no convertirme en mis padres.

Sasuke me observa fijamente.

- No me escuchaste, Sakura. Dije que eres mía, así que no puedes renunciar.-

- Pagame.- grite.- Dame mi dinero, quiero irme.-

Maldito orgullo que me impide quedarme callada.

Él se acercó y colocó su manos en mis brazos, forcejee un poco y aún así sus labios consiguieron tocarme. Sentí estúpidos cosquilleos en mi estómago que trate de ignorar con afán. Lo empuje, él esta sonriendo.

-Bastardo.- pronuncie con enojo.

Alcanzó un mechón de mi cabello.

-Ayer te vi con un tipo. ¿Ese es tu novio?.-

-No.- Respondi mirando a la ventana a las nubes blancas, el cielo azul.- No tengo novio.- Abrió la boca como si fuera a decir algo y luego prefirió el silencio.- No quiero mas contacto físico entre nosotros.- Murmure sin mirarlo.

Me observó soprendido.

- ¿Por qué? ¿Te cansaste de pervertirme?

- Tú ya eras un pervertido.-

Nos observamos fijamente, sus ojos son negros y profundos. No son celestes y cálidos como los de Naruto. Son negros, vacíos, y crueles .

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