Capitulo 7

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MUERTO, no me lo puedo creer, Jacob, la persona en quien menos confiaba de todo mi grupo ha muerto por mi. Cuantos mas habrán muerto por mi culpa, todo ha salido tan mal. Ya he acabado de cargar todo lo que he podido en la vagoneta, llevo puesto un chaleco Kevlar, el fusil de precisión a la espalda, un arco de ultima tecnología, dos pistolas en la cintura, varios cuchillos y cintas de balas y explosivos. Por ultimo llevo una mochila con cosas varias para sobrevivir y artefactos  especiales. 

De repente lo oigo, Peter entra corriendo en el almacén, tropieza y cae de morros, se levanta a duras penas. Esta cubierto de heridas, sangre y cenizas, tiene una fea herida de bala en el hombro. Esta agotado y se ve que lleva un rato corriendo, huyendo de alguien o algo.

-Ahhhhh....Ufffff.....Ra.....Ralph....nos....nos ha traicionado.... Esta con los humanos..... han .....- las lagrimas corren por sus mejillas y rompe en sollozos. - Calma, tranquilo, que han echo, prosigue.-Le digo consolándolo, una gota de sudor frió me baja por la frente.  Se calma y continua, ahora con odio en sus ojos.

- Han matado a Kali a traición, como a un animal. Nos han tendido una emboscada, Jacob escapo a buscarte y ayudarte, los entretuve y he logrado escapar, vienen hacia aquí. -

Cae debilitado por el esfuerzo, lo sostengo y lo meto en la otra vagoneta, engancho la de las armas y las meto en los raíles, la empujo y me meto dentro de un salto, nos dirigimos a la entrada por los túneles cuando al cabo de un rato unas vagonetas llenas de soldados nos salen al paso, la persecución comienza.

Me agacho una milésima de segundo antes de que disparen. Las balas pasan a milímetros de mi rostro, agarro el lanza-granadas y me asomo, apunto a la primera vagoneta y disparo, al no haber usado nunca esta arma, se me eleva por el retroceso y fallo. La granada estalla unos metros atrás, entramos en cuesta y aceleramos. Vuelvo a disparar, esta vez la granada cae dentro de la vagoneta, los soldados gritan, alguno saltan, la granada estalla y vuelan por los aires.

A este ritmo no llegaremos nunca a la salida, de repente, por el rabillo del ojo, veo la entrada de un túnel cortado y lleno de señales de no entrar, no tengo otra opción, agarro el volante y giro , la vagoneta da un brinco, atravesamos la barrera y nos precipitamos a la oscuridad.

En otro lugar: Rebeca acuesta a Meredith, le lee un cuento y le cuanta historias de cuando era pequeña, de como conoció a su padre... Cuando ya se esta durmiendo baja las escaleras. Se dirige al salón y se sienta. Agarra la caja de libros que logro encargar hace unos días al sector mercader con el dinero que llevaba ahorrando. Siempre le ha gustado leer y sabe que no todos los humanos son tan malos, solo la mayoría, es comprensiva y sabe perdonar. Mira los títulos, hay que reconocer que los humanos son muchas cosas, pero no son malos escritores. "El Cementerio de Cristal", "La vuelta al mundo en un verano", " En blanco", " La isla de Katnup", "Llamas de libertad"....

Lleva ya un rato leyendo cuando ve de reojo unas sombras por la ventana, apaga los fusibles y sube a la habitación, coge el pico de Ocho, la foto de familia, el arco de su marido y una mochila con cosas esenciales, se las da a su hija y le dice que corra, que no haga preguntas, que la quiere y que salga por la puerta de atrás entonces, las ventanas estallan. 

Agarra varios cuchillos que se coloca en el cinturón, una sartén y la pistola que tiene escondida en el colchón, entrecierra la puerta, las botas empiezan a resonar contra el suelo, observa por la rendija de la puerta. 

Son soldados con uniforme negro, están situados en la entrada, en un circulo de luz que entra por las ventanas rotas, todo lo demás es oscuridad. Son soldados de asalto especiales, empiezan a registrar la casa.

- Aquí no hay nadie.- Dice un soldado, - Seguir registrando- responde el que debe ser el capitán. De repente una bota golpea la puerta y la abre de golpe. La sarten golpea su cara con tal fuerza que se abolla, se oye un golpe sordo y un crujido, se desploma pesadamente. Rebeca aprovecha la oportunidad y se fusiona con las sombras.

NADIE TOCA A SUS HIJOS.

El Capitán del escuadrón observa La habitación, sus 15 hombres están registrando la casa, 5 arriba y los demás abajo con el. De repente se oye un golpe sordo y algo golpea el suelo sonoramente. Todos se ponen alerta. Se empiezan a oír gritos de terror en el piso de arriba. Se oye un golpe, sollozos y suplicas y un disparo,  otro crujido seco resuena y un guardia cae rodando sin vida escaleras abajo, algo baja corriendo, un siseo aterrador algo alargado agarra a un guardia por el tobillo y lo arrastra gritando a la oscuridad. Los soldados se ponen en circulo alrededor del circulo  de luz. Los gritos del guardia cesan al oírse el filo de un cuchillo cortar el aire y desgarrar la carne, la sangre salpica el suelo. El ser comienza a dar vueltas a toda velocidad alrededor de ellos entre las sombras.

Dos guardias no pueden mas y huyen hacia la puerta, varios disparos cortan su huida, dos menos. Un soldado dispara y se hace el silencio. 

- Creo que le he dado, ¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡ Le he dad.....!!!!!!!!!- pero no acaba la frase, un cuchillo de carnicero le atraviesa la cabeza.

Una mujer medio reptil entra en el circulo de un salto y aterriza sobre un guardia, le asesta un puñetazo y le pega un disparo, se agacha asesta un sartenazo en la mano a otro guardia desarmandolo y lo acuchilla. Esquiva otro disparo y salta, dispara en el aire y le vuela la tapa de los sesos a otro guardia. Un disparo le da en la pierna y cae, se gira y dispara a su atacante.La sangre empapa el suelo y los cadáveres se amontonan. El capitán dispara y le da en el hombro, la mujer grita y se balancea, dispara y le da al capitán en el vientre. Herido de muerte, cae al suelo y en sus últimos momentos divisa el taque de combustible que proporciona energía a la casa. - A la mierda- dice en sus últimos instantes de vida, aprieta el gatillo y la casa estalla en llamas.

 - A la mierda- dice en sus últimos instantes de vida, aprieta el gatillo y la casa estalla en llamas

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