El guapo abogado ojiverde, Harry Styles tiene las ideas muy claras y además tiene un sueño muy altruista, el cual le traerá sorpresas inesperadas y también muy agradables, aunque inevitablemente también mucho sufrimiento.
Louis Tomlinson por el cont...
Luego del episodio de nervios que había sufrido Louis en el despacho del médico, Harry había conseguido llevárselo a casa para que descansara.
Hubiera sido inútil dejarlo pasar la noche en la sala de espera cómo el ojiazul había querido, ya que no podía hacer nada más que desesperarse y conseguir que lo echaran y además, Amanda estaba muy bien atendida por los médicos y las enfermeras.
De todos modos, el abogado le dejó al médico una de sus tarjetas de visita con su teléfono, por si surgía algún problema y así poder localizarlos.
Louis lloró todo el camino y cuando llegaron a casa de Harry, este le enseñó la que sería su habitación y también el baño, donde este se metió y tras desnudarse siguió llorando bajo los chorros del agua.
Se sentía morir pues la culpa y los remordimientos le carcomían el alma.
...-Louis- le habló el rizado tocando la puerta-... te dejo sobre la cama un pijama de los míos, ya que no tienes nada, iremos mañana por tu ropa.
Louis no dijo nada.
-Iré a preparar algo para cenar, ¿Espagueti está bien?
Tampoco hubo respuesta, por lo que el rizado se fue finalmente para dejarlo solo pues estaba visto que no era santo de su devoción estar allí.
Una hora más tarde, Louis apareció en la cocina con el pijama de Harry puesto, el cual le quedaba enorme, así que lo tenía recogido con varias dobleces en los tobillos y en las muñecas.
-Anda siéntate, esto ya está listo.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
-Se ve delicioso Harry, muchas gracias-habló el castaño en cuanto el mayor le puso el plato de pasta delante.
-Ya sé que no es un plato elavorado pero llenará tu estómago.
Al terminar de cenar, ambos se dirigieron a sus respectivas habitaciones, ya que estaban agotados pues el día había estado lleno de emociones, al igual que probablemente lo sería el siguiente.
Los minutos pasaron y tan solo Torn dormía en la casa, ya que ambos hombres daban vueltas y más vueltas sin poder pegar ojo.
Harry por su parte, no dejaba de mirar al techo y pensaba en Louis y en todo lo que había tenido que sufrir desde niño, con la pérdida de su familia y con una vida de carencias la cual lo había llevado a delinquir.
Era terrible, nadie se merecía algo así y mucho menos él pues el abogado creía que a pesar de su pose de chico malo rebelde, tan solo era ser humano falto de cariño y comprensión.
El ojiazul, por el contrario, solo pensaba en cómo iba a hacer para conseguir el dinero para pagar la cuenta del hospital.
...-Estoy perdido, ¿Y si le pido un préstamo a Harry?, oh no.. no, ya se ha portado muy bien conmigo, le debo demasiado, tendré que pensar en otro modo de conseguirlo...maldita sea...pero ¿qué haré?, solo sé delinquir.
(...)
Harry y Louis subieron al coche y se dirigieron a casa del ojiazul para recoger sus pertenencias y llevarlas a su nuevo hogar, luego se dirigieron al hospital para ver a Amanda.
El castaño nuevamente se puso una bata y una mascarilla para poder entrar a visitar a su abuela en la Uci (Unidad de Cuidados Intensivos), donde se le encogió el corazón al verla igual de inmóvil, postrada en la cama y con múltiples máquinas que no paraban de pitar.
Amanda en su juventud había sido una belleza de mujer, llegando incluso a posar para alguna revista de moda o para algún artista a cambio de algo de dinero, ahora estaba muy pálida y demacrada pero seguía siendo hermosa.
El médico aprovechando que este estaba dentro, decidió acercarse al rizado, el cual estaba sentado en la sala de espera.
...-Buenos días Sr. Styles, ¿podríamos hablar un minuto en mi despacho?.
Este caminó siguiendo al doctor y una vez allí, tomó asiento muy intrigado.
-Díganme, ¿Que sucede?
-Hemos decidido sacar a la paciente del coma inducido pues en la ultima prueba realizada hemos visto que la inflamación del cerebro ya ha remitido y una vez despierte la trasladaremos a una habitación pero en una planta destinada a gente sin recursos.
-¿Qué significa eso?
-Sr. Styles, siento decirle que tanto la cuenta de estos días en la Uci, como la cuantía de la operación deberán ser abonadas... cuando la sra. Tomlinson ingresó no había ningún familiar con ella que comunicase al hospital de su situación económica, por lo tanto la política del hospital es muy estricta y debe ser saldada... He decidido comunicárselo a usted, ya que el nieto de la señora es un joven con mucho temperamento y temo su reacción... creo que usted como su pareja se lo podrá comunicar con mucho mejor tacto que yo.
-Pero en ese lugar seguirán cuidando de ella igualmente ¿verdad?
El sanitario asintió.
-Si pero en esa unidad no disponen de tanto personal, por lo que no estará tan vigilada.
-Oh vaya eso es bastante preocupante.
-Lo siento pero lamentablemente esto es así.
Tras salir del despacho, el ojiverde volvió a la sala de espera con el semblante serio.
-Esto lo enloquecerá.
Un tiempo después, Louis regresó y entonces decidieron ir a tomar algo a la cafetería que había fuera de allí y así aprovecharía para decirle todo lo que el doctor le había dicho sin poner en riesgo el que los echaran del hospital por escándalo.
Louis se puso muy contento al escuchar de la mejoría de su abuela, ta que pronto vería de nuevo sus hermosos ojitos, podría hablarle y que ella lo escuchara.
Este tenía que decirle muchas cosas, además de pedirle perdón por todo lo que la había hecho sufrir en el pasado y decirle que iba a cambiar.
Este también supo lo de la cuenta hospitalaria que tendría que abonar en breve y del traslado de su abuela a la planta de pocos recursos, lo cual lo puso muy triste.
El ojiverde omitió lo de la escasa atención pues ya era suficientemente duro verlo tan mal.
-No podré pagar, no tengo nada ahorrado y lo que mi abuela tenga guardado, seguro no alcanzará para pagar.
El ojiverde lo tranquilizó y se ofreció a pagala él y ya luego cuando tuviese trabajo se lo devolvería, por lo que el ojiazul respiró aliviado y aunque no le gustaba depender de Harry para eso también, no tenía otra opción.
Lo cierto era que el ojiverde no dejaba de sorprenderle pues nunca hubiera pensado que existiese un abogado así de bueno, definitivamente Harry era un ángel caído del cielo, su ángel.
