Ashley
Salgo de la cafetería y comienzo a buscar a las chicas.
Las logro ver a la distancia, ambas sentadas cerca de la máquina de frituras.
Me acerco a ellas y trato de sonreír.- Si necesitan más compañia puedo llamar a la máquina de sodas- bromeo y me siento a su lado, colocando un mechón de cabello detrás de mi oreja.
Megan me mira pero no logro percibir aquella chispa que tanto la caracteriza en su mirada, miro a Jenn y puedo notar que ella tampoco lo percibe.
Estoy a punto de hablar cuando llega un mensaje al teléfono de Jenn.- Chicas, yo...- dice mientras muerde su labio- debo irme, había quedado con Dylan- suspira y guarda silencio un momento - o si quieren puedo cancelar, Meg me necesita - sonríe débilmente.
- No lo hagas- le digo- te entendemos, corre no pasa nada... Megan y yo necesitamos platicar un rato, comiendo pizza y helado mientras planeamos secuestrar a su crush Panchito- río un poco y Megan me da un codazo.
- Todas sabemos que panchito es tuyo Ash- dice Megan mientras sonríe - ya estoy planeando su boda.
Jenn se ríe y yo comienzo a hacerle cosquillas a Megan.
- ¿Así nos llevamos ahora? Muajajaja- digo mientras finjo una risa Malvada.
- Ash...espe...ra...¡¡¡CARAJO!!...Ash, por favor...- exclama y yo le dejo de hacer cosquillas.
- ¿Te rindes?- pregunto.
- En tus sueños- responde.
- Deben madurar niñas, en verdad- dice Jenn y nos guiña el ojo antes de irse.
Megan y yo la seguimos con la vista y en cuanto desaparece nos tiramos al pasto soltando carcajadas.
- Eres una tonta- dice y sonrío.
- ¿Juntas contra todo?- digo.
Ella solo me mira y desvia la mirada.
- Siempre.
**********
Después de nuestra "plática" Megan y yo fuimos a la sala común, un lugar donde los estudiantes podíamos tomar un descanso y convivir con alumnos de otros grados después de clases.
Escogimos una mesa en el fondo, pasamos el resto de la tarde en aquél rincón, charlando sobre viejos amores y grandes anécdotas. Después de casi media hora discutiendo sobre qué comer optamos por pedir una pizza de extraqueso y un bote de helado de galleta.
Llegó la noche y con esto la hora de despedirse, Megan había llamado a una tía que vivía cerca del rumbo y pasaría la noche con ella, ya que no quería tener que toparse con Dina en los dormitorios.
Era un viernes por la noche así que no habria ningún problema con las clases. Le di un fuerte abrazo mientras subía al taxi y di media vuelta dirigiéndome a los dormitorios.
Con suerte Dina estaría dormida o mejor aún, se habria quedado con Dave.
No tenia nada en su contra pero después de utilizar a una de mis amigas como pañuelo desechable y que Dina lo hubiera aceptado como pareja me daba náuseas.Al llegar al edificio subí por el elevador hasta el quinto piso en los dormitorios, me dirigí a mi habitación con paso lento por si acaso Dina se encontraba dormida para no despertarla.
No quería tener que confrontarla esta noche, si acaso sería hasta mañana.
Pero mi sorpresa fue otra ya que al llegar a mi habitacion pude percatarme de ruidos provenientes de esta.- Por favor, que no haya tenido el descaro de meterlo en nuestra habitación- pensé y meti la llave en la cerradura.
- Esto no es un motel así que...- me quede callada.
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El Chico De Los Ojos Verdes
Ficção AdolescenteEllas son las típicas acosadoras guapas, inteligentes y mejores que el FBI y él no es el típico güero que se cree Dios encarnado, es nuevo en la ciudad, en el colegio y nuevo en la lista de ellas. ¿Pero qué es lo especial de él? Sus ojos, esos herm...