V (2/2)

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Se sintió perpleja al notar que Shownu cruzó en sus pensamientos. No tenía sentido, habían hablado solo un día y algo en ella se movilizó ante la idea de que iba a estar con otro hombre.

Puso música para que los acompañara de fondo. Inhale Exhale de NAO llenaba levemente la habitación, cambiando el ambiente

"Without tripping up, search the wild until I'm found again. If you've had enough, use me to the fire and I can't get enough."

No recordaba cuantas veces terminó bailando y cantando esa canción mientras cocinaba o se arreglaba antes de salir.

Se sentó en el sofá, y Hyungwon luego de dejar la bebida, la acompañó sentándose a su lado. Se puso a jugar con su pelo mientras charlaban. En algún punto empezó a hacerle cosquillas, y peleando para salir de esa tortura, se encontró en el piso con él sobre ella inmovilizando sus brazos.

Con una sonrisa traviesa empezó a besar su cuello y ocasionalmente darle unas pequeñas mordidas. Provocando escalofríos que recorrían todo su cuerpo.

Libró sus brazos de la prisión que las grandes manos de él había generado y buscó su boca. Agarrando suavemente su rostro empezó a besarlo con una creciente excitación. Podía sentir cómo su cuerpo empezaba a pedir con desespero sus caricias.

Hyungwon le mordió levemente el labio, y luego de abrirle la camisa, comenzó a recorrer su torso con besos y lamidas. Provocando leve gemidos en ella. Besaba sus caderas mientras desabotona sus jeans. Buscó su mirada y se encontró con una chica con las mejillas levemente sonrojadas y una mirada llena de deseo.

— Eres jodidamente preciosa, ¿lo sabías?. — Le dijo con voz ronca mientras que, luego de haberse deshecho de sus jeans, besaba el interior de sus muslos.

— Y tú eres jodidamente sexy, ¿lo sabías?. — Le sonrió con picardía. — ¿Cómo es que todavía estás tan vestido? — Él le respondió con una sonrisa. Se incorporó y empezó a desabotonar la camisa mientras lo miraba a los ojos, mordiendo su labio inferior. Dejando el torso de Hyungwon desnudo. — Ahí esta, para mi placer.

Él sonrió levemente avergonzado.

— Que lo disfrutes. — Le guiñó un ojo.

Luego de darle oral durante unos minutos, causando que se retorciera levemente de placer, y haciéndolo sentir aún más excitado, la levantó y aprovecharon el sillón, el cual para su comodidad era bastante grande. Aunque Eyra se cuidaba con anticonceptivas, de todas formas hizo que él use un preservativo. Siempre había sido muy responsable con su cuerpo.

Luego de una hora de sexo, con un par de cambios de poses en medio, ella llegó al orgasmo. Lo que amaba del sexo era el poder que tenía de hacerla olvidar de todos sus problemas. Como si el tiempo se detuviera, y el trabajo, los estudios, las constantes responsabilidades del día a día dejarán de existir por un rato. Su cerebro solo se concentraba en el placer que sentía, como si no pudiera pensar en otra cosa, salvo en el alivio de llegar al orgasmo.

Le dió oral hasta que él acabó en su boca. No se iba a mentir, se había sorprendido cuando había sentido su erección, porque no estaba nada mal en tamaño. Seguido de eso fue al baño a lavarse la boca, y arreglarse un poco. Cuando volvió Hyungwon ya tenía sus jeans puestos de nuevo y estaba comenzando a abotonar su camisa.

— Lo disfrute mucho. — Le sonrió y dejando su pecho a medio cubrir, recogió la camisa de Eyra y la ayudó a ponérselo.

—Yo igual...—Se sentía pensativa, bastante cansada y una sensación en su pecho le generaba la idea de que algún hechizo se había roto.

Hyungwon se sentó en una de las sillas que acompañaba la mesa de la sala y agarró su celular.

— ¿Te gustaría que cenemos juntos? Yo invito. Podríamos pedir algo, me siento algo cansado como para que comamos afuera. — Le dedicó una sonrisa llena de modorra y casi disculpas.

Shownu se encontraba en la cama de Kihyun con la mente en blanco. Observaba a su amigo que estaba en la pc jugando Overwatch.

— No no no por ahí no. Si, matalo, mierda. ¿¡Eh!? NO, DALE, ES MI KILL MIERDA. — Estaba completamente absorto. Podía sentir la risa de Changkyun desde el auricular.

Cuando terminó la partida Kihyun se sacó sus auriculares y los dejó de lado. Se volteó hasta quedar frente a Shownu.

— ¿Se puede explicar esa cara de mierda en estado zombie? Estoy plenamente consciente que eres un depresivo de mierda, pero POR DIOS. ¿La depresión es contagiosa? Porque siento como si fuera a morir de solo verte.

— No estoy triste. — Le contestó lo más cortante que podía. No quería caer en sus provocaciones.

— Nunca dije que lo estuvieras.

Silencio.

— Solo digo que conozco el estado. — Replicó su amigo. — Todavía no sabes si simplemente es un amigo o que. Si fuera un novio, ¿realmente te sorprende?, es linda, y con lo poco que hable parece sumamente agradable, una monada. A mi me sorprendería que no tuviera a ningún chico por ahí. — Agarró un pequeño almohadón que tenía y se lo tiró a la cara de su amigo, sacándolo de su trance. — EY, SI, ¿SHOWNU? TE ESTOY HABLANDO, NO SE SI TE DISTE CUENTA.

— Te estaba escuchando. — Le tiró de vuelta el almohadón. — Ya, ya, entendí. No se que quieres que haga.

— Que te vuelva el alma al cuerpo. — Empezó a contar con los dedos. — Que intentes pelear por la chica que llama tu atención después de tanto tiempo, o juro que si puedo me la tiro yo, que ganas no me faltan. Y... Que tires la basura. Pero vuelve eh, no te tomes literalmente el tirar la basura, que te quiero basura y todo.

Shownu rió y pretendió ahorcarlo y luego de despeinarlo, cosa que sabía que lo fastidiaba, se dirigió a tirar la basura.

Bajo por el ascensor y cuando se disponía a dejar la basura en su lugar, se cruzó con Eyra. Le estaba dando la espalda, despidiéndose del tipo que había visto antes. La escuchó reírse levemente y vio cómo el sujeto le daba un rápido beso de despedida, cosa que provocó que le hirviera la sangre.

Cuando Eyra se dio vuelta, levemente si sonrojada, se encontró a Shownu mirándola con una mirada casi robótica. Sintió como si todo el color se hubiera ido en un segundo.

— Hola. Buenas noches. — La saludó fríamente.

— Hola. — Respondió con nerviosismo, mientras ambos volvían hacia el ascensor. El ambiente se sentía sumamente tenso.

— ¿Cómo estas? — Miró su mirada fría.

— Bien. — Nunca le devolvió la mirada. Estaba concentrado observando las luces que indican en qué piso estaba el ascensor.

Cuando las puertas se abrieron ambos encontraron en silencio. Marcaron el piso y sintieron como si él ascensor, a propósito, ascendiera en cámara lenta.

Piso 1. Marco la luz. No se miraban y Eyra sintió que iba a explotar de la creciente tensión.

Piso 2.

— Este...— Antes de que pudiera formar cualquier oración coherente Shownu la aprisionó bruscamente contra la pared del ascensor y, agarrando su cara con firmeza, la besó con pasión.

Respondió al beso gimiendo muy leve sobre sus labios. Sentía todo su cuerpo contra ella. No tenía salida. La intensidad del beso la estaba acalorando y sentía como si una electricidad recorriera todo su cuerpo. No podía pensar en nada, salvo en sus labios, carnosos y suaves, pero intensos y demandantes. Sus lenguas se encontraron y Shownu puso una mano en su cintura acercandola mas hacia él. Pudo sentir como una importante erección chocaba contra la parte baja de su abdomen.

Ya no estaba segura en cual piso estaba. Pero estaba segura de que ya iban a llegar. De golpe, no quería.

Shownu la libró de la prisión que había hecho con su cuerpo. Ambos tenían los labios enrojecidos y rodeados levemente de saliva. Sosteniendola por el mentón, la miró fijo.

— No se cuantos imbéciles tendrás detrás tuyo pero te aviso que si tengo que competir contra los que haya, voy a ganar.

Las puertas se abrieron y vio como él se precipitó hacia su departamento, antes de entrar, la miró y mordió levemente su labio inferior. Dejándola en el lugar con mil preguntas y pensamientos erráticos en su mente.   

AMOR LIBRE | Shownu (+18)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora