Los miembros se miraban entre sí, no sabían que decir, ni siquiera el capitán. Finalmente Nishinoya habló.
-Antes que nada, ¿conocemos a Kitsune, Inu y -miró a quien estaba conduciendo- Fukuro?
Busqué las rendijas en las que debían estar los ojos del enmascarado, este asintió.
-Sí -dije secamente- los conocéis bien. En la base os presentaremos y haremos una fiesta de bienvenida si os apetece, pero ahora necesito saber que opción elegís. Nos estamos quedando sin tiempo.
-Deberíamos ir ayudarlos, estoy seguro de que en verdad hay un peligro. -propuso Daichi fijándose en mi mejilla, donde la sangre todavía emanaba, aunque ya en pequeñas cantidades. Kiyoko se fijó en mi herida y me tendió un pañuelo, lo acepte murmurando un gracias y lo presioné en el corte.- No creo que nadie merezca salir herido por problemas ajenos.
Encogí los hombros, sabía que eso último se refería a mí, pero no podía volver al pasado.
-¿Ayudamos a Kitsune y los suyos?
-Sí -dijeron al unísono
Me di la vuelta dirigiéndome hacia el conductor, un pinchazo en la cabeza me hizo detenerme. Fukuro se giró preocupado y el entrenador se levantó del asiento rápidamente por si caía.
-Estoy bien -dije tranquilizandolos- no es nada.
-No creo que no sea nada -replicó por lo bajo el enmascarado- ¿Estás seguro de que quiere conducir? -preguntó al darse cuenta de que esperaba impaciente a que se levantase.
-Sí, eso me distraerá un poco, me dará tiempo a pensar una estrategia. Tú intenta contactar con Kitsune .-hice una pausa- He conseguido información.
-¿Oh? ¿De verdad? -cuestionó mientras me cedía el sitio.
-Sí -me miró fijamente- no, no he matado a nadie -esto último lo dije en susurro, estas palabras tranquilizaron a Fukuro- son siete en cada preparatoria, no tienen armas de fuego, ni vehículos, así que tienen que tener bases repartida a través de los prefectura. Y por último, no tienen idea de quién les ha enviado, al menos a quien le he sacado la información.
-Pero... -comenzó a decir- tú ya sabes quién los ha enviado.
-No estoy seguro al cien por cien, pero es lo más probable. -mis ojos brillaron- hablé con la chica que nos dio la carta -tenía la completa atención del enmascarado- le pregunté si quien le había entregado el mensaje tenía algunas distintivo ya que ella no le pudo ver bien la cara. Me contó que había visto un tatuaje en su cuello. -apreté las manos que tenía sobre el volante y mis palabras se convirtieron en gruñidos- Era un «3» y unos kanjis.
Fukuro posó una mano en mi hombro.
-Sabíamos que volvería, desde el momento en el que le conocimos presentimos que no iba a acabar bien...
-Sí...
Alejó su mano y se colocó en uno de los dos asientos vacíos más adelantados. Sólo podía escuchar algún que otro murmullo de mis compañeros. Ukai se levantó y se acercó a mí.
-Hinata, se que nos vas a explicar todo cuando lleguemos a un sitio seguro, pero creo que deberías contestar a alguna pregunta. -miró atrás- al menos a tus compañeros de equipo.
-Lo siento... -susurré
-¿Eh? -preguntó confundido el rubio
-Lo siento -está vez lo dije más claro y alto- os pido perdón a todos por mentiros. Yo... no decidí esto, si pudiera cambiar el pasado lo haría, pero no puedo, así que lo que me queda es intentar decidir mi futuro...
ESTÁS LEYENDO
Cuervo
FanfictionEra un día como cualquier otro en la preparatoria de Karasuno, los alumnos reían o lloraban, según como les fuese en el ámbito escolar. Como cualquier otro día ordinario, el equipo masculino de voleibol practicaba en el gimnasio, pero... Una alumna...