Capitulo 7

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¿Que debía hacer ahora? Estaba perdiendo la compostura. Todo esto le recordaba esos dramas de pareja que tanto le gustan a su madre. El no quería eso, no quería actuar como la chica que llora a mares por lo que le hizo él novio. ¡ni siquiera estaban saliendo! Bakugou le había dejado claro que no quería nada con el, Entonces, ¿porque estaba haciendo todo esto?

— oye Bakugou —dice con un tono calmado mientras se voltea indeciso— ahórrate esto ¿vale? Solo...olvídalo y ya.

Estaba completamente desanimado, Su rostro denotaba tristeza.
Todo lo que había hecho fue una verdadera estupidez. Tenían que llegar a todo esto para que se diera cuenta del enorme error que había cometido.

— mierda... —se queja el rubio levantando la mirada y fijándola en el pelirrojo— Kirishima, realmente necesito hablar contigo.

— ya lo hiciste y creo que no es necesario alargar más esta cosa.

— por favor...

Eijirou realmente estaba sorprendido, aunque no lo demostrara, lo estaba. El pelirrubio estaba actuando con tanta tranquilidad y además su tono era triste pero tan suave de escuchar...eso lo hacía sentir peor. Saber que el chico solo actuaba de ese modo por el simple hecho de que se había vuelto el "tipo malo". Si no se le hubiera ocurrido esa idea, Bakugou apenas se acercaría a el.

— ahora no puedo, estoy realmente cansado. Será a la otra amigo. —fuerza una sonrisa y se despide con gestos de manos.

Atraviesa la puerta y comienza a recorrer los pasillos para salir de la escuela y dirigirse a su dormitorio.
No quería seguir pensando en eso, necesitaba descansar y olvidar muchas cosas que habían pasado.

Entra a su dormitorio, cierra la puerta con llave y se desmorona en el suelo.

— m-maldición! ¿Quién diría que esto sería tan difícil? —Sin darse cuenta, estaba en el suelo riendo y llorando.

Esto no era un error el cual no pudiera arreglar una conversación y una disculpa, pero el pensaba todo lo contrario. Se sentía horrible.

Era fin de semana y todos los estudiantes habían vuelto a sus casas. Kirishima estaba aún recostado en su cuarto, decidió quedarse en la escuela aprovechando la oportunidad de que no habría nadie.

— ¿habrá algo para desayunar? —se levanta dando un gran bostezo dirigiéndose a la cocina.

Aún se sentía cansado y sus ojos le ardían un poco pero eso no le detendría para levantarse a desayunar; la comida es primero.

Llegado a la cocina, se topa con Midoriya que estaba de pie sirviéndose un vaso de jugo.

— Buendía Kirishima kun. —le saluda el peliverde levantando la mirada en su dirección.

— ¿Midoriya? ¿No irás a tu casa? —dice algo confundido mientras se coloca frente a el tomando asiento en la barra de la cocina.

— si pero me e quedado dormido. —ríe mientras se rasca la mejilla— ah, Kirishima ¿quieres jugo? Es de naranja —le ofrece con una gran sonrisa en sus labios mientras saca otro vaso.

— está bien. —le devuelve una sonrisa nerviosa y acepta el vaso entre sus manos— muchas gracias.

— ¿ocurre algo? ¿No saldrás el fin de semana con Kacchan? —pregunta inocente. El no sabía nada de lo que había pasado recientemente.

El Chico y la BestiaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora