Let's Go Behind Bars [EDITANDO]

Capítulo 12 = Aveces el amor puede ser enfermizo

D A M I Á N

Wow, debe de ser un día alocado para que este tipo de vibra esté tan presente, de por si el aura del lugar es muy mala por estar rodeado de criminales, pero hoy está mucho peor que antes.

- ¿Damián? - voltee a ver a Pip, que estaba sentado a la orilla de la cama recojiendo su cabello en una coleta - tienes la mirada perdida - le miré un par de segundos sin decir nada.

- Te ves más lindo con el cabello suelto - sus mejillas se ruborizaron.

- Pero me veo más afeminado.

- ¿Que importa éso? - abracé para que quedara entre mis piernas con si espalda contra mi torso.

- Hay violadores aquí, Damián.

- ¿Y piensas que los dejaré tocarte? - susurré en su oído haciendo que se estremeciera - tu eres solo mío... - lamí el lóbulo y bajé poco a poco por detrás de ella, besando y lamiendo su nuca.

- Mhm... - note que apretó las sábanas de la cama. Su cara estaba muy roja, sus ojos cerrados y los labios entre abiertos.

- ¿Te gusta...?

- Ya sabes q-que sí... - sonreí por su respuesta. Seguí con mi tarea de excitarlo y metí una de mis manos dentro de su camisa y la otra en su pantalón.

- Van a vernos Da-mián.

- No me importa... - acaricié su entrepierna de arriba hacía abajo - que vean ésos violadores que me perteneces - Pip gimio. Alejó mis manos un momento y se dio la vuelta, sentándose sobre mi piernas y abrazando mi cuello. Lo tomé como un pase libre a continuar.

Tomé el borde de su camisa y la alcé para llevarla a su boca.

- Muerde - me obedeció. Volví a meter mi mano dentro de su pantalón y la ropa interior para sacar su miembro. Pero mis caricias no llegaron a más.

- Oye Damián necesito un favor - Pip se abrazó más fuerte a mí. Llevé mi mirada a la entrada de la celda y suspiré con fastidió al ver quién era - oh lo siento, ¿interrumpí algo? - le miré con odio por su maldita sonrisa burlona.

- ¿Y tu que mierda haces aquí?, no me digas que te dejaste encerrar solo para verme.

- No soy tan estúpido.

- Estoy ocupado ahora, Mike.

- Sí, eso ya lo note. Pero es importante.

Chasquie la lengua y miré a Pip, quién tenía su rostro hundido en el hueco de mi cuello como un niño asustado.

- ¿Dam? - acomodé su ropa e hice que bajara de mis piernas.

- Vuelvo en un segundo - me miró algo confundido. Dejé un beso en su frente y salí de la celda junto a Mike. Cuando estuvimos un poco más lejos de ella le di un pequeño empujón - ¿que carajo estás haciendo aquí?

- Creen que soy el líder de una secta o una mierda así, ¿y tú?

- No te incumbe.

- Tienes el mismo genio del asco de siempre.

- Si me interrumpes cuándo estoy por coger, claramente me voy a enojar, ahora dime que quieres.

Me miró algo serio. Extendió su mano hacia mi y quitó un pedazo de tela que tenía en la muñeca, mostrando una pequeña marca negra muy diluida, de una llama de fuego, la cual me pertenecía.

- Quiero renovar el contrato y... Iniciar otro - alcé una ceja.

- No tengo muy buena memoria pero, estoy muy seguro de que aún no pasa un año, y también estoy muy seguro de que los humanos no tienen dos almas.