— A.. Adrien —mi nombre proviene de sus dulces labios.
— Shh...—puse mi dedo indice sobre sus labios que estaba mas que seguro que desean ser besados por los míos— solo déjate llevar.
Corrí una parte de su cabello con mi mano dejándome el camino libre de su delgado cuello. Me acerque para depositar un leve beso ahí. Creo que no era de esperarse que estaría tan roja como nunca.
— Marinette...—susurre.
Podía sentir su piel tensarse. Despegue mis labios de su cuello para verla directamente a sus ojos. ¿Grave error? Quizás. Ya que al verla podía verme perdido en sus ojos. Estaba claro que mostraba confusión y nerviosismo por lo que pasaba. Pero eso era su encanto, su facciones de confusión la manera de su inocencia enloquecería a cualquier persona, o al menos a mi... Si, definitivamente me pasa a mi. Soy idiota al no pensar que ella pudo ser ladybug desde un principio y si hubiera un premio a la ceguera sera el que ganaría en ello.
— ¿¡¿Adrinkis?!? —alguien grito abriendo con fuerza la puerta sacándome de mi burbuja.
Sabia de quien pertenecía esa voz y aunque la quería, interrumpió el momento mas preciado que había en estos momentos de mi vida. ¿Como es que sabia en donde estaba cada rato? Me hubiera gustado darme una bofetada ahora mismo por la absurda pregunta que me había echo pero no lo haría por mas quisiera, no delante de my lady. Al voltearme pude ver fijamente a Chloe quien no tenia una mirada agradable, de echo jamas la tuvo.
N A R R A D O R
Ella sabia perfectamente que si había un berrinche por uno de sus caprichos saldría perdiendo. Aunque en su punto de vista le resultaba difícil a la rubia que su "querido" que ella era la chica"perfecta" para el , tenia dinero, fama y hermosura, lo que cualquier hombre quería. Se le cruzo en la mente la excusa que había inventado para poder ir hasta el. Había pedido permiso a la profesora para llevarla mochila a Adrien justificando que el chico no se sentiría bien para continuar, la profesora dudo un poco pero después de tanta insistencia por parte de la oji-celeste accedió dicho esto la chica no espero ni un segundo y se dirigió a la enfermería con las pertenencias del chico , pero grande fue su sorpresa al notar que dicho lugar se encontraba cerrado. Aunque logro convencer al conserje en que le diera la copia de la llave de la enfermería. Para Chloe, en el fondo tenia la certeza en que su amado no estaría con alguien fuera de su circulo social menos que una simple e insignificante panadera, como Marinette. Pero verlo a el y a la panadera en esa posición que no era tan comprometedora le incomodaba, demasiado que digamos.
Aunque el otro rubio tenia el semblante serio, no tenia intenciones de fingir su molestia. Mientras que la peli-azul estaba confundida. ¿Es que acaso las acciones de su amor eran provocado por la fiebre que tenia? Esperaba que si ya que no tenia otra explicación a su repentino cambio; por dentro, quería comerse las uñas ahora mismos.
— ¿Que haces tu aquí? —señalo Chloe a Marinette— ¿Es que no te basta ser....
— Detente Chloe —interrumpió el rubio, la manera de como se dirigía a su Lady no le había gustado para nada.
— Adrien—Definitivamente se sentía dolida al ver que estaba de lado de la peli azul en vez que estuviera en el suyo para cuando iba a contraatacar el rubio se adelanto.
— Ni se te ocurra decir algo ¿Es que no te cansas? —pregunto pero sabia la respuesta. Tendría que pararla de una vez aunque la llegara a lastimar pero era por su bien tanto como la de ella y la tranquilidad de ellos— Chloe te quiero si, pero como amiga y eso no va a cambiar. Yo no te quiero, yo no quiero nada contigo, no me gustas; me molesta en como alejas a mis amigos de mi y como tomas decisiones por mi sin pedírmelo. ¿Que autoridad tienes para decidir lo que quiero o no? No me gustan las ordenes, menos en que me manden alguien como tu . Marinette es la chica que me importa, entiéndelo por favor. Y si no piensas aceptarlo de ahora mismo dile adiós a nuestra amistad—si es que tenían una— vámonos Marinette.
Dicho eso agarro la mano de la joven y se fueron de ahí dejando a la rubio sola en la enfermería con el sentimiento roto ante lo que había dicho su "amado". Todos estos años en la que había estado enamorada del rubio y que era el único que estaba a su altura la había rechazado. En estos momentos le hubiera gustado que Sabrina estuviera a su lado para gritarle y desahogarse con ella si no fuera que justamente hoy había faltado por un resfriado al salir en la noche en busca de las cosas que Chloe había pedido. Aunque ella era consciente de la realidad ¿Por que seguía encapricharse con él? ¿Por que no le podía hacerle caso?.
— Deberías dejar de insistir —hablo alguien a sus espaldas.
La joven de cabellos amarillos se giro rápidamente para ver la persona que estaba detrás suya, Nathaniel. ¿Que hacia el aquí? Se pregunto ella.
— ¿Y tu quien eres para decirme que hacer?—pregunto con esa misma personalidad que podía irritar a cualquier persona, incluso a su padre aunque no lo admitiera. Pero al no haber respuestas del pelirrojo ella sonrió de lado— solo eres alguien insignificante...
— Para Chloe—le advirtió con la poca valentía que tenia.
— ¿Disculpa?—pregunto indignada— vuelve lo a repetir—ordeno— no eres na..
— ¡Cállate!—grito Nathaniel dejando atónita a la joven, era la primera vez que alguien le alzaba la voz— ¿Es que no te das cuenta? Si el no te llama, es por no quiere llamarte—hablo el pelirrojo quien ya no soportaba ser un espectador de los rechazos o excusas de Adrien hacia chloe. Mas con la escena que había visto hace poco segundos atrás y aunque no le agradaba sabia que tampoco merecía recibir ese trato— Si no te invita a salir, es por que no desea verte. Si te trata como comino es por que le importas un comino. Y si te deja ir es por que no quiere estar contigo. Si el te quisiera, aunque sea un poco, hubiera aceptado a todas tus propuestas desde un principio así de fácil—refiriéndose a las invitaciones rechazadas de chloe por Adrien— Necesitas a alguien que sabe que tiene al frente, que te valore y se esfuerce por ti cada día. No alguien que no ve lo muchos que vales, que no ve lo que puedes aportar en su vida—dijo mientras caminaba hacia la puerta hasta estar a un paso para irse, gira su cabeza por encima de su hombro para poder verla por ultima vez— existen dos clases de hombres: los que te quieren y lo que no—dicho eso se fue del salón dejando a la joven sola definitivamente.
Todo lo que había dicho era verdad. El nunca la quiso y jamas iba a lograr en que la quiera, aunque sabia en el fondo quería creer que no era verdad. Sintió sus mejillas mojadas, levanto la vista para ver de donde caía agua pero lo único que vio fue el techo estaba totalmente seco; sin humedad a la vista. ¿De donde provenían entonces? Saco el pequeño espejo que siempre traía en su bolso, el agua que creía que provenía de otro lado provenían de sus ojos, era lagrimas. Estaba llorando.
CONTINUARA...
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Sous Me Charmes [Adrianette]
Fanfiction«Bajo mis encantos» Los padres de Marinette tendrán que ir a una convención donde se presento un pequeño problema. Al ser informada de ello Marinette se imagino que tendría que ocuparse del negocio mientras ellos no estaban, pero pensó mal. Se queda...