Nadie Como Nosotros.

Capitulo 37: "Es un niño".

Sus manos en mi piel disfruto de la agradable sensación de su calidez, es como estar en el cielo sonrió cuando sus labios tocan mi cuello si que lo extrañaba que estuviera tan cerca de mi, es como si nunca se hubiera marchado, él esta aquí conmigo sus caricias se siente tan reales pero se que solo es parte de un dulce sueño, una simple ilusión.

– Keira, te amo- Me dice al pido con una suavidad que me conmueve cada fibra de mi ser- te amare por siempre.

Sus palabras hace que llore porque se que no es real.

– Te amo Matt- Le respondo con la misma intensidad entre mis tristes sollozos.

– No llores, mi amor… Recuerda que siempre estar contigo con los dos- Toca mi vientre.

– ¿Por qué tenias que dejarme? ¿Por qué, Matt?- le digo llorando él me sonríe con ternura y con su pulgar limpia mis lagrimas.

– Que me haya ido no significa que no este, Keira. A veces la vida no es justa pero aun así es buena y por lo tanto hay que vivir aunque a veces cueste.

– Si tanto pudiera hacerlo algo para que volvieras- acaricio su rostro es tan perfecto- Te extraño, cada día mas. No hago otra cosa que pensar en ti.

– Yo también te he extrañado, amor mío. Nunca habrá nadie como nosotros, Keira.

En instante suena el teléfono, lo cual hace que me despierta sobresaltada mi corazón latiendo con fuerza, llevo mis dedos a la cadena que me regalo Matt como todos los días he estado soñando con él pero se sienten tan reales, como deseo que todo sea mas que un sueño, él aparezca en la puerta y la emoción de decirle que será padre.

Tomo el teléfono es un mensaje de Amber “Hola Kei, buenos días… Recuerda que hoy tienes cita con el obstetra por fin sabré si tendré una sobrina o sobrino, estoy emocionada, te quiero.”.

Su mensaje me hace sonreír, Amber ha estado como loca con la llegada del bebe de hecho había insinuado vivir un tiempo conmigo pero le dije que no me daba un poco de pena con Tobías aunque él seguro lo habría aprobado.

“Buenos días Am, tu mensaje me ha despertado… Estoy igual que tu de emocionada, primero iré al supermercado a comprar unas cosas y nos vemos mas tarde”.

Le doy enviar y me levanto de la cama, son las 9 de la mañana últimamente me da mucho sueño mi doctor me dijo que es parte del embarazo también como las idas al baño a cada rato por lo menos ya no tengo nauseas matinales.

Entro en el baño, miro mi creciente pancita en el espejo es increíble lo rápido que están pasando los meses acabo de cumplir mis 18 semanas de embarazo siento un fuerte pataleo en mi interior que me hace sonreír.

– Oh, alguien se ha despertado también- Sonriendo.

Termino de cepillarme, bañarme, vestirme y también de desayuna…. Luego tomo mi bolso y salgo de la casa. Tengo que ir al supermercado a comer unas cosas que hacen falta en casa.

Es un día hermoso afuera no hace tanto frio, aun recuerdo en diciembre nunca había llorado tanto como lo hice a fin de año, extrañaba a mis padres, a mi abuelo y a Matt. De solo pensarlo mi corazón se arruga pero en este momento tengo algo que debo alegrarme mejor alguien que me mantiene viva y esa persona es mi hijo por el tengo que luchar.

Llego al supermercado, tomo uno de los carritos coloco adentro fruta, leche, cereal, legumbres entre otras cosas.

– ¿Keira?- Dicen mi nombre volteo para ver quien me llama.

– ¿Nathan?- Digo con sorpresa, él me abraza con mucha calidez- Me alegro tanto verte.

– Y tu… estas bellísima, estas...