Amor a segunda vista 》ChanBaek/♡\BaekYeol

"Te vi y te seguí, no puedo evitar seguir enamorado de ti "

ChanYeol no sabía cómo tomarse lo segundo que BaekHyun le había pedido y es que, vamos, el mas que nadie deseaba que ese matrimonio no se realizará, tantas veces que había pospuesto la ceremonia por el más mínimo detalle. Esta era su oportunidad de oro.

BaekHyun se la estaba poniendo en bandeja de plata, sin embargo ahí estaba ahora. Dudando y pensando con profundidad.

Conoció al chico hace dos años y podría jurar que fue atracción inmediata. Él era muy guapo y todo él físicamente se sentía atraído por el rubio chico, pero no pasaba de ese nivel. Mero deseo carnal y ya. Pensó que con el tiempo podría llegar a sentir algo más que sólo ganas de follárselo, pero no sucedió. Ese BaekHyun era tan pulcro, escueto y políticamente correcto que le daba escalofríos.

Su familia estuvo muy contenta con la boda, su madre lo animaba a seguir adelante y era la que se encargaba de los detalles, por ella es que había llegado tan lejos como para comprar una casa y mudarse a vivir juntos. Si, porque ahora compartían hogar con la promesa muda de contraer nupcias en un futuro próximo.

La que no parecía contenta con la idea era YooRa, su hermana mayor. Ella siempre había mirado de forma sospechosa a BaekHyun no terminando de agradarle, aunque el chico hiciera de todo por nunca llevarle la contraria. ChanYeol sabía que eso no divertía a su hermana y solo dejaba de lado sus comentarios pensando en su inmadurez.

En esos dos años había logrado una convivencia con BaekHyun, una demasiado monótona y aburrida. ChanYeol no podría negar el no haber tenido otros amantes, claro que los tenía. Pero siempre volvía a BaekHyun, porque el sexo con él se sentía tan bien que solo por eso mantenía el compromiso. Y porque la cláusula del testamento aún no estaba completa a pesar de ya tener la dirección general.

Pero BaekHyun, ese BaekHyun de hace dos años lo hacía sentir tan gris. Su vida se llenaba de una extraña nube oscura y no sabía porque. Lo absorbía y él quería terminar eso.

Estaba todo saliendo perfecto, llego a pensar en algún momento del día después de que BaekHyun se fuera al ser interrumpidos por la secretaria del doctor informando la cirugía de un CEO importante. El chico se fue conforme con la promesa de que ChanYeol lo llamaría de nuevo para hablar sobre ese tema, terminar y aclarar los pendientes. Fue lo que le dijo el mismo al pelinegro.

Estaba tan concentrado imaginando un futuro ya sin BaekHyun que no se dio cuenta de los golpes en la puerta.

—Veo que estás ocupado, cuñado. — la voz del recién llegado hizo que ChanYeol se parará de golpe muy recto e hiciera una reverencia algo torpe.

—Oh vamos, Channie. Pensé que ya habíamos superado esa etapa. — rio el mayor tomando asiento frente al doctor.

Junmyeon vestía un traje de alta costura azul marino, su perfectamente bien peinado cabello hacia atrás y esa sonrisa amable adornando sus labios.

—Tu presencia sigue siendo imponente, hyung. — dijo con cautela mientras imitaba al otro y se sentaba en su respectivo asiento.

Junmyeon movió la mano restándole importancia.

—Gracias por dirigir la cirugía de mi padre, de verdad ChanYeol. En todo momento estuve confiando en tus manos.

ChanYeol se sintió halagado por su cuñado, ese importante hombre de negocios que era como un hermano de verdad.

—Nada que no se pueda hacer por la familia, hyung. Por cierto, ¿como esta Yeri? No le he visto estos días.

El mayor sonrió con más amplitud demostrado la alegría que solo un padre orgulloso puede tener.