"El perfume"

Capítulo 12: "Una nueva oportunidad al amor"

Una jovencita pelinegra miraba perpleja a un joven cabello de flama.

Milk, yo te amo desde hace algún tiempo, pero no sabía como decírtelo, decía Vegueta nervioso.

No juegues así conmigo Vegueta, dijo Milk.

Yo no estoy jugando es la verdad, decía Vegueta.

Eso no es cierto, dijo Milk logrando retirar su mano del agarre de la de Vegueta y parándose de la mesa para salir corriendo de la heladería.

Milk, dijo Vegueta colocando algunos billetes sobre la mesa, dejando las copas de helados casi completas para salir tras la pelinegra.

Minutos después:

Milk, espera, decía Vegueta que corría tras la pelinegra por las calles de la ciudad.

La pelinegra seguía corriendo hasta llegar a un parque donde vencida por el cansancio detuvo su loca carrera.

Milk, dijo Vegueta al llegar tras ella.

No quiero que digas nada más, dijo Milk sin mirarlo.

¿Por qué Milk?, ¿por qué te es difícil creer que alguien se pueda enamorar de ti?, decía Vegueta con tristeza.

Acaso no es obvio, dijo Milk.

¿Qué?, ¿qué es obvio?, dijo Vegueta.

Tú eres todo lo opuesto a mí, dijo Milk.

Pues es normal soy hombre, dijo Vegueta sonriendo colocándose frente a la pelinegra.

No estoy bromeando, no me refiero a eso y tú lo sabes, dijo Milk con calma.

Pues yo no estoy bromeando yo no veo lo opuesto solo eso, dijo Vegueta con seriedad.

Tú eres popular, unos de los chicos más atractivos de la preparatoria, puedes estar con la chica más bella de ella y te fijas en mí, ¿crees que yo puedo creerme eso?, no Vegueta, tú como todos solo buscas burlarte de mí y yo no pienso permitirlo, dijo Milk aguantando las ganas de llorar.

¿Quién te hizo tanto daño para que tengas el autoestima tan bajo?, para mí tu eres un ser maravilloso, con una belleza interna que me cautiva, un perfume natural que hechiza, posees el cabello azabache más bello que e visto, tú nariz es tan perfecta tus labios que puedo decir de ellos, son hermosos, tu piel tan suave y delicada, tus rasgos tan finos y delicados, eres bella Milk, no comprendo porque no puedes creértelo, dijo Vegueta.

¿Cómo puedes ver eso?, si nunca me e quitado los lentes, y ellos cubren parte de mi nariz y rostro, dijo Milk intrigada.

Lo veo con los ojos del alma, con los ojos del amor, tú sabias que cada persona cuando se enamora de alguien para ellos ese ser es siempre el más bello sin importarles lo que opinen los demás, para mí tú eres la más bella Milk, por que la belleza no es solo una apariencia es lo que llevamos dentro y tu posees una belleza interna maravillosa tanto así que se proyecta en el perfume natural de piel, ¡Yo estoy enamorado de ti Milk¡ solo te pido una oportunidad para demostrarte cuanto te amo, dijo Vegueta volviendo a tomar las manos de la pelinegra.

¿No te avergonzarías entonces de andar con alguien como yo?, dijo Milk para probar al joven cabello de flama.

No, yo respeto tú forma de ser, además está es la Milk que me a enamorado, decía Vegueta.

No te importara lo que los demás murmuren si ten ven conmigo la chica más fea de la preparatoria, dijo Milk.

Tú no eres fea Milk, eres bellísima, para mí lo eres y eso es lo que cuenta no lo que piensen los demás, dijo Vegueta con firmeza.